La juez Gallego sienta en el banquillo a los jefes policiales del 'caso del ¨¢cido b¨®rico'
El auto rechaza el argumento del fiscal que permiti¨® al banquero Bot¨ªn eludir un juicio
La juez Gemma Gallego, instructora del caso del ¨¢cido b¨®rico, ha decidido sentar en el banquillo a los cinco m¨¢ximos jefes de la Polic¨ªa Cient¨ªfica para que respondan de delitos de falsedad documental, falso testimonio y encubrimiento. Esta juez, que es candidata de la conservadora Asociaci¨®n Profesional de la Magistratura al pr¨®ximo Consejo del Poder Judicial, obvia el contenido del escrito de la Fiscal¨ªa de Madrid, seg¨²n el cual no cabe aplicar a nadie pena de banquillo cuando no lo solicite, como ocurre en este caso, ni el fiscal ni la acusaci¨®n particular.
El caso del ¨¢cido b¨®rico surge a ra¨ªz de las pesquisas del 11-M. En casa de uno de los islamistas procesados por esta matanza la polic¨ªa hall¨® una sustancia y el juez pidi¨® que se analizara. Tres peritos policiales concluyeron que se trataba de ¨¢cido b¨®rico e hicieron un informe en el que pon¨ªan de relieve que una sustancia matacucarachas del mismo tipo hab¨ªa sido hallada cuatro a?os antes en casa de unos etarras detenidos en Salamanca y en la vivienda de un antisistema arrestado en 2004 en Madrid.
Al ver el informe, los jefes policiales -Francisco Ram¨ªrez, Pedro M¨¦lida, Jos¨¦ Andradas y Miguel ?ngel Santano- ordenaron a los peritos que retiraran esas apreciaciones por ser irrelevantes para el caso. Como los peritos se negaron, los jefes hicieron otro informe se?alando que la sustancia era ¨¢cido b¨®rico, pero eliminando las citadas apreciaciones. La juez Gallego entiende que el dictamen pericial fue alterado. Por eso ve delito en este asunto y lleva a los mandos al banquillo.
Se da la circunstancia de que el argumento procesal que permiti¨® al presidente del Banco Santander, Emilio Bot¨ªn, eludir el banquillo en un proceso contra ¨¦l en la Audiencia Nacional no ha servido ahora. En el caso del ¨¢cido b¨®rico ni el fiscal ni la acusaci¨®n particular entienden que hay delito y, adem¨¢s, sostienen que, al no pedirlo ellos, los jefes policiales no deben sentarse en el banquillo. Se basan en el art¨ªculo 782 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, que dice: "Si el ministerio fiscal y el acusador particular solicitaren el sobreseimiento de la causa [...], el juez lo acordar¨¢". La juez Gallego tiene una visi¨®n del caso diametralmente opuesta a la de su colega Baltasar Garz¨®n, que tambi¨¦n instruy¨® parte de este caso: ella ve delito en la actuaci¨®n de los jefes policiales y no en la de los peritos que analizaron el ¨¢cido b¨®rico, al contrario que Garz¨®n.
Pena de banquillo
La juez rechaza la pretensi¨®n de que no se sienten en el banquillo. Sostiene que no es posible equiparar el caso Bot¨ªn con el del ¨¢cido b¨®rico porque ni "el hecho delictivo, ni sus circunstancias guardan relaci¨®n alguna". En el caso de Bot¨ªn fue la propia Sala Penal, en una ponencia de su presidente, Javier G¨®mez Berm¨²dez, la que decidi¨® que el presidente del Santander no deb¨ªa sufrir la pena de banquillo.
La juez Gallego argumenta que esa resoluci¨®n no era firme y s¨ª "susceptible de recurso de casaci¨®n". Tambi¨¦n defiende que, en todo caso, este asunto debe resolverse en el marco de las "cuestiones previas" al juicio, como ocurri¨® en el caso Bot¨ªn. A?ade, adem¨¢s, que la Constituci¨®n quiere que haya "paridad" entre las partes del proceso, sin distinciones, y que, adem¨¢s, no hay "ning¨²n precepto legal" en el procedimiento abreviado "que recoja expresamente" que un juez no puede abrir un juicio oral si no lo piden el fiscal o la acusaci¨®n. En este caso, el fiscal y la acusaci¨®n particular y la Abogac¨ªa del Estado, reclaman el sobreseimiento. S¨®lo pide la pena de banquillo como acci¨®n popular una asociaci¨®n de v¨ªctimas del 11-M que patrocina la presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, del PP.
La juez Gallego tambi¨¦n basa sus argumentos en un reciente auto de la Audiencia de Madrid que indica que "existen indicios s¨®lidos de la comisi¨®n de unos hechos punibles" en el caso del ¨¢cido b¨®rico.
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