Historia de un duelo
No es nueva en la obra de la escritora catalana Imma Mons¨® (Lleida, 1959) su contrastada capacidad narrativa para juntar en una sola pieza el dolor y la alegr¨ªa. No habr¨ªa m¨¢s que leer el libro de relatos Mejor que no me lo expliques (Alfaguara, 2004). Los contrastes psicol¨®gicos es otra materia que tambi¨¦n domina a la perfecci¨®n la autora. Si a ello sumamos su excelente bagaje estil¨ªstico, un bagaje amasado con un estudiad¨ªsimo sentido de la distancia y la proximidad (para ello recomiendo su novela Todo un car¨¢cter, Alfaguara, 2001), tenemos entonces algunos de los resortes para entender su nuevo libro, Un hombre de palabra. Yo recomendar¨ªa que los lectores no hicieran caso a la contraportada de su edici¨®n en castellano. Se habla all¨ª de novela. Yo sostengo que no lo es. Otra cosa es que todos los dispositivos que utiliza la escritora son literarios: envidiable dominio de la lengua literaria, de sus recursos ret¨®ricos, de sus registros. Qu¨¦ otra cosa podr¨ªa hacer alguien que ha demostrado sobradamente que los domina con reconocida solvencia. Que incluya en su libro algunos m¨¢s propios de la ficci¨®n, como una voz omnisciente, ello no es suficiente para decidir que Un hombre de palabra es una novela. ?ste es un relato autobiogr¨¢fico. En ¨¦l se nos cuenta la historia de un duelo. El que la autora necesita, como todo ser humano de una forma u otra, cuando se le muere el compa?ero con el que ha compartido los a?os m¨¢s importantes y felices de su vida.
Un hombre de palabra
Imma Mons¨®.
Traducci¨®n de la autora.
Alfaguara. Madrid, 2006. 247 p¨¢ginas. 17,50 euros.
Un hombre de palabra est¨¢
estructurado mediante cap¨ªtulos alternos escritos en tercera persona y en primera. Imma Mons¨® se convierte a s¨ª misma en Lot, la mujer al borde de la desesperanza y un infinito tedio hasta que aparece en su vida el Cometa, nombre que le da a su compa?ero. ?sta es la historia que se nos cuenta mediante una voz omnisciente. La que se nos narra en primera persona es la propia Imma Mons¨® bajo el disfraz de Lot, cuando un inesperado infarto se lleva a su compa?ero. Acepto un alto grado de ficcionalidad en esta historia, ficcionalidad que viene dada en todo caso por la naturaleza de personaje literario que arrastra el Cometa. El Cometa se nos aparece bajo la mirada de Lot-Mons¨® como un ser sin fisuras. No es el hombre perfecto pero s¨ª es el hombre perfecto de la autora. Un hombre de palabra no es una novela, pero ello no quita que entre sus sentidas y l¨²cidas p¨¢ginas se esconda una historia de amor digna de una novela. Y no precisamente de una novela cualquiera de amor. El relato del duelo, como reflexi¨®n sobre la muerte y los muertos (no es casual que Mons¨® se refiera al cuento de James Joyce, Los muertos) es de una delicadeza ejemplar, sin aspavientos liricoides, con esa sobriedad de las calladas eleg¨ªas, no exenta de humor, a veces de punzante humor. Quiso el azar que este cr¨ªtico, antes del libro de Imma Mons¨®, acabara de leer unos d¨ªas atr¨¢s El a?o del pensamiento m¨¢gico, de la novelista norteamericana Joan Didion. En ¨¦l se narra tambi¨¦n la muerte ("te sientas a cenar, y la vida que conoces se acaba") de su marido y escritor John Gregory Dunne, y no encontrar¨¢ el lector pocas similitudes con el de la autora catalana. Dice la Didion: "S¨¦ por qu¨¦ intentamos mantener vivos a los muertos: intentamos mantenerlos vivos para que sigan con nosotros. Tambi¨¦n s¨¦ que si hemos de continuar viviendo llega un momento en que debemos abandonar a los muertos, dejarlos marchar, mantenerlos muertos". Y termina Imma Mons¨® el suyo: "Eso es, exactamente. Un recuerdo tan presente que, sin bien lo miras, se parece mucho a un olvido".
Un hombre de palabra. Imma Mons¨®. Traducci¨®n de la autora. Alfaguara. Madrid, 2006. 247 p¨¢ginas. 17,50 euros. Un home de paraula. La Magrana. Barcelona, 2006. 256 p¨¢ginas. 17 euros.
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