El ¨¢rea de Barcelona tiene a¨²n 1.720 hect¨¢reas disponibles para suelo industrial
La reserva existente se agotar¨¢ en un plazo m¨¢ximo de 10 a?os, seg¨²n un informe
Las empresas tienen a¨²n una buena cantidad de suelo industrial para instalarse en Barcelona. Contra el tradicional argumento de falta de suelo, las reservas actuales del ¨¢rea metropolitana ascienden a 1.720 hect¨¢reas. Aun as¨ª, el suelo disponible se agotar¨¢ en un plazo m¨¢ximo de 10 a?os si no se ponen en el mercado nuevas ¨¢reas, seg¨²n el Atlas Industrial de la Regi¨®n Metropolitana de Barcelona, presentado ayer.
El ¨¢rea metropolitana de Barcelona es el granero industrial de Catalu?a. Hasta 10.000 hect¨¢reas est¨¢n destinadas a suelo industrial, seg¨²n los datos del Atlas Industrial editado por el Pacto Industrial de la Regi¨®n Metropolitana de Barcelona, Barcelona Regional y el Consorcio de la Zona Franca. Esos 100 millones de metros cuadrados -equivalentes a 15.000 campos de f¨²tbol- son la base de un viejo lugar com¨²n: la carest¨ªa de suelo industrial derivada de la saturaci¨®n de algunas zonas, que dificulta la implantaci¨®n de nuevas empresas y encarece los precios.
El informe pone en cuesti¨®n este aspecto. Seg¨²n el equipo de la Universidad de Barcelona que ha elaborado el atlas, las reservas existentes ascienden todav¨ªa a 1.720 hect¨¢reas, b¨¢sicamente en cuatro comarcas: Vall¨¨s Oriental, Alt Pened¨¨s, Vall¨¨s Occidental y Baix Llobregat concentran m¨¢s del 80% de ese suelo. Aun as¨ª, el informe augura que las reservas existentes se agotar¨¢n "en el mejor de los casos" en s¨®lo una d¨¦cada, si no se crean nuevas ¨¢reas y si se mantiene una pauta de ocupaci¨®n similar a la de los ¨²ltimos a?os.
La concentraci¨®n industrial es muy elevada en el Barcelon¨¨s, el Baix Llobregat y el Vall¨¨s, especialmente en municipios como Barcelona, Terrassa, L'Hospitalet de Llobregat, Santa Perp¨¨tua de Mogoda y Barber¨¤ del Vall¨¨s. Por contra, las reservas de suelo se encuentran en localidades como Vilafranca del Pened¨¨s, Castellbisbal y Sant Esteve Sesrovires. Sin embargo, los datos "son aproximados. No sabemos la superficie que ya est¨¢ puesta en el mercado y la que est¨¢ retenida a falta de permisos o pendiente de urbanizar", explic¨® Maria Buhigas, una de las autoras del estudio.
Minifundismo
La concentraci¨®n del suelo industrial en unas pocas comarcas contrasta con la dispersi¨®n de las empresas, diseminadas en pol¨ªgonos industriales. 60 de los 156 municipios de la regi¨®n disponen de una reserva industrial inferior a 10 hect¨¢reas, un dato que ha acentuado "la proliferaci¨®n de pol¨ªgonos sin control", reconoci¨® Juan Carlos Montiel, director general de Barcelona Regional. "Cada Ayuntamiento se ha dedicado a hacer la guerra por su cuenta, lo que ha derivado en problemas de log¨ªstica y en la creciente congesti¨®n de las infraestructuras. Hay que recuperar el Incas¨°l como organismo planificador para reducir la actual ineficiencia que provoca la construcci¨®n de pol¨ªgonos en lugares a menudo de lo m¨¢s ins¨®lito", dijo.
El informe concluye que resulta inconveniente "seguir aplicando s¨®lo criterios estrictamente locales, sin una visi¨®n de conjunto supramunicipal". "Es absurdo que el pol¨ªgono industrial se haya convertido en un equipamiento municipal m¨¢s. No es lo mismo una escuela o un polideportivo que un pol¨ªgono, que necesita determinados servicios y una visi¨®n m¨¢s global, como la que ha tenido por ejemplo el despliegue hospitalario por el territorio", argument¨® Montiel.
La escasez de suelo industrial para ubicar factor¨ªas en Barcelona es una queja constante por parte de muchas empresas, avalada por algunas de las consultoras inmobiliarias que operan en este segmento. Seg¨²n las consultoras, el precio de este suelo es muy elevado, lo que retrasa la puesta en marcha de algunos proyectos, que incluso llegan a renunciar al ¨¢rea metropolitana -y por tanto a la proximidad al puerto y el aeropuerto- y se instalan en solares m¨¢s asequibles.
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