El centenario nacional de Machado y Soria

La magna obra de Antonio Machado se fue elaborando en su itinerario por las siete ciudades espa?olas donde habit¨® el poeta a lo largo de una vida que comenz¨® en Sevilla en el entorno de una familia progresista que formaba parte de la mejor ilustraci¨®n espa?ola enraizada en el krausismo y la Instituci¨®n Libre de Ense?anza y que se trunc¨® en el exilio y muerte en Collioure a causa de la barbarie franquista. En este itinerario vital machadiano, Soria ocupa el lugar central de su vida y de su obra, porque su influjo fue decisivo en el hombre, el pensador y el poeta universal. Su llegada a Soria en la primavera de 1907 para tomar posesi¨®n de su c¨¢tedra de franc¨¦s en el Instituto de Ense?anza Media, fue un encuentro m¨¢gico de cinco a?os hasta 1912 entre una ciudad y un poeta que marcaron el resto de su obra. En Soria encontr¨® Machado los elementos fundamentales que le convirtieron en un poeta universal. En primer lugar, el amor de Leonor del que surgieron versos del m¨¢ximo esplendor vital que se transformaron en eleg¨ªa profunda a causa de la temprana muerte de su joven esposa: "Mi coraz¨®n est¨¢ donde ha nacido, no a la vida, al amor, cerca del Duero". En Soria encontr¨® tambi¨¦n otros componentes fundamentales. Por una parte un estilo esencial soriano hecho de la serenidad, profundidad, claridad y sencillez que van a caracterizar su poes¨ªa y su pensamiento. Otro componente fundamental en la obra machadiana que se encuentra en Soria es la visi¨®n y la mirada del otro, de los otros, de las personas, m¨¢s all¨¢ del yo de Soledades. En Soria, el poeta dio el paso de la poes¨ªa intimista de Soledades a la poes¨ªa exteriorizada de Campos de Castilla. Es un cambio que comienza a trav¨¦s de la percepci¨®n del paisaje. Antonio Machado es el primer paisajista l¨ªrico de Castilla, donde la profundidad del p¨¢ramo soriano, a la vez que la grandiosidad de su cielo claro y di¨¢fano, prestan al poeta una singular precisi¨®n, dot¨¢ndole de una incre¨ªble concisi¨®n dramatizadora de la realidad. En sus versos se plasma, seg¨²n Oreste Macr¨ª, "toda una ¨¦tica humana que se refleja en el relato de La tierra de Alvargonz¨¢lez". El reconocimiento un¨¢nime del valor po¨¦tico de Campos de Castilla fue adem¨¢s decisivo para salvar su vida como ¨¦l mismo reconoce: "Cuando perd¨ª a mi mujer, el ¨¦xito del libro me salv¨®. Pens¨¦ pegarme un tiro y no por vanidad, bien lo sabe Dios, sino porque pens¨¦ que si hubiera en m¨ª a¨²n algo ¨²til no ten¨ªa derecho a aniquilarlo". En Soria encontr¨® tambi¨¦n al otro como persona desde la dignidad de la propia persona. Precisamente fue en Soria donde comprob¨® que esta "maestra de castellan¨ªa" nos invita a ser lo que somos, y nada m¨¢s. ?No es esto bastante?... Hay un breve aforismo castellano -yo lo o¨ª en Soria por primera vez- que dice as¨ª: "Nadie es m¨¢s que nadie". En Soria formul¨® el poeta y el pensador una concepci¨®n humanista de la patria que ser¨¢ base posteriormente de la concepci¨®n de la dignidad humana del pueblo, que nadie en la literatura elev¨® a m¨¢s alto nivel. La dignidad de la persona, la dignidad del pueblo es la base de su ideolog¨ªa progresista. Precisamente, y esto no se ha se?alado en el estudio de su obra, es en Soria donde Machado se reconoce ya como poeta y pensador con esa ideolog¨ªa. Una ideolog¨ªa que m¨¢s tarde iba a explicitar con el compromiso heroico de sus hechos: "M¨¢s de una vez he dicho, y nunca me cansar¨¦ de repetirlo, que mi ideario pol¨ªtico se ha limitado siempre a aceptar como leg¨ªtimo solamente el Gobierno que representa la voluntad del pueblo, libremente expresada. Por eso estuve siempre al lado de la Rep¨²blica espa?ola". El Machado camino del exilio hacia la muerte junto con su pueblo, miles de espa?oles expulsados y exterminados por defender la democracia, es el mejor ejemplo de que es posible la uni¨®n al mismo tiempo de la est¨¦tica sublime de su poes¨ªa universal con la ¨¦tica heroica de la dignidad humana.

Machado es ya un cl¨¢sico con el reconocimiento de su poes¨ªa universal y de su pensamiento m¨¢s all¨¢ de modas y modos literarios. As¨ª lo ha testimoniado recientemente en Collioure ante su tumba la presencia de poetas y escritores actuales y tan importantes como ?ngel Gonz¨¢lez, Luis Garc¨ªa Montero, Almudena Grandes y el cantante Joaqu¨ªn Sabina, quienes nos emocionaron leyendo diversos poemas machadianos. As¨ª lo ha declarado oficialmente la Unesco con motivo del 50? aniversario de la muerte del poeta en 1989, "recordando el valor universal de su obra, conscientes de que la obra literaria de Antonio Machado contin¨²a siendo hoy una fuente de inspiraci¨®n para las nuevas generaciones".

Conocer y recordar la decisiva etapa soriana del poeta es imprescindible para comprender las se?as de identidad de Antonio Machado como poeta universal, la filosof¨ªa de su pensamiento y su propia ideolog¨ªa. El Gobierno ha acertado constituyendo recientemente una Comisi¨®n Nacional del Centenario soriano presidida por la vicepresidenta primera del Gobierno para conmemorar un aniversario de dimensi¨®n nacional e internacional que Machado y Soria merecen.

Como escribi¨® en Soria el propio poeta: "No tiene una sociedad valores m¨¢s altos que sus hombres preclaros". Machado es el hombre y el poeta preclaro que cualquier pa¨ªs de nuestro entorno europeo convertir¨ªa en el s¨ªmbolo de su mejor historia.

Manuel N¨²?ez Encabo, catedr¨¢tico, es presidente de la Fundaci¨®n Antonio Machado.