Rajoy frena a Gallard¨®n: "Podr¨ªa ser el 'n¨²mero dos', pero hay otros; prudencia"

A Mariano Rajoy no le gustan las sorpresas. Alberto Ruiz-Gallard¨®n, alcalde de Madrid, no le avis¨® de que iba a reclamarle en p¨²blico, y ante toda la c¨²pula del PP, que le incluya en la lista al Congreso para las generales. Por eso, Rajoy, un hombre que presume de tomar las decisiones con calma, y si son internas, con el m¨ªnimo ruido posible, le par¨® ayer los pies con un ligero coscorr¨®n dial¨¦ctico: "Gallard¨®n podr¨ªa ser un buen n¨²mero dos, pero hay muchos otros. Todo a su debido tiempo. En la vida, un poquito de prudencia". Esperanza Aguirre, rival de Gallard¨®n, apoy¨® el discurso de Rajoy.

Rajoy dio ayer una lecci¨®n de su gusto por las met¨¢foras, los dobles sentidos y, en general, el arte de esquivar las preguntas sobre asuntos internos o delicados. Ya lo hizo precisamente en otro episodio protagonizado por los dos grandes l¨ªderes madrile?os, cuando Esperanza Aguirre present¨® una biograf¨ªa autorizada muy cr¨ªtica con Gallard¨®n. Rajoy lo resolvi¨® entonces apelando a Romanones y su "?joder qu¨¦ tropa!".

Rajoy acudi¨® a Antena 3 en su af¨¢n por sacar partido a su victoria electoral por 160.000 votos y presionar al PSOE para que no pacte con los nacionalistas en Navarra, algo que le va a llevar a recorrer varios medios de comunicaci¨®n, siempre conservadores. Pero se encontr¨® con que el asunto del d¨ªa era otro. Y trat¨® de huir. "Tenemos un material humano de primera, estamos muy unidos y tenemos una firme voluntad de ganar. El PP tiene muchas personas y muy brillantes, y Gallard¨®n podr¨ªa ser un buen n¨²mero dos, pero tambi¨¦n muchos otros".

Rajoy evit¨® en todo momento criticar al alcalde por la oferta, que considera razonable, pero s¨ª lo hac¨ªa indirectamente por el momento y la oportunidad elegida para poner de actualidad este asunto. La mayor¨ªa de los dirigentes consultados ayer interpretan que el l¨ªder le ha pedido paciencia, pero no le ha dado ni mucho menos un portazo a un personaje como Gallard¨®n, que el propio Rajoy decidi¨® llevar a maitines, la c¨²pula del PP. "Todo el mundo quiere ayudar de la manera m¨¢s intensa que puede, que es ir en la lista", dijo. A partir de ah¨ª empez¨® a esquivar. "Cuando se convoquen las elecciones ya se lo dir¨¦, que es cuando se toman las decisiones: si un ni?o tiene siete a?os ?le va a preguntar ahora su padre qu¨¦ va a estudiar? pues d¨¦jeme esperar a que tenga posibilidad de elegir".

Luego ampli¨® esa met¨¢fora: "Hay muchos alumnos aventajados en Espa?a y a los ocho o nueve a?os a¨²n no deciden la carrera que quieren estudiar. Incluso hay gente que empieza a estudiar la carrera y es gente muy inteligente, muy capaz, y luego se da cuenta de que lo que hay que hacer es estudiar otra". Entre hombre precavido vale por dos y la fortuna de los audaces, Rajoy se queda en el medio, "donde est¨¢ la virtud".

Mientras, Aguirre, que significativamente anunci¨® ayer que se volver¨¢ a presentar para ser presidenta del partido en Madrid, parec¨ªa molesta por el protagonismo de Gallard¨®n: "Ni que lo hubiera dicho por primera vez [lo de las listas]", respondi¨® con una sonrisa. Rajoy dijo de ella que como presidenta auton¨®mica no puede ser diputada, "pero s¨ª senadora".