Tr¨¢nsfugas de cemento
En el municipio alicantino de Pilar de la Horadada, de 20.000 almas, se han producido algunos hechos incontrovertibles. El Partido Popular ha ganado una moci¨®n de censura contra el alcalde socialista con la ayuda de dos concejales tr¨¢nsfugas del PSOE, Josefa Mero?o y Juan Jos¨¦ Ortiz, con el fin de desbancar al alcalde socialista Ignacio Ramos y entregar la vara municipal al popular Jos¨¦ Fidel Ros. Pero la direcci¨®n del PP ha abierto expediente a sus ediles para corregir este caso evidente de violaci¨®n de la voluntad popular, en cumplimiento del pacto contra el transfuguismo suscrito en julio de 1998 por el PSOE y el PP. El pacto inclu¨ªa el compromiso de rechazar en su grupo a un concejal integrado en la candidatura de otro mientras mantenga el cargo, que es lo que ha sucedido en este caso.
Existe un m¨®vil plausible. El ex alcalde socialista decidi¨® aparcar un proyecto para construir 5.200 viviendas en 2,6 millones de metros cuadrados de terreno r¨²stico, que no est¨¢ incluido en el Plan General de Ordenaci¨®n Urbana. Un caso claro de exceso de ladrillo, dado que est¨¢ pendiente la construcci¨®n de 8.000 viviendas. Ser¨¢ casualidad, pero en cuanto el alcalde leg¨ªtimo congel¨® el proyecto, aparecieron oportunamente dos concejales dispuestos a defender que ya no confiaban en ¨¦l.
Los partidos, con pacto o sin ¨¦l, tienen muchas dificultades para acabar con la lacra del transfuguismo. Se practica con el mayor descaro -recu¨¦rdese el tamayazo que entreg¨® la Comunidad de Madrid al PP- y es dif¨ªcil que alguna instancia p¨²blica sea capaz de exigir responsabilidades. Y, sin embargo, es necesario que barrabasadas como las de Pilar de la Horadada tengan consecuencias. Cabe esperar que el expediente ahora abierto prospere en la buena direcci¨®n y no quede en humo de pajas.
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