Los juzgados de M¨¢laga instruyen dos casos por acoso inmobiliario
Los propietarios de dos inmuebles est¨¢n imputados de coacciones
Dos juzgados de M¨¢laga instruyen sendas causas penales por acoso inmobiliario contra los propietarios de dos edificios de viviendas en el casco hist¨®rico de la capital que no cumplen con sus obligaciones de mantener en condiciones los inmuebles. En ambos casos se les imputa un presunto delito de coacciones por la presi¨®n que realizan sobre los inquilinos, por lo general personas de avanzada edad, para que abandonen las casas.
Las denuncias que han dado origen a las causas las present¨® el Defensor del Ciudadano de la provincia, Francisco Guti¨¦rrez, quien sostiene que cientos de personas de la zona centro de la ciudad sufren el acoso de los propietarios de las viviendas que hacen dejaci¨®n de sus obligaciones de mantenimiento para forzarles a abandonarlas "con fines meramente especulativos" y lamenta la "indiferencia, cuando no la complicidad, de los organismos municipales responsables de velar por la legalidad urban¨ªstica".
En una de las causas abiertas est¨¢ imputado el propietario de un edificio en calle Mariscal, Jes¨²s Jim¨¦nez Astorga, que se ha negado a arreglar las zonas comunes del inmueble, de 20 viviendas, aunque s¨®lo cinco permanecen habitadas. El pasado julio, la inspecci¨®n de Sanidad municipal emiti¨® un informe en el que constataba la "manifiesta insalubridad en la totalidad del inmueble, acumulaci¨®n de basuras, heces, enseres, proliferaci¨®n de insectos y roedores. Hedor insoportable", y conclu¨ªa que "se hace necesaria la intervenci¨®n urgente de los organismos competentes". El propietario aleg¨® que el mantenimiento de las zonas comunes "no est¨¢ incluido en los contratos de alquiler" y corresponde a los vecinos. Las ventanas de las escaleras est¨¢n rotas, no hay luz, y aunque hay acometida de agua potable, no existe contrato.
El segundo caso se refiere a un corral¨®n de la calle San F¨¦lix Cantalicio, donde ya en marzo de 2005 una inspecci¨®n de los bomberos conmin¨® a la urgente reparaci¨®n de la cubierta de teja y de los falsos techos interiores afectados por filtraciones de lluvia y a la reposici¨®n del revestimiento exterior de los muros. En octubre de aquel a?o, la propietaria, Proyectos y Promociones Impar, que hab¨ªa comprado el inmueble dos meses antes, solicit¨® al Ayuntamiento la declaraci¨®n de ruina del edificio. La propiedad ha retirado los contadores de luz, ha cortado el agua corriente, y permite la acumulaci¨®n de basuras y roedores en las zonas comunes del edificio, seg¨²n ha constatado el Defensor del Ciudadano.
Francisco Guti¨¦rrez recuerda que hay hay algunos antecedentes en Catalu?a, Baleares y Pa¨ªs Vasco de sentencias que han condenado por acoso a los popularmente conocidos como asustaviejas.
Desde febrero del a?o pasado, la oficina del Defensor del Ciudadano de M¨¢laga ha tramitado 40 expedientes por quejas por acoso inmobiliario, en su mayor¨ªa de personas de avanzada edad y escasos recursos econ¨®micos. Su mediaci¨®n ha permitido acuerdos entre inquilinos y propietarios en siete casos, que se han saldado con indemnizaciones a los inquilinos para que abandonen las viviendas o la b¨²squeda de viviendas alternativas. En un caso, un inquilino ha ingresado en una residencia y el propietario le abona la diferencia que hay entre el precio de ¨¦sta y el alquiler que pagaba.
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