Tebeo

EN 1969, tres a?os antes de morir, public¨® Dino Buzzati (1906-1972) uno de sus libros m¨¢s ins¨®litos y enigm¨¢ticos, el titulado Poema a fumetti o, como se ha traducido en su reciente versi¨®n castellana, Poema en vi?etas (Gadir). Aunque fuera bien conocido el talento art¨ªstico del gran escritor italiano, no dej¨® de sorprender la ocurrencia de, en efecto, hacer, como ahora se dice, un "poema-c¨®mic", pues, entre otras cosas, es imposible encontrar dos g¨¦neros m¨¢s enfrentados que el de la muy exclusiva y minoritaria l¨ªrica y el muy simple y vulgar de la historieta visual de los tebeos. Desde luego, durante la d¨¦cada de 1960, triunfaba por doquier el arte pop, cuya desenfadada apropiaci¨®n de los medios de comunicaci¨®n de masas termin¨® con la separaci¨®n hasta entonces infranqueable entre la "alta" y la "baja" cultura, pero, aun as¨ª, no fue peque?o el desaf¨ªo afrontado por Buzzati, el cual, por si fuera poco, narraba en el poema ilustrado su personal versi¨®n actualizada de la legendaria bajada a los infiernos del poeta tracio Orfeo, que accedi¨® al reino subterr¨¢neo para rescatar de all¨ª a su amada Eur¨ªdice.

Es cierto que el arte de nuestra ¨¦poca desde sus mismos or¨ªgenes practic¨® la mezcla de los g¨¦neros, y que, en esta direcci¨®n, el brit¨¢nico William Hogarth (1697-1764) acu?¨® la f¨®rmula de la Comic History Painting o, literalmente, "historia c¨®mica pintada", para explicar sus series de cuadros o grabados que desarrollaban sucesivamente un argumento novelesco o teatral, una especie de historia gr¨¢fica, aunque a¨²n despojada de los "bocadillos" escritos que caracterizar¨¢n a nuestros c¨®mics. No obstante, hay sustanciales diferencias entre una narraci¨®n romancesca sobre las cuitas de un personaje contempor¨¢neo y la recreaci¨®n l¨ªrica de una historia mitol¨®gica de tan hondo calado como la de Orfeo. Pero la dificultad no proviene por el hecho de actualizar esta hermosa leyenda, algo que, antes de Buzzati, ya llevaron en este caso a la pantalla Jean Cocteau y Marcel Camus, respectivamente en 1950 y 1960, sino en no perder su aliento l¨ªrico y su profundidad metaf¨ªsica al trasvasar esta historia a un medio tan, en principio, trivial, como lo es el c¨®mic.

De esta manera, lo de menos es que el protagonista de Poema en vi?etas, de Buzzati, se llame Orfi y sea un cantante milan¨¦s de m¨²sica pop, ni que su novia responda al nombre de Eura y fallezca de una s¨²bita enfermedad misteriosa, sino c¨®mo, a trav¨¦s de todo ello, se nos invita a reflexionar sobre la estrecha interrelaci¨®n entre la vida y la muerte, las dos caras de la misma moneda existencial. Adentr¨¢ndose en el mundo de los muertos, ¨¦ste es el misterio que le es revelado al pobre Orfi, el cual accede al secreto mundo infernal gracias al talism¨¢n del amor y el poder art¨ªstico inspirador de ¨¦ste. Por lo dem¨¢s, Orfi no pierde, tras encontrarla, como su ancestro mitol¨®gico, a su amada Eura, sino que es abandonado por ella, que no desea regresar a la tierra, porque ya le hab¨ªa entregado a su abnegado amante todo lo que se le puede dar al otro: su vida y su muerte.