"Tenemos que pensar r¨¢pidamente en soluciones para el aumento del CO2"

Para la neurocient¨ªfica Susan Hockfield, ser la primera mujer que preside el prestigioso Instituto Tecnol¨®gico de Massachusetts (MIT) es "un gran honor", pero no mayor que el de ser tambi¨¦n la primera investigadora del ¨¢rea de ciencias de la vida en ese puesto. Dice que su elecci¨®n, en 2004, prueba que "el MIT est¨¢ cambiando en paralelo a una de las grandes revoluciones actuales: la confluencia de las ciencias de la vida con la ingenier¨ªa". Uno de sus objetivos es hacer que el MIT est¨¦ en el epicentro de dicha revoluci¨®n. Otro es potenciar la investigaci¨®n para resolver el problema energ¨¦tico.

Hockfield (Chicago, 1951) ha ocupado importantes puestos acad¨¦micos en la Universidad de Yale. Ha investigado en desarrollo del cerebro -en "c¨®mo el cerebro se ensambla a s¨ª mismo", explica- y en glioma, un tipo de c¨¢ncer muy agresivo. Tiene varias patentes. Es consejera de varias empresas y organismos de investigaci¨®n, como General Electric o el Instituto Oceanogr¨¢fico Woods Hole. Esta entrevista se realiz¨® durante una reciente visita de Hockfield a Zaragoza, al Logistic Centre (ZLC), un centro de investigaci¨®n y formaci¨®n en log¨ªstica creado conjuntamente por el Gobierno de Arag¨®n, la Universidad de Zaragoza y el MIT.

"Ser¨ªa una decisi¨®n poco sabia no considerar a la energ¨ªa nuclear como parte de la soluci¨®n, aunque no sea suficiente por s¨ª misma" "El mundo necesita m¨¢s cient¨ªficos e ingenieros de los que se est¨¢n produciendo, al menos en EE UU, y creo que en la mayor¨ªa de los pa¨ªses"

Pregunta. El ZLC est¨¢ en Zaragoza por el gran parque log¨ªstico Plaza. ?Por qu¨¦ es la log¨ªstica importante para el MIT?

Respuesta. Una de las prioridades del MIT es hacer cosas ¨²tiles, llevar al mercado los resultados de la investigaci¨®n. La log¨ªstica, y nuestro Center for Transportation and Logistics, es un ejemplo perfecto de la fusi¨®n entre investigaci¨®n, educaci¨®n y mercado, de la interacci¨®n entre la f¨ªsica y el comercio.

P. Al MIT se lo relaciona con rob¨®tica, inteligencia artificial... No con ciencias de la vida.

R. S¨ª, pero eso est¨¢ cambiando. El MIT hist¨®ricamente ha hecho ingenier¨ªa, y somos excelentes en esto. Lo que mucha gente no sabe es lo potentes que somos tambi¨¦n en ciencias de la vida. Un tercio de los profesores est¨¢ implicado en esta ¨¢rea. Tenemos un departamento enorme de biolog¨ªa, y un centro muy importante para investigaci¨®n del c¨¢ncer. Pero es que, adem¨¢s, ahora las herramientas para los ingenieros derivan de las ciencias de la vida. La manera en que lo describo es que al principio del siglo XX la f¨ªsica proporcion¨® una comprensi¨®n muy profunda de la mec¨¢nica del universo f¨ªsico. Esa comprensi¨®n gener¨® las herramientas para los ingenieros, as¨ª que f¨ªsica e ingenier¨ªa confluyeron y dieron lugar a la industria de la microelectr¨®nica, las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n... De modo similar, a mediados del siglo XX las ciencias biol¨®gicas empezaron a tener una comprensi¨®n igual de profunda de los sistemas vivos, y ahora es esa comprensi¨®n la que proporciona las herramientas a los ingenieros.

P. Y cree que la biolog¨ªa y la ingenier¨ªa tambi¨¦n se acercar¨¢n.

R. Eso es lo que vemos ahora en todo el campus, una confluencia de las ciencias de la vida con la ingenier¨ªa. Y predigo que eso transformar¨¢ el mundo durante este siglo de forma tan revolucionaria como los ordenadores lo transformaron en el siglo pasado. Soy la primera cient¨ªfica del ¨¢rea de ciencias de la vida que preside el MIT, pero en los ¨²ltimos 30 a?os el MIT ha cambiado y ahora cada departamento de ingenier¨ªa, f¨ªsica, matem¨¢ticas o qu¨ªmica tiene una o m¨¢s personas que trabajan en ciencias de la vida.

P. Esa revoluci¨®n es la que predicen tambi¨¦n los expertos en biolog¨ªa de sistemas.

R. La biolog¨ªa de sistemas es el siguiente paso. Mi visi¨®n de futuro se vuelve muy borrosa a 10 a?os vista, pero con la biolog¨ªa de sistemas ahora mismo estamos atisbando un nuevo tipo de biolog¨ªa emergente. El MIT tiene una actividad maravillosa en esto.

