La venta de televisores planos LCD se duplicar¨¢ este a?o en Espa?a

El sector de electr¨®nica de consumo en Espa?a va viento en popa, con un crecimiento en facturaci¨®n del 15% al 20%, gracias a la espectacular demanda de un ¨²nico producto: los televisores planos LCD.

La venta de c¨¢maras, videoc¨¢maras, grabadoras y lectores de DVD se ha lentificado o estancado, mientras que el segmento de aparatos de sonido est¨¢ en sus horas m¨¢s bajas; incluso los reproductores port¨¢tiles MP3 muestran signos de agotamiento. A excepci¨®n de muy pocos productos, como los navegadores para autom¨®vil y sintonizadores externos de TDT, lo que m¨¢s compra el consumidor espa?ol, y est¨¢ salvando a fabricantes y tiendas, son los televisores, planos y grandes.

La consultora GFK calcula que este a?o se vender¨¢n en Espa?a un total de 1,8 millones de televisores LCD, el doble exactamente que el a?o pasado. Para gozo de los fabricantes y las tiendas, se facturar¨¢ casi el doble: 1.800 millones de euros frente a 930 millones el a?o pasado. El precio medio del televisor LCD sigue siendo de 1.000 euros. Mientras, los televisores de tubo contin¨²an bajando en picado y este a?o se vender¨¢n 1,8 millones de unidades, las mismas que LCD, cuando en 2005 fueron 2,5 millones de unidades. Ya ni la segunda vivienda vale para el refugio de los televisores gordos.

Aparte del total de unidades, se ha modificado radicalmente el tipo y tama?o del televisor LCD que se compra ahora respecto a hace un a?o. El tama?o m¨¢s vendido sigue siendo el de 32 pulgadas, que en estos dos meses de noviembre y diciembre representar¨¢ el 37% del total de televisores LCD frente al 31% del mismo periodo de 2005. Un crecimiento m¨¢s radical lo han experimentado los televisores de 37 y 40 pulgadas, las estrellas del momento, porque de representar el 5% de las ventas en unidades a finales de 2005 suponen ahora el 13%. Los datos de GFK muestran que este final de a?o los televisores LCD de 32, 27 y 40 pulgadas acaparan nada menos que dos tercios de la facturaci¨®n total.

Este auge de la demanda de televisores planos no ha sido regular a lo largo de 2006. Durante el primer trimestre las ventas fueron muy bien, conforme a las expectativas m¨¢s optimistas. Sin embargo, durante el segundo trimestre, coincidiendo con la campa?a del Mundial de F¨²tbol, no se cumplieron las grandes esperanzas que hab¨ªa depositado el sector con el acontecimiento y se revisaron a la baja las cifras del a?o, analiza Juan Carlos Ram¨ªrez, subdirector de GFK en Espa?a. Tras el periodo estival, la demanda ha repuntado y ahora fabricantes, vendedores y analistas est¨¢n convencidos de que se alcanzar¨¢n las expectativas halag¨¹e?as de principios de a?o.

Los televisores planos crecen en tama?o y est¨¢n mejor dotados que hace un a?o, con TDT integrado y panel y electr¨®nica m¨¢s eficacces.

Esta preponderancia de los televisores grandes en las tiendas tiene su correspondencia en la demanda y gustos del consumidor. Los sondeos de opini¨®n revelan, y las ventas los avalan, que el espa?ol quiere el televisor m¨¢s grande y bonito que alcance su presupuesto y quepa razonablemente en su sala de estar.

Javier Freijo, director general comercial de Sharp Espa?a, destaca que es el deseo de los consumidores por tener el espect¨¢culo en casa lo que explica la compra de un televisor de gran tama?o, de 37 o 40 pulgadas. Incluso, apunta, existe el "factor de arrepentimiento" por no haber adquirido un modelo a¨²n mayor.

Para que la imagen se vea lo mejor posible en una pantalla grande, los fabricantes han incorporado en sus televisores planos una sofisticada electr¨®nica que procesa y corrige al m¨¢ximo los defectos de la se?al de entrada. Adem¨¢s, han incorporado en la mayor¨ªa de televisores planos, incluso en los de precio m¨¢s econ¨®mico, el sintonizador digital o TDT para recibir la se?al sin interferencias.

En el ¨²ltimo a?o, el principal avance se ha producido en el panel, que es el componente fundamental del televisor plano. Un panel de ¨²ltima generaci¨®n se puede ver desde una esquina sin mayores problemas, porque el ¨¢ngulo de visualizaci¨®n alcanza los 178 grados en muchos casos, tanto en horizontal como vertical. Otro aspecto importante, el contraste o relaci¨®n entre las luces y las sombras, tambi¨¦n ha mejorado sensiblemente. Y la paleta de colores es m¨¢s viva; incluso los negros son m¨¢s profundos y no grises como hace un par de a?os.

