En pos de un nuevo lugar en el mapa nacionalista

El congreso extraordinario de EA llega en un momento bien diferente a aquel en que se plane¨® y en un escenario radicalmente distinto: en pleno frenazo del ritmo acelerado que la tregua de ETA, ahora rota, hab¨ªa dado a la pol¨ªtica vasca. El atentado de Barajas torna casi inviable la participaci¨®n de Batasuna en los comicios de mayo y su ausencia deja en suspenso la previsible recomposici¨®n del mapa pol¨ªtico nacionalista y de las posibles alianzas que el nuevo panorama de una Euskadi en v¨ªas de pacificaci¨®n abr¨ªa a la constelaci¨®n de partidos nacionalistas y soberanistas.

La ejecutiva que preside Bego?a Errazti preve¨ªa en un horizonte relativamente cercano este nuevo escenario, para el cual entned¨ªa que era necesario distanciarse del PNV. La dependencia de los peneuvistas desde los tiempos de Lizarra no s¨®lo les resultaba excesiva, sino que se extend¨ªa y era visible en todas las instituciones, desdibujando el perfil propio de EA como una formaci¨®n m¨¢s radical y soberanista.

Como alternativa a la coalici¨®n ya experimentada durante a?os y que le ha proporcionado a EA un ¨¢mbito de poder por encima de su propia dimensi¨®n, el sector oficial y mayoritario del partido quiere encontrar un nuevo lugar al sol m¨¢s cerca de una izquierda abertzale desmarcada de la violencia y con ETA en tregua. Con esa izquierda comparte EA un planteamiento independentista frente al m¨¢s posibilista del PNV, mucho m¨¢s marcado desde que lo preside Josu Jon Imaz.

Con la convicci¨®n de que era el momento de explorar estas nuevas posibilidades en plena tregua etarra, la ejecutiva de Errazti lleg¨® hasta sus ¨²ltimas consecuencias en agosto al imponerse, aunque de forma muy ajustada, sobre los partidarios de repetir la coalici¨®n, que no han cejado hasta conseguir un congreso para confrontar en directo las dos opciones. Los cr¨ªticos, adem¨¢s de estar m¨¢s alejados de las posiciones de Batasuna, muy fuerte en Guip¨²zcoa, donde este sector es mayoritario, est¨¢n convencidos de que si EA se presenta en solitario va a debilitarse y perder poder.

El sector oficial, ansioso de liberarse del sello de la coalici¨®n, propone posponer "a acuerdos poselectorales" una pol¨ªtica de alianzas que considera que hasta ahora le ha hipotecado. Quieren mayor libertad de elecci¨®n, eso s¨ª, siempre que los resultados se lo permitan. Aunque la ruptura de la tregua frene las posibilidades calculadas.