Portillo reactiva al N¨¤stic

Agach¨® la cabeza el Zaragoza en el campo del N¨¤stic y perdi¨® una oportunidad de oro para aposentarse en la zona m¨¢s noble de la tabla. Lo contrario que el N¨¤stic, que le alcanz¨® con un tanto de cabeza de Portillo para llenarse de esperanza, para so?ar con eludir el descenso, ahora a seis puntos. Con un planteamiento tan raqu¨ªtico como agarrado, el Zaragoza se escondi¨® en Tarragona. Lo pag¨® caro y se cobr¨® mediante el mazazo de Portillo.

Soliviantado por el resultado obtenido ante el Bar?a en la jornada anterior, V¨ªctor Fern¨¢ndez repiti¨® dibujo, un 4-2-3-1. Una apuesta excesivamente conservadora de atender a la clasificaci¨®n, de mirar que el equipo se jugaba asentarse en las posiciones de Champions y que el N¨¤stic era el farolillo rojo. Y, de paso, un tanto il¨®gica; el Zaragoza ha practicado durante todo el curso un sistema con dos delanteros. La t¨¢ctica funcion¨® de rechupete ante el Bar?a porque el equipo azulgrana practic¨® una defensa de tres y porque le igual¨® en efectivos en la zona medular. Ante el N¨¤stic, sin embargo, result¨® una calamidad. Entre otras cosas, porque el conjunto grana apret¨® en la zona de creaci¨®n rival y cerr¨® los espacios en la zaga. Languideci¨® el Zaragoza al tiempo que se reactiv¨® el N¨¤stic. El estilete, Portillo.

El ataque grana era diagonal; las jugadas las iniciaba el carrilero Pampa Calvo por el costado derecho y, con un cambio de orientaci¨®n, las persegu¨ªa Gil. Pero el extremo izquierdo demostr¨® tanta velocidad como poco control con el bal¨®n en los pies. Hasta que opt¨® por aliarse con Pinilla, quien de mediapunta demostr¨® su calidad t¨¦cnica y su visi¨®n panor¨¢mica a la hora de dar el ¨²ltimo pase. Portillo, sin embargo, bien marcado por los centrales blanquillos, nunca le gan¨® la espalda a la zaga adversaria. As¨ª, las ocasiones se redujeron a la m¨ªnima expresi¨®n. Una falta directa de D'Alessandro directa a las manos de Bizzarri y, para el N¨¤stic, dos disparos de Pinilla con la zurda, su pierna mala, desde fuera del ¨¢rea.

El bal¨®n, sin embargo, siempre robado por los medios centros Generelo y Chabaud, era del N¨¤stic. La peor noticia para un Zaragoza que basa su f¨²tbol en el toque, en la circulaci¨®n din¨¢mica y en las vertientes ofensivas. Fue entonces el equipo grana quien manej¨® el cuero como un equipo de balonmano, de lado a lado. As¨ª lleg¨® el primer aviso de Portillo, que culmin¨® desastrosamente una jugada colectiva que cruz¨® el campo, que pas¨® por los pies de la mayor¨ªa de los futbolistas del N¨¤stic. Pero Portillo, a centro de Pinilla, err¨® con la testa en la misma boca del gol.

Poco despu¨¦s, Portillo se resarci¨® y sonroj¨® al Zaragoza, indolente e insulso aunque el t¨¦cnico, a ¨²ltima hora, decidiera retomar el sistema que tan bien le hab¨ªa funcionado hasta la fecha. El tanto lleg¨® a bal¨®n parado, de un saque de esquina lanzado por Gil y rematado por Portillo, libre de marcaje, en el segundo palo. Esta vez no fall¨® y logr¨® su noveno gol en lo que va de Liga.

El Zaragoza se desperez¨® de su letargo y reaccion¨® en las postrimer¨ªas. Situ¨® su juego frente a la porter¨ªa local y tuvo en las botas de ?scar una opci¨®n inmejorable, que desde la frontal del ¨¢rea ret¨® a Bizarri pero perdi¨® la apuesta. "No hemos sabido entrar en el partido", reconoci¨® despu¨¦s V¨ªctor Fern¨¢ndez. "Estamos a un nivel que, si empezara hoy el campeonato, podr¨ªamos aspirar a mucho", respondi¨® Flores.

El N¨¤stic se hizo fuerte ayer en el Nou Estadi, que en esta segunda vuelta ya ha derrotado al Espanyol y al Sevilla, empatado con el Recreativo y el Valencia, y concedido una ¨²nica derrota ante Osasuna. Unos registros que dan licencia para so?ar, para no descartar la posibilidad de salvarse de la quema.