Ciencia

En Tele 5, antes de que empezara la carrera de F-1, explicaron aplicaciones de la supercomputaci¨®n en los c¨¢lculos de din¨¢mica de fluidos y los b¨®lidos. Y es que, l¨®gicamente, la ciencia y la tecnolog¨ªa se cuelan en cualquier parte. En El hormiguero (Cuatro) de Pablo Motos, los minutos mejor inventados del domingo, convirtieron una berenjena en una bombilla, mantuvieron ardiendo bengalas dentro de un l¨ªquido y provocaron la implosi¨®n de un bid¨®n. Se trata de su habitual espacio de ciencia, en el que Motos siempre pregunta al muy sabio Flipy por qu¨¦ pasan las cosas. Y tiene su respuesta, breve pero suficiente, incluso en un texto circulante en el inferior de la pantalla.

En cambio, en Brainiac (Cuatro), programa que se estren¨® el s¨¢bado como un espacio de divulgaci¨®n cient¨ªfica, la mitad de los experimentos se quedan sin explicaci¨®n. Demuestran que un embalaje de pl¨¢stico de bolitas protege mejor que una manta o que el papel puede ser doblado sobre s¨ª mismo m¨¢s de ocho veces. Pero en el primer caso s¨®lo dicen que el pl¨¢stico es un gran invento, y en el segundo, que "hay una explicaci¨®n geom¨¦trica" sin otro pormenor aclaratorio, lo que convierte este espacio de ciencia en uno de bricolaje, eso s¨ª, muy espectacular. Se van a Estados Unidos a subirse a un caza o prueban la levitaci¨®n en un t¨²nel de viento sobre el que, en este caso s¨ª, dieron explicaciones. Y no fue ninguna molestia. Si no las dan en todos los casos, vamos a pensar que en el programa, producido por los mismos del a?orado Nada x aqu¨ª, hacen trucos de magia.

En La 2 termin¨® la semana tem¨¢tica Conciencia-2. Un trabajo a recordar, el del reportero Vicente Romero y el juez Baltasar Garz¨®n. Se llam¨® El alma de los verdugos, sobre los asesinos de la dictadura argentina. El relato de las v¨ªctimas o sus familiares sigue teniendo un vigor estremecedor, no se marchita. El testimonio de los abogados de los torturadores, a pesar de los a?os de elaboraci¨®n, sigue apestando. Lo peor de todo, como record¨® Garz¨®n, es que sigue habiendo en el mundo geograf¨ªas (es decir, personas) sin derechos.