El para¨ªso de los mirones
La fotograf¨ªa en Espa?a es un fen¨®meno tan emergente como disperso y contradictorio. Tambi¨¦n absorbente, por apropiarse de registros visuales que nos son ajenos. Aqu¨ª convive lo reciente con registros sacados de pel¨ªculas ya a?ejas como Marcelino pan y vino o Marisol rumbo a R¨ªo. Es normal, porque a pesar de lo que ocurri¨® a mediados de los sesenta-setenta del siglo pasado, en que el medio estaba seguro de s¨ª mismo, hoy por hoy le ocurre todo lo contrario: duda de ello. Ahora vale todo. La Academia anda estancada en el Polo Norte y otros andan por el del Sur.
Espa?a, fotogr¨¢ficamente, es un pa¨ªs que se convierte en para¨ªso de los mirones de la c¨¢mara. M¨¢s ahora, con la fotograf¨ªa digital. Y antes con los zurbaranes, por ejemplo, de Ortiz de Echag¨¹e, hasta el todo vale contempor¨¢neo -dejando por medio el surrealismo que invadi¨® los finales de la d¨¦cada de los setenta-ochenta en el siglo XX-.
En lo econ¨®mico, hay mecenas p¨²blicos y privados que potencian el acto fotogr¨¢fico. Por otro lado, muchos de los que utilizan la c¨¢mara prefieren que los califiquen de "artistas"; no s¨¦ si por un cierto reparo a que las cosas se llamen por su nombre, aunque por otro suene m¨¢s a Hollywood. Pero una foto siempre ser¨¢ una foto, y quien la toma, un fot¨®grafo.
En Espa?a funcionan mod¨¦licamente determinadas instituciones. Por ejemplo: Art Madrid, La F¨¢brica (Madrid), KVBO, en el Kursaal (San Sebasti¨¢n); las frecuentes exposiciones realizadas en el Museo Casa de los Tiros (Granada) o en el Centro Andaluz de la Fotograf¨ªa (Almer¨ªa), la sala del Canal de Isabel II (Madrid), y es evidente la manifestaci¨®n que tiene hacia la imagen fija el Instituto de M¨¦xico (Madrid), dependiente de la Embajada de ese pa¨ªs; tambi¨¦n el centro Okendo Kulturetxea (Donostia) o las programaciones itinerantes de las salas de Caja Granada, la Fundaci¨®n Tres Culturas, la galer¨ªa F¨²cares o la del Espacio EAV, de la regi¨®n de Murcia, y por supuesto la de La Caixa.
A todo lo anterior habr¨ªa que agregar eventos m¨¢s consolidados hasta la fecha como PHotoEspa?a y la primavera fotogr¨¢fica de Catalu?a o los Fotoencuentros (Murcia).
En fin, un panorama impensable hace 30 a?os. Una realidad actual. Que la fiesta contin¨²e.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.