Vigilar a los que nos vigilan

La polic¨ªa brit¨¢nica quiere hacer un seguimiento de beb¨¦s potencialmente peligrosos, seg¨²n sus antecedentes familiares, y la polic¨ªa alemana toma muestras de olor de sospechosos de ser violentos. La suspicacia es arma natural de la polic¨ªa, para ella todos somos sospechosos ante un delito. A su vez, la t¨¦cnica cada d¨ªa m¨¢s compleja sirve para prevenir delitos, pero limita los derechos de las personas a su intimidad. Si no hubiese leyes restrictivas a este respecto, tal vez ganar¨ªamos en seguridad, pero no tendr¨ªamos libertad. Esas normas de derecho a la privacidad ser¨¢n progresivamente m¨¢s relajadas porque el mundo no est¨¢ para muchas alegr¨ªas en materia de delincuencia y atentados.

Espa?a se encuentra otra vez en la lista negra de Amnist¨ªa Internacional por casos de tortura, y eso es vergonzoso para nosotros. Se supone que esa pr¨¢ctica est¨¢ prohibida, pero hace poco vimos un v¨ªdeo en una comisar¨ªa en el que unos mossos golpeaban a un detenido. Tambi¨¦n hay que vigilar a los que vigilan nuestra seguridad, lamentablemente.