Bajada de precios

Todas estas mejoras del panel y del proceso de la se?al hace que la imagen se vea razonablemente bien en un televisor de gran tama?o y sin que sea de alta definici¨®n, que tardar¨¢ en llegar y para la que no hay planes concretos por el momento en Espa?a. Lo m¨¢s importante, de todas formas, es que estas mejoras apreciables del producto se han producido con una baja generalizada de los precios.

El precio medio sigue estando en 1.000 euros, pero ahora se tiene por este importe un televisor LCD de 32 pulgadas con TDT integrado y con los ¨²ltimos avances. Hace un a?o, con los mismos 1.000 euros apenas se ten¨ªa uno de 26 pulgadas y sin sintonizador TDT.

El presupuesto del consumidor no ha variado, sino que se compra un televisor m¨¢s grande y de mejor calidad.

El televisor LCD de 32 pulgadas acapara el 37% de las ventas en unidades en estos momentos y el 47% del total que se factura por este tipo de aparatos.

Los televisores LCD de menos de 32 pulgadas, que hace justo un a?o representaban el 64% de todas las unidades vendidas y el 42% de la facturaci¨®n, este final de a?o suponen la mitad de las unidades y un tercio de la facturaci¨®n.

Los televisores LCD de m¨¢s de 32 pulgadas, b¨¢sicamente de 37 y 40 pulgadas, que aportaban en 14% de la facturaci¨®n, ahora son casi una cuarta parte del total gastado por los espa?oles en este producto en esta ¨²ltima parte del a?o.

El avance de los televisores LCD no se ha producido, en cambio, en los televisores de plasma. El a?o pasado se vendieron en Espa?a 150.000 unidades, menos de las previstas inicialmente, y para 2006 se calcula que rondar¨¢n las 160.000 unidades, o 170.000 como m¨¢ximo, cuando hace un a?o se preve¨ªan 180.000 o incluso 200.000 unidades para todo 2006. Este relativo estancamiento se produce, adem¨¢s, cuando el 90% de las ventas se sigue concentrando en el tama?o de 42 pulgadas y ha habido en el ¨²ltimo a?o una ca¨ªda de su precio medio del 25%.

Un televisor de plasma cuesta ahora, de promedio, 1.650 euros, con TDT integrado y m¨²ltiples avances en el panel y la electr¨®nica, frente a los 2.200 euros de media en 2005.

Un televisor de plasma de 42 pulgadas cuesta lo mismo que uno LCD de 37 o 40 pulgadas de calidad y marca comparable y aun as¨ª las ventas no acaban de despegar.

Adi¨®s al tubo

Lo que est¨¢ hundido es el televisor de tubo. Baste decir que el 80% de los televisores de tubo que se venden cuestan menos de 200 euros y el precio medio se sit¨²a en los 158 euros, un tercio menos que en 2005. Pese a ser tan baratos, este a?o habr¨¢n experimentado una ca¨ªda del 28% en unidades y del 55% en facturaci¨®n. La situaci¨®n ha llegado a tal punto que es dif¨ªcil ver un televisor de tubo en las tiendas y se debe adquirir por cat¨¢logo.

En Europa occidental, el crecimiento del mercado de televisores planos de gran tama?o sigue pautas similares a Espa?a. El a?o pasado, se vendieron 3,7 millones de televisores planos de entre 30 y 36 pulgadas, de un total de 32 millones, y para 2010 se calcula que ser¨¢n 13,9 millones, sobre 40,2 millones. El porcentaje de televisores con pantalla plana es este a?o del 46%.

El auge de los televisores planos en Espa?a y en Europa en general se explica por el aumento de los "consumidores inteligentes", como los denomina Paul Geurten, ejecutivo de Philips. Se trata de un consumidor que ya representa la mitad del total en Europa y que no busca el producto de precio m¨¢s bajo sino el que ofrece mayor valor. Es un consumidor informado, que pasa m¨¢s tiempo en su hogar y que aspira a productos de calidad y lujo. "El deseo de los consumidores por tener lo ¨²ltimo es lo que est¨¢ dinamizando el sector de electr¨®nica de consumo en Europa", manifestaba Geurten en un reciente congreso de alta definici¨®n.

El sondeo de Philips se?ala que los consumidores que compran lo ¨²ltimo en tecnolog¨ªa o eligen por el dise?o representan el 17% en n¨²mero pero el 41% del valor de las compras. Esto explica que haya tendencias de compra dif¨ªciles de justificar de modo racional.

Los consumidores cl¨¢sicos, que se caracterizan por su pragmatismo y por una compra meditada, suponen el 19% aunque tan s¨®lo el 22% del valor de las compras. Los otros tipos de consumidores tambi¨¦n est¨¢n muy equilibrados en n¨²mero y valor de compras.