De lo que no se habla

Thomas Catan, el periodista que entrevist¨® por carta al etarra De Juana Chaos para The Times, fue a desayunar ayer con Pepa Bueno, a TVE. Ante la pantalla fue sometido a las preguntas de los contertulios de Pepa, y se encall¨® en una, que dej¨® en suspenso. Le preguntaron si pod¨ªa decir qui¨¦n hizo la foto que acompa?aba su intercambio. Y ¨¦l respondi¨®: "Desgraciadamente, no puedo". No pod¨ªa responder la pregunta. Luego le recomend¨® al Gobierno espa?ol (y tambi¨¦n al brit¨¢nico) que hablaran de todo con respecto a esto del terrorismo. ?De todo? ?Y si el Gobierno, ¨¦ste o el otro, dice "desgraciadamente, no puedo"?

En ese desayuno se nos hel¨® el caf¨¦ volviendo a escuchar a Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, presidente del Gobierno que se ali¨® con Estados Unidos para invadir Irak; dijo una de esas frases en las que recurre a la confusi¨®n para desatascar su risa. Habl¨® de Irak y las supuestas armas de destrucci¨®n masiva sobre las que en su momento se bas¨® aquella invasi¨®n y el propio Aznar bas¨® su apoyo a Bush. Ya se sabe (se supo entonces, incluso, que esas armas no exist¨ªan), pero el ex presidente dijo el mi¨¦rcoles por la noche: "Cuando yo no lo sab¨ªa nadie lo sab¨ªa". La frase se qued¨® ah¨ª, como una explosi¨®n de cinismo, para que la comentara Josep Piqu¨¦, antiguo ministro del PP. Le pregunt¨® Pepa: "?Esto es una autocr¨ªtica?". Y Piqu¨¦ le respondi¨®: "Supongo que s¨ª". Ni hablar de ello. Piqu¨¦ est¨¢ contagiado de Aznar.

El caf¨¦ ya estaba completamente helado. La noche anterior Eva Hache (Cuatro) hab¨ªa repetido una frase de Eduardo Zaplana, portavoz popular en el Congreso, sobre la propuesta abertzale acerca del porvenir de Euskadi y Navarra. "De eso no se puede hablar" fue el resumen de su trabalenguas. ?De eso no se puede hablar?

De lo que m¨¢s se habl¨® fue de la muerte de ?rika Ortiz. Carles Francino dijo en la SER que ¨¦ste es un momento especial para que los medios se fijen los l¨ªmites de la intimidad. Hace tiempo que se traspasaron. Se vio el mi¨¦rcoles, se vio ayer. Y lo que nos espera el fin de semana. Una desgracia.