Jerusal¨¦n construir¨¢ 20.000 casas para jud¨ªos en territorio palestino
Los ultraortodoxos poblar¨¢n ¨¢reas de Cisjordania conquistadas en 1967
A cuatro d¨ªas de la celebraci¨®n en Israel de la conquista de Jerusal¨¦n Este en la guerra de junio de 1967, el Ayuntamiento de la ciudad prosigue con sus proyectos de colonizaci¨®n de zonas palestinas. Un plan dado a conocer el jueves prev¨¦ construir m¨¢s de 20.000 viviendas para familias ultraortodoxas jud¨ªas al norte y sur de la ciudad, para enlazar as¨ª Jerusal¨¦n con dos colonias en Cisjordania donde ya viven decenas de miles de personas.
En Jerusal¨¦n residen en la actualidad 720.000 personas, de las cuales un tercio son palestinas. El asesor del presidente palestino, Saeb Erekat, advirti¨®: "Esto [el plan] destruye los esfuerzos por reavivar el proceso de paz. Israel podr¨¢ tener asentamientos o paz, pero no ambas cosas". No obstante, de poco sirven las frecuentes quejas de los dirigentes palestinos.
La empresa colonizadora comenzada hace cuatro d¨¦cadas contin¨²a imparable, apoyada ahora por el muro de hormig¨®n que a¨²n se levanta en torno a la Ciudad Santa, y que ha convertido los barrios palestinos en enclaves inviables econ¨®micamente.
Resta todav¨ªa que el Consejo Nacional de Planeamiento y Construcci¨®n apruebe los proyectos urban¨ªsticos del Ayuntamiento de Jerusal¨¦n, cuyo alcalde, el ultraortodoxo Uri Lupoliansky, goza de excelentes relaciones con el primer ministro y ex regidor de la ciudad, Ehud Olmert. Es m¨¢s que probable que cualquier Gobierno hebreo d¨¦ su visto bueno. Si bien en Israel hay notorio respaldo a una retirada de gran parte de Cisjordania, Jerusal¨¦n es harina de otro costal. Casi nadie est¨¢ dispuesto a ceder a los palestinos lo que exigen: la retirada completa a las fronteras previas a 1967.
Las tierras donde se prev¨¦ alzar las 20.000 casas fueron conquistadas entonces por el Ej¨¦rcito. Naciones Unidas -en la resoluci¨®n 242- rechaza la anexi¨®n de Jerusal¨¦n Este, donde ya residen 200.000 personas, adem¨¢s de las 240.000 que pueblan las colonias de Cisjordania. Pero las autoridades hebreas no toman en consideraci¨®n la resoluci¨®n 242.
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