La ONU calcula que el 37,5% de las viviendas arrasadas han sido reconstruidas

A dos d¨ªas de que se cumpla el segundo aniversario de la cat¨¢strofe del tsunami, los progresos en la recuperaci¨®n de las zonas destruidas son innegables, a partir de los datos manejados por la ONU. Y quiz¨¢s el avance m¨¢s importante sea que ninguno de los 1,7 millones de desplazados vive en tiendas, como precisan desde la oficina del enviado especial para el tsunami, Bill Clinton. Aunque, como dice el ex presidente de EE UU, "quedan a¨²n importantes retos por delante", sobre todo en el ¨¢mbito de la vivienda. Un 37,5% de las arrasadas por el maremoto han sido ya reconstruidas.

En Indonesia, Sri Lanka, Maldivas, India y Tailandia, la ola asesina arrastr¨® 350.000 hogares, miles de colegios y hospitales. La ONU calcula que se han reconstruido ya unas 131.200 viviendas en esos pa¨ªses (37,5%), a las que hay que sumar otras 65.600 en fase de construcci¨®n. Adem¨¢s, se han rehabilitado unos 1.100 colegios, de los casi 5.000 destruidos, y 400 hospitales est¨¢n ya en fase de construcci¨®n, del millar que arras¨® el tsunami.

El total de fondos comprometidos se eleva a 13.500 millones de d¨®lares (10.250 millones de euros), a los que hay que sumar 3.400 millones movilizados por los Gobiernos de los pa¨ªses afectados y otros 2.140 millones en donaciones que se mueven fuera del sistema supervisado por la oficina de Clinton en la sede de Programa para el Desarrollo (PNUD).

Del total de la ayuda internacional, 5.920 millones provienen de Gobiernos, 2.095 millones de organismos financieros y el resto son contribuciones privadas que canalizan las ONG (3.215 millones), la Cruz Roja (1.783 millones) y las agencias de la ONU (494 millones), sobre todo Unicef y el PNUD.

Son, todo sumado, unos 20.000 millones (alrededor de 15.200 millones de euros), el equivalente a 7.100 d¨®lares por afectado. Una cantidad que dobla lo que la ONU hab¨ªa calculado hace dos a?os que ser¨ªa necesario para la reconstrucci¨®n y que supone de lejos la mayor cantidad de fondos movilizada tras una cat¨¢strofe humanitaria. "No hay paralelo", se?alan desde el PNUD, donde recuerdan que la generosidad internacional ante las inundaciones en Bangladesh en 2004 equival¨ªa a tres d¨®lares por afectado.

La ONU pone como ejemplo Indonesia, el pa¨ªs m¨¢s afectado, para explicar que la mitad de la ayuda prometida ya est¨¢ invertida en proyectos. "Estamos teniendo progresos en todos los pa¨ªses", reiteran desde la ONU, que recuerdan que el programa de reconstrucci¨®n es un "esfuerzo plurianual de entre cinco y diez a?os". "Hay que esperar un poco m¨¢s de tiempo antes de que se puedan ver resultados mayores", remachan, al tiempo que aseguran que los fondos prometidos son "suficientes".

Sin embargo, precisan que "hay decenas de miles de viviendas por reconstruir, hay que restablecer las infraestructuras b¨¢sicas y fomentar el desarrollo del sector privado". Entre tanto, el turismo, la actividad econ¨®mica y el empleo han vuelto a retomar el aliento por toda la regi¨®n. En todos los pa¨ªses, seg¨²n una reciente evaluaci¨®n, "los ni?os regresaron con rapidez a los colegios" y la red sanitaria "est¨¢ parcialmente reestablecida o bastante mejorada".

Indonesia recibe la mayor parte de los fondos (37%), aunque en proporci¨®n al da?o la ayuda es menor que aquella de la que se beneficia Sri Lanka. El PNUD calcula que unas 43.300 viviendas est¨¢n ya reconstruidas de las 141.000 destruidas y se est¨¢ trabajando en 20.300 m¨¢s. El puerto de Ulee Lheu est¨¢ operativo y unos 8.770 negocios locales est¨¢n en activo gracias a las ayudas gestionadas por la ONU.

En la India, el proceso de reconstrucci¨®n est¨¢ completado en un 28% en las cinco provincias afectadas, mientras que en Sri Lanka siguen los trabajos pendientes para recuperar unos 60.000 hogares de los 103.835 destruidos. Pero el hecho de tener un techo no es garant¨ªa a¨²n de acceso a agua corriente y electricidad.

Los proyectos se topan con obst¨¢culos legales que retrasan la reconstrucci¨®n, relacionados con la titularidad de la propiedad destruida. En muchos casos, el tsunami se llev¨® por delante registros locales que serv¨ªan para identificar al due?o de la tierra o la vivienda que puede acogerse a las ayudas. Adem¨¢s, el alza de la inflaci¨®n y la escasez de contratistas eleva el coste de los proyectos.

La poblaci¨®n se mostraba bastante satisfecha con la asistencia al inicio. Sin embargo, la frustraci¨®n crece por la lentitud que observan en la reconstrucci¨®n. Los expertos dicen que es un cambio l¨®gico al saltar de la fase de emergencia a un programa a m¨¢s largo plazo, y por eso piden a las autoridades locales que sean claras con los afectados a la hora de explicar los motivos de los retrasos, "para que no se sientan ignorados". Como dice Clinton, "el final de la historia est¨¢ a¨²n por escribir".