?ngeles a la vista de todos

La cruz procesional abri¨® paso entre el p¨²blico a la comitiva formada por los can¨®nigos de la catedral, el arzobispo de Valencia, Agust¨ªn Garc¨ªa Gasco, el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, la alcaldesa de Valencia, Rita Barber¨¢, y el consejero de Cultura, Alejandro Font de Mora. Fue el inicio del acto de "inauguraci¨®n y bendici¨®n", seg¨²n rezaba la convocatoria para las masas de la Generalitat. Se daba a conocer a todos la restauraci¨®n de las pinturas renacentistas del altar mayor de la catedral de Valencia. Unos ¨¢ngeles que "cambian la historia del arte", titulaba en grande Paraula, el peri¨®dico del arzobispado.

La comitiva se bifurc¨®. Los religiosos se dirigieron al altar, bajo la b¨®veda, desde donde gozaban de una visi¨®n perfecta de los magn¨ªficos 12 ¨¢ngeles m¨²sicos pintados por Paolo de San Leocadio y Francesco Pagano en el siglo XV; y los pol¨ªticos ocuparon los bancos, justo delante del p¨²blico que acudi¨® a la catedral de Valencia en buen n¨²mero.

Camps habl¨® de un nuevo renacimiento y Garc¨ªa Gasco critic¨® el "laicismo rancio"

Desde los bancos, los ¨¢ngeles se ven incompletos, muy lejanos, si bien se aprecia con claridad el intenso azul estrellado del cielo y los siete nervios barrocos de la b¨®veda que no han sido retirados. Recorren los frescos hasta la clave. "Sembla un past¨ªs", dijo un fot¨®grafo. "Com tota la catedral", coment¨® un acompa?ante, en referencia a los diversos estilos que se acumulan. ?Y la reinstalaci¨®n en otro lugar de la b¨®veda barroca se realizar¨¢ sin sus nervios historiados? Se har¨¢n r¨¦plicas casi exactas, respondi¨® Salvador Vila, arquitecto responsable del desmontaje.

Desde el altar, la visi¨®n es completa y se observa con detalle el perfeccionismo formal de los artistas italianos y la belleza de su obra. Contribuye a ello la instalaci¨®n de 50 peque?os focos que no emiten calor. Hubo quien se?al¨®, sin embargo, que quiz¨¢ ser¨ªa m¨¢s conveniente una luz m¨¢s tenue, como en las iglesias italianas.

Pero ayer era un d¨ªa para mostrarlo todo. Asistieron el presidente de la patronal auton¨®mica (Cierval), Rafael Ferrando, el de la C¨¢mara de Comercio de Valencia, Arturo Virosque, el rector de la Universitat de Val¨¨ncia, Francisco Tom¨¢s, y numerosos cargos del PP, entre otros. Todos fueron convocados para admirar las pinturas que encarg¨® el cardenal Roderic de Borja, el futuro papa Alexandre VI, del que lo menos negro que se dijo de ¨¦l fue que compart¨ªa lecho en el Vaticano con Julia de Farnesio.

La Capella de Ministrers, al igual que hicieron ante el papa Benedicto XVI, interpret¨® m¨²sica del Renacimiento con las r¨¦plicas de los instrumentos que portan los ¨¢ngeles.

Los acordes dieron paso a las intervenciones y a la ceremonia. Camps reiter¨® que a su juicio hay un nuevo Renacimiento valenciano: "Hoy recuperamos a los testigos de una sociedad que como la actual estaba a la vanguardia de la modernidad". El arzobispo abund¨® en su discurso: "Quienes contemplan la Iglesia desde el prejuicio, la sospecha o el desprecio de un laicismo rancio no pueden contribuir al bien com¨²n". As¨ª, "romper las relaciones entre el Evangelio y la cultura solo es posible desde la traici¨®n a la verdad", agreg¨®.