Roda de Ter recupera La Blava de Miquel Mart¨ª i Pol
El municipio de Osona compra la antigua f¨¢brica textil donde trabaj¨® el poeta y la convertir¨¢ en la sede de su fundaci¨®n
La Blava, la f¨¢brica textil donde trabaj¨® y se inspir¨® el poeta de Roda de Ter (Osona) Miquel Mart¨ª i Pol (1929-2003), recuperar¨¢ su esplendor, aunque no su actividad industrial, en los pr¨®ximos a?os. El Ayuntamiento de Roda de Ter ha adquirido por 1,2 millones de euros el edificio de la emblem¨¢tica f¨¢brica despu¨¦s de m¨¢s de dos a?os de negociaciones con el Fondo de Garant¨ªa Salarial (Fogasa). La Blava, ubicada en el centro de Roda y colindante del r¨ªo Ter, ces¨® su actividad en 1999 y dej¨® atr¨¢s casi 70 a?os de historia.
Con esta adquisici¨®n, el Ayuntamiento ve "una oportunidad ¨²nica para recuperar un espacio que forma parte del patrimonio industrial y cultural del pueblo", explica el alcalde, Jordi Serra, quien ya empieza a pensar en su nuevo uso. Su intenci¨®n consiste en convertir este antiguo complejo fabril, con una superficie de 17.000 metros cuadrados, en un espacio que "combinar¨¢ equipamientos p¨²blicos y actividad econ¨®mica privada". El edil explica que los jardines que rodean la f¨¢brica "tambi¨¦n se abrir¨¢n para dar continuidad al paseo del Ter que bordea el r¨ªo".
La Blava ser¨¢ el punto neur¨¢lgico de la ruta que recorre lugares vinculados con el poeta
El proyecto de rehabilitaci¨®n a¨²n no est¨¢ definido, pero lo que s¨ª est¨¢ claro es que "el edificio tendr¨¢ que mantener su estructura porque est¨¢ catalogado como patrimonio urban¨ªstico". Entre los distintos usos que se dar¨¢n a la nueva La Blava, ya es seguro que albergar¨¢ la sede de la reci¨¦n creada Fundaci¨® Miquel Mart¨ª i Pol, integrada por el Ayuntamiento de Roda de Ter, la Universidad de Vic y la asociaci¨®n Amics de Miquel Mart¨ª i Pol, que tiene como fin divulgar la obra del poeta. Adem¨¢s, La Blava ser¨¢ el punto neur¨¢lgico de la Ruta Liter¨¤ria Miquel Mart¨ª i Pol, que recorre puntos del municipio vinculados con la obra del poeta en alg¨²n momento de su vida.
La f¨¢brica presenta un visible estado de degradaci¨®n. Se pueden apreciar sus puertas y ventanales azules y, en su interior, se intuye c¨®mo deb¨ªa de ser la intensa actividad manufacturera que, en sus buenos momentos, en la d¨¦cada de 1960, ocup¨® a m¨¢s de 400 personas. Tecla Sala abri¨® las puertas de este enclave a principios del siglo XX y fue en 1956 cuando Mart¨ª i Pol, con s¨®lo 14 a?os, entr¨® a trabajar en el departamento de administraci¨®n. Era uno de los cuatro contables que en aquel momento ten¨ªa La Blava, al igual que Josep Balagu¨¦, vecino de Roda de Ter, quien comparti¨® despacho con el poeta hasta que la esclerosis m¨²ltiple que padec¨ªa le oblig¨® a dejar la empresa en 1974.
Las paredes del despacho, "que a¨²n se conserva", puntualiza el alcalde del municipio, fueron fuente de inspiraci¨®n de Mart¨ª i Pol para la creaci¨®n de una de sus obras m¨¢s conocidas, La f¨¤brica. Los poemas del libro se convirtieron en un canto de denuncia y realismo hist¨®rico en el que los obreros pasaron a ser h¨¦roes debido a las duras condiciones en las que desarrollaban sus tareas.
Montserrat Sans, viuda de Miquel Mart¨ª i Pol, cuenta que si conoce la historia de la popular f¨¢brica es a trav¨¦s de los poemas de su esposo. Y ahora piensa que "Miquel estar¨ªa muy satisfecho de ver que se ha podido recuperar la f¨¢brica para el pueblo".
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