Correa pide respeto a la democracia tras celebrar su victoria en Ecuador

El izquierdista Rafael Correa pidi¨® ayer una relaci¨®n de "mutuo respeto" democr¨¢tico para garantizar el futuro Gobierno de Ecuador. Con m¨¢s del 52% de los votos escrutados, el candidato de Alianza Pa¨ªs ya hab¨ªa logrado un 67% de los sufragios frente al 33% de su rival, el conservador ?lvaro Noboa, que hasta ayer a ¨²ltima hora a¨²n no hab¨ªa concedido la victoria en las presidenciales a su rival. Pese a ello, en la prensa escrita y los debates televisivos locales ya se habla de Correa como "el presidente electo".

En el pa¨ªs, el clima pol¨ªtico era, en general, bastante tranquilo tras la resaca electoral. El triunfo de Correa significa para Noboa que ha perdido su tercera final en unas presidenciales. Ecuador tiene, en todo caso, un nuevo presidente constitucional cuyo principal reto ser¨¢ el de terminar el mandato de cuatro a?os. Con los antecedentes ecuatorianos, el objetivo es casi un milagro: los tres anteriores mandatarios, Abdal¨¢ Bucaram, Jamil Mahuad y Lucio Guti¨¦rrez llegaron como mucho a la mitad de la legislatura. Tal vez por eso Correa, al festejar el triunfo electoral el domingo en Quito, fue muy moderado en su discurso, no vaya a ser cosa que se caldeen los ¨¢nimos ya antes del traspaso de poderes previsto para el pr¨®ximo 15 de enero.

"Hemos recibido este alt¨ªsimo honor con profunda serenidad, entendiendo esta victoria como un af¨¢n de cambio de los ecuatorianos", dijo Correa junto a su compa?ero de candidatura, Lenin Moreno. "No hay vencedores ni vencidos entre los ciudadanos. Es tiempo de humildad y de agradecimiento", a?adi¨®.

Consciente de que en la presidencia no tendr¨¢ apoyo parlamentario (apenas una veintena del centenar de diputados), el l¨ªder izquierdista dijo que esperaba tener una relaci¨®n de "mutuo respeto" con el Congreso, dominado por el Partido Renovador Institucional de Acci¨®n Nacional (Prian) de Noboa y la Sociedad Patri¨®tica del ex coronel golpista y luego ex presidente Lucio Guti¨¦rrez.

Federico P¨¦rez, diputado electo del Prian y candidato a presidir el Congreso, declar¨® ayer que no habr¨ªa una oposici¨®n "destructiva" y que apoyar¨ªa "los proyectos beneficiosos" para el pa¨ªs, aunque sin olvidar los principios de su partido. Lucio Guti¨¦rrez tambi¨¦n apareci¨® en televisi¨®n con un tono conciliador y repiti¨® lo dicho el jueves pasado frente a la prensa extranjera: "Tenemos que dejar a un lado nuestras diferencias y hacer una mayor¨ªa de cien diputados para poner en marcha este pa¨ªs y acabar con esa imagen de inestabilidad y caos. No nos eligieron para desestabilizar el futuro Gobierno, sino para ayudar a sacar a Ecuador adelante". Guti¨¦rrez, en principio, renunci¨® a la revancha pol¨ªtica contra Correa y los otros "forajidos" que estar¨¢n en el futuro gabinete, los mismos que en 2005 encabezaron las protestas que terminaron por derrocar al coronel.

Correa insisti¨® ayer en que el segundo decreto de su Gobierno ser¨¢ la convocatoria de una Asamblea Constituyente para acabar con el "clientelismo" pol¨ªtico. ?ste es el proyecto que m¨¢s fricci¨®n y desgaste puede causar al Ejecutivo. Correa interpreta que la ley le permite convocar una consulta popular para elegir la asamblea y muchos constitucionalistas le dicen que no, que tiene que pasar por el Congreso. En este tema se sabr¨¢ si Correa tiene mano izquierda y cintura pol¨ªtica o si, como predican sus enemigos, es tan soberbio y caprichoso como para llevar al pa¨ªs a una crisis por su obstinaci¨®n.

A pesar de la moderaci¨®n de Correa al proclamarse ganador y los mensajes de tranquilidad de pol¨ªticos de otras fuerzas, los inversores extranjeros no reaccionaron bien a la victoria del izquierdista: el valor de los bonos p¨²blicos ecuatorianos baj¨® ayer a un m¨ªnimo de seis semanas en Nueva York. Dentro de los modelos que hoy gobiernan Am¨¦rica Latina, al de Correa se lo pone en l¨ªnea con el del cubano de Fidel Castro, el venezolano de Hugo Ch¨¢vez, el boliviano de Evo Morales y el nicarag¨¹ense de Daniel Ortega. Modelos que son definidos como de izquierda, populistas y nacionalistas.