P. Tambi¨¦n quiere usted potenciar la investigaci¨®n en el sector energ¨¦tico. ?Por qu¨¦?

R. Durante los pr¨®ximos 10 o 15 a?os, el ¨¦nfasis estar¨¢, por un lado, en esa convergencia entre las ciencias de la vida y la ingenier¨ªa, y, por otro, en la energ¨ªa. Cuando llegu¨¦, lo que escuch¨¦ de profesores y estudiantes fue que ya se hac¨ªa un enorme esfuerzo en este sentido. Descubr¨ª docenas de fant¨¢sticos proyectos de investigaci¨®n aqu¨ª y all¨¢, y reunirlos en la MIT Energy Initiative es una forma de infundir a¨²n m¨¢s entusiasmo. Es un ¨¢rea multidisciplinar: es de ciencias naturales, pero tambi¨¦n afecta a la econom¨ªa, la pol¨ªtica... Adem¨¢s, es un ¨¢rea importante para el mundo actual.

P. Del sistema de investigaci¨®n europeo se dice que genera muchos conocimientos, pero que no los sabe llevar al mercado. ?Est¨¢ de acuerdo?

R. No conozco el sistema europeo lo bastante para opinar. El sistema que se cre¨® en EE UU tras la II Guerra Mundial est¨¢ dise?ado para que la investigaci¨®n y la educaci¨®n vayan unidas. Y esto ha tenido mucho ¨¦xito. Aunque no todas las universidades son igual de buenas a la hora de traducir la investigaci¨®n en aplicaciones, claro. El MIT es muy bueno, pero no es el ¨²nico.

P. ?C¨®mo debe ser la relaci¨®n entre los cient¨ªficos y la pol¨ªtica?

R. Es responsabilidad de los cient¨ªficos y los ingenieros el decir la verdad, explicar los resultados de su investigaci¨®n de la manera m¨¢s precisa posible. Por ejemplo, en lo que respecta al problema energ¨¦tico, creemos que el MIT puede aportar precisamente el ser muy honesto en ese sector incre¨ªblemente complejo. Tenemos varios informes que analizan la energ¨ªa nuclear y el carb¨®n. Porque el carb¨®n seguir¨¢ us¨¢ndose, es la fuente de combustible m¨¢s abundante en muchas partes del mundo: en EE UU usaremos carb¨®n, China lo usar¨¢, India lo usar¨¢. Y tenemos que desarrollar no s¨®lo la ciencia y la tecnolog¨ªa, sino tambi¨¦n las pol¨ªticas que permitan usarlo de manera segura y sostenible.

P. ?Y qu¨¦ pasa con la energ¨ªa nuclear?

R. El problema de la energ¨ªa no tiene una soluci¨®n ¨²nica. Es un problema de sistema, as¨ª que necesitamos un portafolio de soluciones, y lo ¨²nico claro ahora es que debemos explorar todas las direcciones posibles. Ser¨ªa probablemente una decisi¨®n poco sabia no considerar a la energ¨ªa nuclear como parte de la soluci¨®n, aunque no sea suficiente por s¨ª misma. Estamos en un momento muy peligroso, en el que el consumo energ¨¦tico del planeta se habr¨¢ duplicado en 2050, y da igual si crees o no que el calentamiento global tiene su origen en la acci¨®n humana: el ritmo al que se aumenta el CO2 en la atm¨®sfera es insostenible. Tenemos que pensar muy r¨¢pidamente en soluciones para este problema, que tiene muchas ra¨ªces: los combustibles f¨®siles; la demanda, la seguridad nacional... Lo que se recomienda es secuestro de carbono: tenemos que ser capaces de pensar en c¨®mo lo capturamos y lo depositamos.

P. ?No est¨¢ ya claro el papel del hombre en el calentamiento global?

R. Personalmente, estoy convencida de ello, pero es que... el que las causas del calentamiento global sean antropog¨¦nicas o no es irrelevante, porque hay demasiadas consecuencias negativas a las que tenemos que hacer frente ahora mismo.

P. Una pregunta inevitable. Las mujeres cient¨ªficas en puestos altos siguen siendo pocas. ?Qu¨¦ piensa de esto?

R. Me importa mucho, tengo una opini¨®n muy clara al respecto. El mundo necesita m¨¢s cient¨ªficos e ingenieros de los que se est¨¢n produciendo, al menos en EE UU, y creo que en la mayor¨ªa de los pa¨ªses. Si nuestros sistemas educativos y de empleo no logran mantener en la investigaci¨®n a la poblaci¨®n que tiene la capacidad y el inter¨¦s en participar, nos estamos haciendo un muy flaco favor. Tenemos que lograr que toda la poblaci¨®n participe de igual forma a la hora de resolver los problemas de nuestra era.