Entra en vigor 'nominalmente' la ley de dependencia

La Ley de Atenci¨®n a la Dependencia cumpli¨® ayer su primer d¨ªa de existencia. Pero los te¨®ricos beneficiarios de la norma no notaron nada. El proyecto del Gobierno, que fue aprobado el pasado diciembre por las Cortes, requiere de toda una serie de desarrollos normativos que impiden que, de momento, sea algo m¨¢s que un derecho virtual.

Los primeros decretos no se esperan hasta dentro de dos o tres meses. En ellos habr¨¢ que fijar desde el sistema de evaluaci¨®n del grado de dependencia -la llamada baremaci¨®n- hasta la cuant¨ªa de las ayudas y su reparto entre las dos administraciones que las asumir¨¢n, la central y las auton¨®micas. Cuando la ley est¨¦ plenamente desarrollada se calcula que habr¨¢ m¨¢s de un mill¨®n y medio de beneficiarios directos: todas aquellas personas que necesitan de la ayuda de otra para llevar a cabo su vida diaria.

Adem¨¢s, tambi¨¦n mejorar¨¢n las condiciones de los cientos de miles de cuidadores -sobre todo, cuidadoras- que actualmente dedican parte o toda su jornada a atender a personas dependientes dentro de la familia.

La ley entrar¨¢ en vigor poco a poco, comenzando por los llamados grandes dependientes, que se calcula que son unos 200.000, y alcanzar¨¢ a todos los que lo necesiten en 2015.

Para este a?o, el Gobierno ha establecido una partida de 400 millones de euros en los presupuestos. El vicepresidente segundo y ministro de Econom¨ªa y Hacienda, Pedro Solbes, consider¨®, en declaraciones a Efe, esta cifra "m¨¢s que razonable". Esa partida va a permitir al sistema ser "eficiente" y funcionar "bien", seg¨²n Solbes, aunque precis¨® que, "l¨®gicamente, la velocidad de crucero no van a ser 400 millones de euros, ser¨¢ bastante m¨¢s en su momento".

Respecto a futuros incrementos, advirti¨® de que "hay que avanzar poco a poco", ya que lo importante es ser "muy eficiente" en la gesti¨®n de los recursos p¨²blicos que se destinen a atender a las personas dependientes.

Si no se hace as¨ª, se puede "caer en la trampa de una mala utilizaci¨®n de esos recursos y, por lo tanto, en una critica f¨¢cil al sistema que se pone en marcha", avis¨® el vicepresidente Solbes, que record¨® adem¨¢s que la financiaci¨®n de los servicios de dependencia ser¨¢ "a tres bandas": Estado, comunidades aut¨®nomas y el usuario, que aportar¨¢ en funci¨®n de su renta y patrimonio.