El nuevo jefe del Pent¨¢gono reconoce que EE UU no est¨¢ ganando la guerra de Irak

Robert Gates, el hombre elegido por el presidente Bush para sustituir a Donald Rumsfeld al frente del Pent¨¢gono, admiti¨® ayer sin reservas que EE UU no est¨¢ ganando la guerra de Irak. Gates, que comparec¨ªa en el Senado en el primer d¨ªa de su proceso de confirmaci¨®n en el cargo, a?adi¨® que, si no se pone en pr¨¢ctica una nueva estrategia en Irak que permita una mejora constante de la situaci¨®n, aunque sea lenta, EE UU y "su pr¨®ximo presidente" tendr¨¢n que afrontar en un plazo m¨¢ximo de dos a?os "el riesgo muy real de una conflagraci¨®n regional" en Oriente Pr¨®ximo.

Gates, de 63 a?os y antiguo director de la CIA, avanz¨® durante su examen parlamentario algunas de las ideas para salir gradualmente del atolladero iraqu¨ª: "Creo que Estados Unidos va a tener que mantener alg¨²n tipo de presencia en Irak por mucho tiempo, pero esa presencia podr¨ªa llevarse a cabo con un n¨²mero de soldados mucho menor que el actual".

El futuro secretario de Defensa norteamericano lanz¨® tambi¨¦n un dardo contra su antecesor en el puesto, Donald Rumsfeld, que present¨® la dimisi¨®n al d¨ªa siguiente de la derrota republicana en las elecciones legislativas de noviembre, al comentar que consideraba "claramente insuficiente" el n¨²mero de hombres con el que EE UU abord¨® la guerra en 2003 para derrocar a Sadam Husein.

La intervenci¨®n de Robert Gates en el Senado inaugura una etapa de realismo pol¨ªtico -es la primera vez que un miembro del Gobierno estadounidense habla sin rodeos de las dificultades en Irak- y de colaboraci¨®n con los dem¨®cratas.