175 d¨ªas de redenci¨®n a De Juana en la 'era Aznar' por defender a ETA
I?aki de Juana Chaos cumpl¨ªa prisi¨®n en Melilla por sus 25 asesinatos cuando la administraci¨®n penitenciaria, bajo mandato del Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar (PP), decidi¨® concederle 350 d¨ªas de redenci¨®n de penas (175 en 2001 y otros 175 en 2002) por su "rendimiento intelectual" y por hacer un cursillo de "redacci¨®n y arte de escribir". Jos¨¦ Blanco, secretario de Organizaci¨®n del PSOE, denunci¨® ayer en Castell¨®n que el Gobierno de Aznar fue el ¨²nico que rebaj¨® la pena a De Juana "por haber asesinado", despu¨¦s de que a principios de los a?os noventa el etarra escribiera un libro, titulado Ideas, "cargado de insultos y desprop¨®sitos".
I?aki de Juana Chaos relataba en ese libro el d¨ªa a d¨ªa de su estancia en la c¨¢rcel. En sus reflexiones, el etarra apoyaba el terrorismo, insultaba a los gobernantes del PP y denunciaba supuestas torturas, adem¨¢s de descalificar a los funcionarios de prisiones y al fiscal jefe de la Audiencia Nacional.
- Apoyo de la lucha armada. Con motivo de la muerte del etarra Esteban Esteban Nieto, I?aki De Juana escribe: "Una vida dedicada a la lucha por la independencia y el socialismo (...). Los j¨®venes deben recoger el testigo". Unos d¨ªas despu¨¦s, De Juana reflexiona sobre su situaci¨®n: "Me doy cuenta de lo peque?o que soy para llevar con dignidad la responsabilidad adquirida de ser un prisionero pol¨ªtico. Peso, en ocasiones aplastante, ¨²nicamente soportable ante la esperanza de lograr los objetivos por los que estamos dejando la vida. Dura carga sobrellevable por el convencimiento de que la renuncia al fin o a los medios necesarios supone la anulaci¨®n como militante pol¨ªtico, el vac¨ªo interior como persona y la contribuci¨®n a la muerte de un pueblo".
- Contra el fiscal Fungairi?o y los funcionarios de prisiones. Cuando la Fiscal¨ªa de la Audiencia Nacional inform¨® contra la excarcelaci¨®n del etarra Esteban Esteban Nieto, seis meses antes de su fallecimiento, De Juana relata en su libro: "El fiscal Fungairi?o certifica su odio. Odia pero no miente en esto, la misi¨®n de la c¨¢rcel es rematar a los presos pol¨ªticos vascos". A los funcionarios de prisiones les dedica algunos insultos graves: "Un conocido torturador, y ahora representante sindical hace un alegato...". "El jefe de Servicios chilla, y yo me r¨ªo. Le conozco desde hace a?os y desgraciadamente he coincido con ¨¦l en tres prisiones. Le conoc¨ª de carcelero de llave, le conoc¨ª de jefe de servicios en funciones, y le conozco con todo su rango actual. Seguir¨¢ ascendiendo, tiene madera para llegar muy alto. De peque?a estatura siempre le quedan las chaquetas grandes al estilo chaquet¨®n tres cuartos, mangas hasta los nudillos y caminar separando los brazos del cuerpo. Tiene un estilo Aznar. A los presos pol¨ªticos vascos nos perjudica siempre que puede".
- Supuestas torturas. "Nos iban a apalear de todas formas. Con su habitual tono de prepotencia el jefe de servicios nos hab¨ªa hecho el comentario: 'Hoy no os vais a librar' y es una de las pocas veces que pod¨ªamos creerle. Entran galer¨ªa a galer¨ªa, celda a celda, y nos van apaleando a todos. Golpeando a cada uno, entre numerosos uniformes, van recuperando su maltrecha autoestima". "El espect¨¢culo parece irreal. Un sargento de la Guardia Civil con un cuchillo de grandes dimensiones en la mano; el director de la c¨¢rcel junto a ¨¦l se?alando qui¨¦n ha de recibir raci¨®n doble o sencilla, los uniformados verdes, como siempre, cumpliendo gustosos las ¨®rdenes; los uniformados azules cerrando puertas y azuz¨¢ndoles todav¨ªa m¨¢s".
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