"La ¨²nica manera de producir materia real es invent¨¢ndola"
Pierre Huyghe (Par¨ªs, 1962) es uno de los artistas franceses contempor¨¢neos que mejor acogida tiene fuera de su pa¨ªs. Criado en el punk y el anarquismo, ha construido su identidad como artista en torno a la idea de la "subjetividad colectiva", como reacci¨®n al excesivo egocentrismo del artista en busca de reconocimiento. Sus trabajos en v¨ªdeo de los a?os noventa indagaban en los fr¨¢giles l¨ªmites entre lo real y lo imaginario. Ahora, en el MUSAC de Le¨®n, presenta su primera exposici¨®n individual en Espa?a bajo el t¨ªtulo A Time Score (Una partitura de tiempo), una reflexi¨®n sobre el tiempo no-lineal, un estado m¨¢s all¨¢ de las ideas de pasado y futuro. En la muestra se re¨²nen algunos de los principales proyectos de su trayectoria -como Atari, Light Pong, This is not a time for dreaming y A journey that wasn't- junto a obras recientes.
PREGUNTA. A comienzos del siglo XXI, para un artista, ?es un inconveniente ser franc¨¦s?
RESPUESTA. En l¨ªneas generales lo ¨²nico que puedo decir es que en el arte lo que me interesan son las singularidades y que hago abstracci¨®n de los factores que las rodean pero no siempre es as¨ª. Es verdad que Estados Unidos o Alemania disponen de muchos museos, coleccionistas, publicaciones, que tienen una gran maquinaria que favorece a sus artistas pero tambi¨¦n que hay muy buenos artistas norteamericanos o alemanes.
P. Viajar a Par¨ªs, Nueva York o Tokio para encontrarse con la misma instalaci¨®n de, por ejemplo, Richard Long, ?no es decepcionante?
R. S¨ª, pero eso me preocupa poco. Lo que si me parece lamentable es que los artistas j¨®venes de Par¨ªs, Nueva York o Tokio hagan lo mismo. ?se es el verdadero problema aunque entre los dos es cierto que hay una relaci¨®n de causa-consecuencia.
P. ?Cu¨¢l ser¨¢ la caracter¨ªstica distintiva de la exposici¨®n en el MUSAC?
R. Es una sucesi¨®n de distintas formas de exposici¨®n, una colecci¨®n de exposiciones que se transforma en una sola exposici¨®n.
P. Cada pieza es un relato.
R. Lo que intento hacer en cada una de ellas es que emerja la parte de ficci¨®n que contiene para que as¨ª tambi¨¦n aumente el suplemento de realidad. Mis obras no son una simple constataci¨®n o una cr¨ªtica de unos hechos o situaciones sino otro hecho u otra situaci¨®n. La representaci¨®n no tiene que ser el final de un proceso sino un punto de partida.
P. ?Hacia otra realidad?
R. Hay una preocupaci¨®n por la manera de tratar lo real. Los recursos para captarlo van ligados a formatos, a convenciones, a reglas sociales. No soy tan ingenuo como para creer que logro escapar a ello, pero intento reencuadrarlos. La ¨²nica manera de producir materia real es invent¨¢ndola y la inventas porque est¨¢ ah¨ª, disponible.
P. Hoy todo el mundo parece prestarse al juego.
R. Antes eso s¨®lo lo encontrabas en Estados Unidos, donde la gente ha crecido con la imagen y est¨¢ siempre dispuesta a convertirse en una. Saben jugar y circular perfectamente entre lo que es, la manera de contarlo y la condici¨®n de narrador o protagonista. Hoy todos somos pre-imagen. Cuando la c¨¢mara llega ya todos estamos preparados para ser captados por ella.
P. Su ¨²ltima aventura en busca y captura de lo real le ha llevado al ?rtico.
R. ?En busca y captura de un ping¨¹ino albino! El punto de partida es cl¨¢sico: tiene que existir un mundo-otro, un m¨¢s all¨¢. Es una hip¨®tesis propia de un artista y nuestro trabajo es inventarlo. Con un grupo decidimos inventar ese m¨¢s all¨¢, lo teorizamos y, a continuaci¨®n, hemos ido a descubrirlo y a traer las pruebas de su existencia. De ah¨ª el viaje al ?rtico, en un nav¨ªo polar. Y el ping¨¹ino albino, que se nos aparece, claro.
P. Como
Copito de Nieve subido a una de las torres de la Sagrada Familia de Gaud¨ª.
R. No conoc¨ªa esa imagen pero me parece fant¨¢stica: un gorila albino que no puede tener descendencia encaramado a lo alto de un templo inacabado. Es el punto de partida para un relato de Borges.
P. En Le¨®n, el MUSAC publicar¨¢ el
Quijote de Pierre Menard.
R. En efecto. Haremos que exista ese Quijote que Borges atribuye a Pierre Menard.
P. Usted se ha inventado tambi¨¦n el personaje de AnnLee.
R. Es un trabajo realizado con Philippe Pareno. En Jap¨®n existe una gran demanda de soportes narrativos. Con Philippe compramos el dibujo de AnnLee. Por 7.000 yenes. Con ¨¦l pod¨ªamos hacer una serie de dibujos animados, un manga, un videojuego... nosotros le hemos dado al personaje una dimensi¨®n polif¨®nica, proponi¨¦ndolo a otros creadores que se han expresado a trav¨¦s de ¨¦l. En cada episodio, AnnLee se presenta y recuerda su origen, ese cat¨¢logo en el que figuraba junto a otros dibujos. Con Philippe decidimos que hab¨ªa que devolverle al personaje sus derechos. La hemos liberado. No tenemos el copyrigth pero AnnLee tampoco es una open source, algo que todo el mundo puede utilizar. Es un personaje libre: su imagen ha desaparecido pero puede seguir siendo contado.
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