El oso mete la pata en Os Ancares

La Eva del oso pardo gallego pesa unos 85 kilos, tiene cuatro puntiagudos colmillos y, gracias a su fin¨ªsimo o¨ªdo, detecta a larga distancia a los machos en celo. Reside en la parte leonesa de Os Ancares y su presencia en tierras fronterizas es la esperanza de que en un tiempo no muy largo vuelva a Galicia esta especie en peligro de extinci¨®n, de la que s¨®lo existen en la Pen¨ªnsula Ib¨¦rica un centenar de ejemplares. Quienes conocen bien a estos animales conf¨ªan en que detr¨¢s de la osa que se ha instalado en el l¨ªmite con Le¨®n llegue m¨¢s de un Ad¨¢n y muchas cr¨ªas, es decir, los primeros habitantes de una futura reserva gallega de oso pardo.

La Fundaci¨®n Oso Pardo (FOP) ha contabilizado este a?o la visita de tres miembros de esta especie al territorio gallego. Los acuerdos firmados por esta entidad con la Xunta desde 1997 han permitido preparar el terreno para que los plant¨ªgrados dejen de hacer turismo en Galicia y opten por fundar aqu¨ª un hogar estable. Seg¨²n explica Guillermo Palomero, presidente de la fundaci¨®n, una cuadrilla de tres personas (dos del ayuntamiento de Cervantes y otro de Navia de Suarna) lleva tiempo instaurando "un buen clima social" para que los habitantes de Os Ancares reciban sin resquemores a los que se espera sean pronto sus nuevos vecinos.

La llegada de una osa a la frontera con Le¨®n ayudar¨¢ a que se cree una reserva gallega

Para que la imagen de los Ursus arctos no se ensucie, la patrulla de la Fundaci¨®n Oso Pardo se encarga de prevenir los posibles da?os que estos animales puedan provocar. Sus miembros instalan pastores el¨¦ctricos en cultivos y colmenares para evitar que los osos caigan en las tentaciones de la miel y el alimento ajeno y retiran los lazos de acero que colocan los lugare?os como trampa para los jabal¨ªes, con el que fin de que ning¨²n plant¨ªgrado resulte herido por error. "Cooperan adem¨¢s con los cazadores y mantienen muy buena relaci¨®n con ellos", explica Palomero.

Seg¨²n la Fundaci¨®n Oso Pardo, la poblaci¨®n humana de Os Ancares no tiene por qu¨¦ temer el regreso de los plant¨ªgrados a la zona. El presidente de la entidad afirma que el oso pardo "cohabita muy bien con la poblaci¨®n rural" y que su presencia es una "marca de calidad" del ecosistema. Palomero defiende que se trata de un animal "compatible con el turismo, la caza y la agricultura".

La Conseller¨ªa de Medio Ambiente financiar¨¢ con 269.000 euros hasta 2008 las labores para que los plant¨ªgrados se instalen en Galicia. La localizaci¨®n en la frontera de Le¨®n de una hembra de oso pardo ha disparado la esperanza. En el mundo de estos mam¨ªferos, las hembras son las que fundan las ciudades. Mientras ellos llevan una vida n¨®mada y se desplazan por extensas superficies de terreno, las osas suelen elegir un ¨¢rea peque?a y quedarse en ella para hacer su vida.

El siglo XX se ceb¨® con el oso pardo. Hace diez a?os s¨®lo quedaban en la cornisa cant¨¢brica entre 70 y 80 ejemplares. El trabajo por evitar su extinci¨®n ha conseguido que, mientras en Europa sigue decreciendo su n¨²mero, en Espa?a su poblaci¨®n se acerque ya a los 130 miembros. El acuerdo firmado ayer entre la Xunta y la Fundaci¨®n Oso Pardo prev¨¦ la organizaci¨®n de actividades de educaci¨®n ambiental en colegios de Cervantes y Folgoso do Courel y la difusi¨®n de informaci¨®n sobre estos animales entre los cazadores.

El retorno del oso pardo no es el ¨²nico objetivo que se ha planteado la Conseller¨ªa de Medio Ambiente para los montes de Os Ancares. Este ecosistema gallego ser¨¢ declarado parque natural probablemente durante esta legislatura. Para que el cambio no coja por sorpresa a los vecinos, la Xunta aprobar¨¢ a finales de a?o un plan de desarrollo social y econ¨®mico que ordene las actividades y usos del terreno y los haga compatibles con su nueva categor¨ªa medioambiental. "Se pretende que todo este proceso se haga con el di¨¢logo, participaci¨®n y el mayor consenso posible de la poblaci¨®n y los colectivos implicados", se?alan fuentes de la Conseller¨ªa.

Os Ancares ser¨¢ parque natural y tambi¨¦n O Courel, la zona sur del macizo galaico. La Conseller¨ªa de Medio Ambiente anunci¨® ayer la creaci¨®n en esta sierra de una Estaci¨®n Biol¨®xica en colaboraci¨®n con la Universidad de Santiago. La entidad contar¨¢ con 600.000 euros para realizar una investigaci¨®n cient¨ªfica sobre los recursos naturales de estos montes.