La UCI amenaza a la Vuelta

La guerra cada vez menos encubierta entre la Uni¨®n Ciclista Internacional (UCI) y los organizadores de las grandes carreras (Tour, Vuelta, Giro) adquiere seg¨²n pasan los d¨ªas tonos m¨¢s desagradables, como bien pudo comprobar hace unos d¨ªas V¨ªctor Cordero, director general de Unipublic, empresa organizadora de la Vuelta a Espa?a.

Una carta remitida desde Aigle (Suiza) y firmada por Alan Rumpf (coordinador del comit¨¦ ejecutivo del UCI ProTour, la contestada estructura del ciclismo profesional puesta en marcha por la UCI para agrupar a las mejores carreras y equipos) es el n¨ªtido s¨ªntoma de los malos vientos que recorren las relaciones entre dos de las estructuras m¨¢s importantes del ciclismo.

En ella, Rumpf, en el puesto desde los tiempos en que Haein Verbruggen y Manolo Saiz pusieron en marcha el ProTour, se dirige a Cordero en, m¨¢s o menos, resumiendo la misiva, los t¨¦rminos siguientes:

Sabes, querido V¨ªctor, que una comisi¨®n est¨¢ estudiando cambios en el calendario para la temporada 2009, y no se te escapa que esos cambios se pueden adelantar a 2008, y ya conoces el inter¨¦s de la Vuelta a Alemania para disputarse en septiembre, coincidiendo con la Vuelta a Espa?a, lo que, por otra parte, satisfar¨ªa bastante a los equipos que participan a continuaci¨®n en la Vuelta a Polonia...

Sabes, V¨ªctor, tambi¨¦n, que las tres semanas de duraci¨®n de la Vuelta son un asunto que est¨¢ a debate en estos momentos...

Sabes, V¨ªctor, que algunos de los 20 equipos del ProTour nos han hecho saber que desear¨ªan que se les liberara de la obligaci¨®n de participar en la Vuelta...

No sabemos, V¨ªctor, en qu¨¦ posici¨®n se encuentra la Vuelta en estos momentos: si seguir¨¢ la senda del Tour y del Giro, dispuestos a romper con el ProTour, o si sigue fiel a la UCI y a nuestra reforma del ciclismo, pero nos gustar¨ªa conocer tu posici¨®n r¨¢pidamente...

Un mensaje similar, con parecidas consideraciones, ha recibido en Mil¨¢n el organizador del Giro de Italia, Angelo Zomegnan.

Cordero a¨²n no ha respondido personalmente a la carta de Rumpf, aunque, cuando lo haga, piensa recordarle el valor de la Vuelta, su importancia deportiva, su tradici¨®n, que forma parte del patrimonio hist¨®rico del ciclismo, que las tres semanas son intocables... "Pero yo no creo que la carta de Rumpf sea amenazante", templa Cordero; "simplemente, es un recordatorio de c¨®mo est¨¢n las cosas".

La respuesta del colectivo de organizadores, una asociaci¨®n internacional presidida precisamente por Cordero, lleg¨® el viernes pasado. En la asamblea mantenida en Par¨ªs, el 81% de los presentes, 87 organizadores, cada carrera un voto, y secreto, no a mano alzada, apoy¨® la decisi¨®n de denunciar al ProTour ante la Comisi¨®n Europea. "Necesitamos que una instituci¨®n exterior zanje la guerra", dijo Cordero; "para nosotros, el ProTour es sobre todo denunciable por haberse constituido en liga cerrada, sin ascensos ni descensos, sin que decidan los m¨¦ritos deportivos. Y s¨®lo hubo nueve votos en contra, incluso algunas carreras del ProTour votaron en contra".

El arbitrio de la Comisi¨®n Europea servir¨¢ a los organizadores para blindarse frente a las demandas que se espera que lleguen de parte de los equipos. El gran atractivo del ProTour para los conjuntos resid¨ªa en el hecho de que garantizaba a los 20 seleccionados el derecho a participar en el Tour a cambio de cumplir una serie de estrictas medidas, sobre todo en el orden financiero y ¨¦tico. Sin embargo, la ruptura de los organizadores, que ya han planeado para 2007 unos criterios diferentes de admisi¨®n, dejar¨¢ privados del bomb¨®n a unos cuantos.