El BNG pone fin a 27 a?os de dominio en Sada de 'Moncho' Ares

Fin de una era en la villa costera de Sada, la de Moncho es mucho, como rezaba el lema electoral de uno de los m¨¢s veteranos y singulares alcaldes de Galicia, Ram¨®n Rodr¨ªguez Ares. El BNG, con el profesor Abel L¨®pez Soto al frente, logr¨® el domingo alzarse con la primera plaza y romper por primera vez desde las primeras elecciones municipales en democracia (1979) con la hegemon¨ªa del ex regidor conservador.

Desde hoy, sin apenas tiempo de saborear la victoria, los nacionalistas (que han obtenido seis concejales) se sentar¨¢n a negociar con los dos ediles electos socialistas y el ¨²nico representante de la lista independiente de Agrupaci¨®n Sada Unida (ASU) la formaci¨®n de un "gobierno estable". Y esta vez tienen realmente confianza, seg¨²n L¨®pez, en que no se repita lo ocurrido en 2004, cuando Rodr¨ªguez Ares consigui¨® desbancar al Bloque y su gobierno a cuatro bandas de la alcald¨ªa gracias al apoyo de los dos ediles tr¨¢nsfugas del PSdeG. Un episodio que hab¨ªa valido al ahora alcalde en funciones de Sada su expulsi¨®n del PP y que hoy, con el veredicto de las urnas del pasado domingo, tiene m¨¢s dif¨ªcil reeditar dado su significativa p¨¦rdida de votos (ocho puntos porcentuales menos que hace cuatro a?os y unas 300 papeletas por debajo de las que logr¨® el BNG).

Rodr¨ªguez Ares, que obtuvo bajo las siglas independientes de Partido Dem¨®crata Sada Popular (PDSP) seis concejales, s¨®lo tiene en el nuevo panorama municipal como aliado a quien le sustituy¨® como responsable local del PP, su viejo amigo y ex conselleiro de Sanidade con el Gobierno de Manuel Fraga, Jos¨¦ Mar¨ªa Hern¨¢ndez Coch¨®n. Este ¨²ltimo obtuvo dos ediles, insuficientes para permitir a Rodr¨ªguez Ares conservar el bast¨®n de mando.

El que previsiblemente ser¨¢ alcalde de Sada, el nacionalista Abel L¨®pez, ya gobern¨® durante un a?o tras las elecciones municipales de 2003, en coalici¨®n con el PSdeG y con el cabeza de lista de ASU. Los socialistas han renovado su candidatura tras la marcha de los tr¨¢nsfugas.