Los j¨®venes que necesitan piso s¨®lo pueden pagar la mitad de lo que cuesta en el mercado
Sigue aumentando la diferencia entre el coste y la capacidad de compra, seg¨²n un estudio
La brecha entre lo que pueden pagar los j¨®venes que necesitan acceder a su primera vivienda y el nivel de precios del mercado libre sigue acrecent¨¢ndose. Seg¨²n el ¨²ltimo estudio sobre Necesidad y Demanda de Vivienda correspondiente al a?o 2006, que elabora por el Departamento de Vivienda, los j¨®venes encuestados pod¨ªan asumir un m¨¢ximo de 164.455 euros (un 14,8% m¨¢s que en 2005). Eso significa casi 150.000 euros de diferencia con relaci¨®n a los precios que rigen en el mercado libre. Esa diferencia era de 100.000 en el a?o 2001 y de 60.000 en 1996.
Al poner en relaci¨®n los precios m¨¢ximos declarados por los j¨®venes con necesidad de vivienda con los precios de los pisos libres y los de protecci¨®n oficial, se aprecia que los l¨ªmites asumibles quedan en una situaci¨®n intermedia: claramente por debajo de los niveles del mercado libre y bastante por encima de los de la vivienda protegida. La consecuencia es que, en muchos casos, al rebasar los ingresos permitidos para entrar en los sorteos de pisos protegidos, los afectados se quedan en tierra de nadie.
La encuesta sobre necesidades y demanda de vivienda que acaba de publicar el departamento refleja que 93.000 j¨®venes plantean la necesidad de acceder a su primera casa, una cifra parecida a la registrada en 2005. De ellos, alrededor de 20.000 demandan un piso a corto plazo, un a?o. Otros 57.000 se fijan un horizonte m¨¢ximo de cuatro. La encuesta tambi¨¦n recoge la necesidad de cambio de vivienda habitual. A alrededor de un 6% de familias (48.000 pisos) le urge el traslado. En t¨¦rminos de demanda, la previsi¨®n es de 19.500 pisos en el plazo de cuatro a?os y de 8.100 en un a?o.
"Dif¨ªcilmente accesibles"
Seg¨²n el estudio, la capacidad financiera de los diferentes colectivos con necesidad de vivienda se ha elevado, pese a lo cual los precios en el mercado libre siguen en niveles "dif¨ªcilmente accesibles" para estas personas. En 2006, las personas con necesidad de acceso ganaban de media 1.469 euros netos al mes (un 9,2% m¨¢s que en 2005) y estaban dispuestas a destinar al pago de la vivienda 495 euros mensuales (un 11,2% m¨¢s). En esa l¨ªnea, tambi¨¦n elevan el precio m¨¢ximo que consideran factible pagar por su futuro piso, que sit¨²an en 164.455 euros (14,8% m¨¢s que en 2005). Pese a este esfuerzo, la diferencia entre lo que pueden pagar y lo que cuestan los pisos en el mercado libre se acrecienta.
A su vez, los hogares con necesidad de cambio ingresan de media 1.609 euros al mes (6,3% m¨¢s que en 2005). Est¨¢n dispuestos a pagar 471 euros mensuales (13,2% m¨¢s) y fijan su l¨ªmite en 209.220 euros (6,8% m¨¢s que un a?o antes). Comparativamente, la encuesta permite observar que las personas que han accedido recientemente a una vivienda (en los dos ¨²ltimos a?os) ganan en realidad un 16,5% m¨¢s que las personas con necesidad de acceder, y los hogares que han cambiado, un 25% m¨¢s que los que precisan cambiar.
Estas diferencias se deben en gran medida a la disponibilidad de un segundo salario para pagar el piso. As¨ª, mientras un 55-60% de las familias que han adquirido una vivienda recientemente cuenta con una segunda fuente de ingresos, s¨®lo un 34,4% de las personas con necesidad de acceso y un 45,8% de los hogares que necesitan cambiar tienen un segundo salario.
Atendiendo a las ¨²ltimas subidas de los tipos de inter¨¦s, el estudio resalta que a¨²n es pronto para saber cu¨¢l puede ser su efecto sobre el esfuerzo financiero a realizar por las personas que necesitan una vivienda. "Depender¨¢ de su mayor o menor incidencia sobre la evoluci¨®n de los precios de la vivienda libre". Sin embargo, a trav¨¦s de los resultados de la encuesta se puede constatar que esta subida ha tenido un efecto "considerable" sobre la econom¨ªa familiar, "muy especialmente" en aquellos hogares que han comprado su vivienda m¨¢s recientemente, que son los m¨¢s endeudados".
La mayor¨ªa de las personas encuestadas, tanto con necesidad de acceso a la primera vivienda como de cambio, se inclinan por un piso en propiedad. Es el caso de un 73,4% de los quieren cambiar y de un 66,2% de los que demandan el acceso. S¨®lo un 12% y un 7,5%, respectivamente apuntan al alquiler.
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