La risa de Alfonso Perales
Compa?eros y familiares del diputado le homenajean en C¨¢diz
Ofelia Perales le confes¨® un d¨ªa a su padre que el primer recuerdo que guardaba en su memoria era de ¨¦l. Cuando le cuidaba de un resfriado. Alfonso nunca le crey¨® del todo. Pero ayer su hija insisti¨® de nuevo. "Ten¨ªa la cara llena de pelo, apenas se le ve¨ªa la boca por la barba y llevaba unas gafas ochenteras", remarc¨® en el acto de homenaje que los compa?eros de partido y amigos del diputado socialista fallecido en diciembre le realizaron en el Palacio de Congresos de C¨¢diz. "Era un hombre bueno, pero no blando. Al contrario. Era irreductible", le defini¨® el presidente de la Junta, Manuel Chaves.
La voz entrecortada de Ofelia, sus l¨¢grimas ante el micr¨®fono y su discurso plagado de emocionadas apelaciones directas a su padre cerr¨® lo que hab¨ªa sido un recorrido por la vida de Alfonso Perales. La vida que termin¨® por un c¨¢ncer fulminante. Cuando todav¨ªa estaba en el hospital, Manuel Chaves tuvo una largu¨ªsima conversaci¨®n con ¨¦l. El Estatuto, el terrorismo, la econom¨ªa, el partido. Pero, sobre todo, el cine. Acababa de ver Infiltrados y Peque?a Miss Sunshine, pel¨ªculas galardonadas el lunes con el oscar. "Ahora estar¨ªamos hablando de eso", lament¨®. Chaves record¨® lo mejor de Perales. "Era un guas¨®n. Ten¨ªa una fina iron¨ªa y casi no llamaba nunca a nadie por su nombre", explic¨® tras detallar entre risas una sucesi¨®n de apodos que Perales utilizaba.
Felipe Gonz¨¢lez: "No vamos a poder llenar este hueco y de veras que lo siento"
El ex presidente del Gobierno Felipe Gonz¨¢lez asegur¨® haber olvidado los papeles que ten¨ªa previsto leer en su intervenci¨®n. "Me cuesta hablar de ¨¦l sin ¨¦l", dijo. Lo defini¨® con frases sueltas. El hombre de la primera fila. El del compromiso. El amigo del alma. El que siempre aceptaba la discrepancia. "No vamos a poder llenar este hueco y de veras que lo siento", concluy¨®. En la misma l¨ªnea, la consejera de Igualdad y Bienestar Social, Micaela Navarro, conden¨® la ausencia que no se podr¨¢ cubrir nunca. "Ten¨ªa la humildad del n¨²mero uno", resumi¨®.
Previamente la periodista Mar¨ªa Antonio Iglesias hab¨ªa rememorado la primera conversaci¨®n que tuvo con Perales. Fue en C¨¢diz. "Hablamos de socialismo espa?ol, de pa¨ªs, de sue?os y realidades. Y me ofreci¨® la oportunidad de volver a hablar con ¨¦l cada vez que tuviera dudas sobre lo que hac¨ªa". Despu¨¦s reconoci¨® la brevedad de aquella amistad. "Fue corta en el tiempo que se mide en minutos pero profunda en el tiempo que se mide en oleadas en el coraz¨®n".
La orquesta Manuel de Falla interpret¨® canciones de Serrat y La ?ltima Fila. El periodista Antonio Hern¨¢ndez Rodicio medi¨® entre cada intervenci¨®n con apuntes po¨¦ticos y an¨¦cdotas.
Cerr¨® el acto Ofelia Perales. Su discurso fue un homenaje a las lecciones vitales aprendidas. "Me ense?aste a afrontar la vida con sentido del humor". Tambi¨¦n record¨® la risa de su padre. "All¨¢ donde est¨¦s r¨ªe por m¨ª, pap¨¢, que yo tambi¨¦n lo har¨¦ por ti".
Antes, la canci¨®n Cuando me vaya, de Serrat, puso m¨²sica a un v¨ªdeo con fotos de toda la vida de Alfonso Perales. En algunas, un hombre de espesa barba jugaba con una ni?a.
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