Memphis se mira en el espejo de Phoenix
El equipo de Gasol ficha como t¨¦cnico a Iavaroni, segundo de los Suns, para imitar su estilo vistoso
A falta de suerte en la loter¨ªa del draft, con el director deportivo, Jerry West, a punto de hacer las maletas, y con el propietario, Michael Hesley, poniendo la franquicia en el mercado un d¨ªa y retir¨¢ndola al siguiente, los Grizzlies de Memphis han dado por fin s¨ªntomas de tener un plan al contratar como entrenador a Marc Iavaroni (Nueva York, 1956), uno de los asistentes m¨¢s deseados de la NBA.
En el carrusel de t¨¦cnicos, el nombre de Iavaroni, hasta ahora mano derecha de Mike D'Antoni en los Suns de Phoenix, son¨® con fuerza los ¨²ltimos tres a?os. Cada vez que uno era despedido, ah¨ª estaba el impresionante curr¨ªculo de este antiguo p¨ªvot que comparti¨® banquillo con Mike Fratello en los Cavaliers de Cleveland, recibi¨® clases de Pat Riley en los Heat de Miami y aprendi¨® lo que significa atacar con D'Antoni. Los tres fueron elegidos al menos una vez entrenador del a?o. Pero Iavaroni, que estuvo a un paso de dirigir a los Bucks de Milwaukee en 2003 y a los Trail Blazers de Portland en 2005 y que vio c¨®mo sus idilios cayeron ante un rival de m¨¢s renombre, ha tenido que esperar a que un club en situaci¨®n desesperada le elija como gu¨ªa.
Para Gasol puede que la decisi¨®n de los Grizzlies signifique una nueva raz¨®n para quedarse en Memphis. De Iavaroni, que le gan¨® el puesto a un trotamundos como Larry Brown, sus antiguos jefes destacan su inteligencia, su esp¨ªritu competitivo, su detallada preparaci¨®n y su habilidad para ense?ar a sus pupilos a ser grandes jugadores. De hecho, D'Antoni no dud¨® en otorgarle el cr¨¦dito en el desarrollo y la ascensi¨®n de Stoudemire. Los Grizzlies consideraron este ¨²ltimo punto, ya que puede ayudar a Gasol, all star, a recuperar la ilusi¨®n y dar un considerable salto cualitativo.
Iavaroni, neoyorquino de Queens, jug¨® nueve temporadas en la NBA, en la que gan¨® el t¨ªtulo con los Sixers de Filadelfia como novato, 1983, para luego pasar por los Spurs de San Antonio y los Jazz de Utah. Antes y despu¨¦s, jug¨® en Italia, donde fue compa?ero de D'Antoni en el Phillips de Mil¨¢n, y en Espa?a, donde tuvo una corta estancia en el antiguo Caja Ronda, ahora Unicaja, de M¨¢laga (1990-91).
La figura de West fue vital en la contrataci¨®n del quinto t¨¦cnico de Gasol desde que lleg¨® a Memphis y supone una apuesta por el cambio. Se espera de Iavaroni que de Phoenix se traiga, adem¨¢s de la experiencia, el estilo ofensivo, casi kamikaze, que ha convertido a los Suns en el equipo m¨¢s vistoso. Ello har¨ªa atractivos a los Grizzlies y, desde el punto de vista de Heisley, equivaldr¨ªa a una inyecci¨®n monetaria con m¨¢s entradas vendidas.
Desde Arizona, adem¨¢s, puede que Iavaroni no sea el ¨²nico en trasladarse. Memphis entrevist¨® hace dos semanas al vicepresidente de Operaciones de los Suns, David Griffin, quien ocupa la primera posici¨®n en la candidatura a director deportivo que West dejar¨¢ vacante tras el draft. Parece que, al elegir un modelo que imitar, los Grizzlies han optado por el de los Suns. No es una mala elecci¨®n.
La tradici¨®n de entrenadores de ascendencia italiana tiene ya un nuevo miembro en Iavaroni. A nivel profesional o colegial, Rick Pitino, Rollie Massimino, Jim Valvano, Tom Izzo, P. J. Carlesimo, Fratello o D'Antoni son la prueba de esa personalidad italiana. De ese esp¨ªritu formar¨¢ parte Gasol.
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