El 42% de las discapacitadas tiene que superar barreras en su propio hogar, seg¨²n una encuesta

Un programa de atenci¨®n a mujeres con discapacidad ha permitido detectar 108 casos de violencia de g¨¦nero, dom¨¦stica o sexual. El 65% de las v¨ªctimas ten¨ªan una discapacidad que superaba el 65%, seg¨²n datos de la Confederaci¨®n Andaluza de Personas con Discapacidad F¨ªsica y Org¨¢nica. Una encuesta elaborada por esta entidad entre 1.936 discapacitadas refleja la crudeza en la que viven estas mujeres en Andaluc¨ªa. El 80% est¨¢ desempleada, el 30% son analfabetas y el 42% tiene que superar cada d¨ªa barreras en el interior de su propio hogar.

Casi 2.000 mujeres han pasado por las oficinas de la Confederaci¨®n Andaluza de Personas con Discapacidad F¨ªsica y Org¨¢nica (CANF-COCEMFE) desde que se puso en marcha el programa de atenci¨®n integral a mujeres con discapacidad, que subvencionan dos consejer¨ªas (Igualdad y Empleo). De las entrevistas a estas usuarias se han extra¨ªdo una serie de datos que permiten acercarse a la realidad de este colectivo, sobre el que no existen demasiados estudios.

El retrato es crudo. Sufren tasas de desempleo alt¨ªsimas, su nivel de formaci¨®n es bajo, se enfrentan a barreras dom¨¦sticas a diario, les cuesta acceder a servicios de salud por su falta de accesibilidad y, lo m¨¢s grave, el 6% de las entrevistadas eran v¨ªctimas de alg¨²n tipo de violencia de sus allegados. Si bien el programa no estaba destinado de forma espec¨ªfica a abordar el tema de los malos tratos, se detectaron 108 mujeres que sufr¨ªan alg¨²n tipo de violencia, tres de ellas de ¨ªndole sexual. El 65% de las v¨ªctimas ten¨ªan una discapacidad igual o superior al 65%, seg¨²n la CANF-COCEMFE.

Econom¨ªa sumergida

Del estudio se concluye que la exclusi¨®n aumenta a medida que se agrava el porcentaje de discapacidad de las mujeres. Uno de los factores que contribuyen en mayor medida a su discriminaci¨®n es la falta de trabajo. De hecho, el 80% de las entrevistadas estaban paradas. El peque?o porcentaje que cuenta con un empleo lo hace en el marco de la econom¨ªa sumergida. "Los principales sectores de actividad en las que realizan tareas profesionales son limpieza, trabajo dom¨¦stico, comercio, administraci¨®n, oficina y hosteler¨ªa, que son menos reconocidos y con bajos sueldos", concluyen en el estudio.

Su escasa formaci¨®n acad¨¦mica y profesional no las ayuda tampoco en la b¨²squeda de trabajo. Del total de las entrevistadas, alrededor del 30% son analfabetas totales o funcionales. Apenas un 7% de las mujeres con discapacidad grave alcanz¨® un grado universitario. Los ingresos propios que recib¨ªan estas mujeres proced¨ªan de forma mayoritaria de las pensiones que perciben por su discapacidad. En el 60% de los casos no superan el importe del Salario M¨ªnimo Interprofesional, que este a?o se hab¨ªa situado en 540,9 euros mensuales.

La mayor¨ªa consider¨® que su nivel econ¨®mico es medio, si bien son pocas las que creen que podr¨ªan llevar una vida independiente con sus ingresos. En estas entrevistas tambi¨¦n se detect¨® la dificultad que tienen dentro del propio hogar para superar su discapacidad. El 42% de las mujeres con limitaciones m¨¢s graves reconoci¨® que no contaba con adaptaci¨®n de ninguna clase en el interior de su vivienda. La existencia de barreras en los centros sanitarios es una de las quejas que formularon m¨¢s de la mitad de las discapacitadas f¨ªsicas y el 43% de las org¨¢nicas. "Llama la atenci¨®n el hecho de que la mitad de las mujeres entrevistadas no acuden a revisiones ginecol¨®gicas y demandan que los servicios de salud sean totalmente accesibles y adaptados a las demandas", explican en la CANF. Las principales demandas en el ¨¢rea de salud de este colectivo est¨¢n relacionadas con la salud sexual y reproductiva, la rehabilitaci¨®n y la atenci¨®n psicol¨®gica.