Dieciocho municipios por los que pasa la 'Y' caen en manos de ANV y grupos opositores

Un total de 18 municipios de los 47 por los que discurre el trazado de la Y ferroviaria han ca¨ªdo en manos de Acci¨®n Nacionalista Vasca (ANV) y de agrupaciones electorales independientes abiertamente hostiles al proyecto de alta velocidad. Esta circunstancia complica la construcci¨®n de la infraestructura m¨¢s ambiciosa y compleja a la que se enfrenta Euskadi. Desde el Departamento de Transportes se observa con tranquilidad el resultado y se repite que ning¨²n ayuntamiento puede impedir las obras, ya que el proyecto no s¨®lo ha sido declarado de inter¨¦s general, sino que est¨¢ catalogado como prioritario por la UE.

Autorizada la licitaci¨®n de las obras del tramo Durango-Amorebieta, de 4,6 kil¨®metros y 91 millones de presupuesto

Por ello, el Gobierno se manifiesta absolutamente convencido de que las obras van a seguir con mayor o menor normalidad, aunque admite que, en esas circunstancias, los inconvenientes e intentos de obstaculizaci¨®n se pueden multiplicar.

ANV, el partido para el que la ilegal Batasuna pidi¨® el voto y cuyos resultados ha asumido como propios, ha heredado su frontal oposici¨®n al tren de alta velocidad (TAV). La izquierda abertzale ha convertido la lucha contra la construcci¨®n del trazado ferroviario de alta velocidad en una estrategia para afianzarse socialmente. Su objetivo final pasa por parar la l¨ªnea y convertir esta infraestructura en un elemento de tensi¨®n pol¨ªtica permanente.

La consejera de Transportes y Obras P¨²blicas, Nuria L¨®pez de Guere?u (PNV), ya se pronunci¨® antes de las elecciones sobre el hipot¨¦tico retorno de la izquierda abertzale a los ayuntamientos tras los comicios y las trabas administrativas que pudieran introducir, sobre todo, en el proceso de expropiaci¨®n de terrenos. La consejera puntualiz¨® entonces que el Ministerio de Fomento es el responsable ¨²ltimo de este procedimiento, por lo que el color pol¨ªtico de los nuevos ayuntamientos "no influir¨¢n en la evoluci¨®n de las obras". Al mismo tiempo, adelant¨® que el Gobierno seguir¨¢ dialogando con los representantes pol¨ªticos que est¨¦n en cada momento.

De los 18 municipios que pueden ser gobernados por la izquierda abertzale o candidaturas independientes opuestos al proyecto, la mayor¨ªa se ubica en Guip¨²zcoa (un total de 13), hay uno en ?lava (Aramaio) y cuatro en Vizcaya (Abadi?o, Elorrio, Atxondo e Izurza).

Se trata de ayuntamientos que la legislatura pasada estuvieron gobernados, en su mayor parte, por la coalici¨®n PNV-EA. En aquel momento, la ilegalizaci¨®n de Batasuna le impidi¨® articular a tiempo una plataforma para concurrir a los comicios, pero ahora con ANV ha cambiado el panorama. Los problemas que pueden crear estos municipios, insiste el departamento, se circunscriben a las expropiaciones de terrenos p¨²blicos, pero en ning¨²n caso pueden poner en peligro el desarrollo de la obra.

M¨¢s preocupaci¨®n suscita la posible extensi¨®n de acciones de violencia contra la maquinaria y la propia infraestructura. La Ertzaintza ha contabilizado alrededor de una decena de sabotajes a las empresas constructoras con tramos adjudicados. Un grupo de personas contrarias al TAV cort¨® ayer el paso de un tren de vapor de ¨¦poca que circul¨® entre Bilbao y Durango para conmemorar el 125? aniversario de esta l¨ªnea, y en la que viajaba la consejera de Transportes y otras autoridades. Dos de los activistas se encadenaron a la v¨ªa y tuvieron que ser liberados por la Ertzaintza.

Aunque s¨®lo en uno de los tramos se han iniciado los trabajos (en el alav¨¦s de Arrazua-Legutiano), las previsiones de la Administraci¨®n central es que todo el ramal Vitoria-Bilbao est¨¦ en obras antes de final de a?o. El Consejo de Ministros autoriz¨® ayer al Ministerio de Fomento a licitar las obras de un nuevo tramo, Durango-Amorebieta, de 4,60 kil¨®metros de longitud, por un presupuesto de 91,1 millones de euros. Por su parte, el Gobierno vasco iniciar¨¢ los trabajos despu¨¦s del verano en el tramo de Itsasondo.

Los ataques se han centrado principalmente en da?ar la maquinaria pesada -se han pinchado ruedas, estropeado motores y sellado cerraduras- y en el lanzamiento de pintura. En algunos casos, los opositores han llegado a encadenarse en el lugar de las obras. Para hacer frente a los sabotajes, los gobiernos central y vasco han constituido una comisi¨®n con el fin de supervisar los trabajos y reforzar la seguridad.

Uno de los argumentos esgrimidos por los colectivos opositores al proyecto es la falta de discusi¨®n social con que se habr¨ªa aprobado la Y y la ausencia de un refer¨¦ndum para comprobar el nivel de adhesi¨®n con que cuenta. Incluso el sindicato ELA, mayoritario en el Pa¨ªs Vasco, ha convocado manifestaciones contra el tren de alta velocidad. Sobre esta cuesti¨®n, la consejera de Transportes acaba de reiterar en una respuesta parlamentaria a EHAK que "la toma de decisiones que suponen mejoras para el conjunto de la sociedad vasca, tiene los mecanismos de participaci¨®n establecidos y su ¨¢mbito de decisi¨®n est¨¢ en el Parlamento vasco". La C¨¢mara de Vitoria se pronunciado a favor del proyecto en numerosas ocasiones, tanto en esta legislatura como en las anteriores.

Tambi¨¦n ha habido, recuerda L¨®pez de Guere?u, "posibilidades reales, para personas y organismos, de opinar y participar activamente durante los procedimientos de tramitaci¨®n del proyecto, tanto en las consultas previas a la declaraci¨®n de impacto medioambiental, como del Plan Territorial Sectorial de la Red Ferroviaria en su fase de informaci¨®n p¨²blica". Este plan estuvo sometido durante cinco meses a informaci¨®n p¨²blica, durante los cuales se presentaron 1.634 alegaciones.

Seg¨²n la ¨²ltima encuesta sobre la cuesti¨®n, realizada por el Gobierno en el pasado mes de abril, siete de cada 10 ciudadanos apoyan la Y vasca, uno mantiene una postura neutra sobre el proyecto y dos se oponen a la infraestructura.