Recetas para ganar horas

Petra entra en la farmacia del barrio sevillano del Porvenir, donde reside, para preguntar cu¨¢ndo le toca llevarse sus p¨ªldoras para dormir. El farmac¨¦utico introduce su tarjeta sanitaria en un lector electr¨®nico e, inmediatamente en la pantalla del ordenador, se muestra la pauta m¨¦dica -media pastilla al d¨ªa- y que cuenta con existencias. "Aun tiene que tener en su casa", le dice. Petra admite que s¨ª, que tem¨ªa quedarse sin ellas. "A partir del lunes, ya puede llev¨¢rselas", le aclara el hombre, tras hurgar en el historial de la farmacia para descubrir cu¨¢ndo se llev¨® la ¨²ltima caja y cu¨¢ndo se le agotar¨¢.

La receta electr¨®nica sirve para que nadie acumule medicamentos en su hogar porque s¨®lo permite retirar el tratamiento en la farmacia cuando faltan diez d¨ªas para que se agote la entrega anterior. ?ste es s¨®lo uno de los positivos efectos secundarios del sistema implantado en Andaluc¨ªa de forma progresiva desde hace tres a?os, que ha permitido dispensar 18,5 millones de recetas electr¨®nicas.

La consejera andaluza de Sanidad calcula que se podr¨ªa ahorrar el 20% de las consultas

Salvo que est¨¦ enferma, Petra ya s¨®lo tiene que ir a su m¨¦dico dos veces al a?o para que le prescriba sus somn¨ªferos. Seg¨²n c¨¢lculos de la administraci¨®n andaluza, los ciudadanos se han ahorrado 27 millones de horas que antes empleaban en ir al centro de salud a buscar recetas de papel. La cobertura del medio electr¨®nico alcanza ya a cuatro millones de personas, m¨¢s del 52% de la poblaci¨®n andaluza. "Ahora estamos en el 15%, pero calculamos que se podr¨ªan ahorrar el 20% de las consultas", indica la consejera andaluza de Salud, Mar¨ªa Jes¨²s Montero.

En la farmacia sevillana de Enrique Ojeda se emplea desde el 31 de octubre de 2006. Como la suya, hay 2.400 boticas repartidas por la comunidad que pueden dispensar medicamentos prescritos de forma digital en la consulta m¨¦dica. Son casi el 67% del total de farmacias, seg¨²n la consejera.

Los enfermos cr¨®nicos y las cuidadoras de este tipo de pacientes son los colectivos m¨¢s beneficiados. "El paciente se ahorra las colas y se le quita el tr¨¢mite cuasi burocr¨¢tico para continuar un tratamiento cr¨®nico", expone Ojeda. No son los ¨²nicos beneficiados. Los m¨¦dicos se liberan de una labor rutinaria administrativa que contribuye a cargar sus consultas. Medido en horas: 551.000 al a?o, que ahora los facultativos emplean en actos exclusivamente m¨¦dicos.

Bautizado como Receta XXI, el programa andaluz arranc¨® de forma experimental en 2003 en el barrio sevillano de Torreblanca. El ¨¦xito fue inmediato. El m¨¦dico Juan Su¨¢rez-Varela, por ejemplo, suprimi¨® las dos horas semanales que reservaba s¨®lo para recetar. De una tacada, un facultativo prescribe el tratamiento de un paciente para los siguientes seis meses. La pauta se graba digitalmente, de forma que cualquier farmacia adherida al programa puede consultar la decisi¨®n del m¨¦dico siempre que disponga de la llave de acceso: la tarjeta sanitaria del paciente. As¨ª se garantiza la confidencialidad en el acceso a la informaci¨®n -s¨®lo es posible con la tarjeta del usuario-, al tiempo que se universaliza: el paciente puede ir a cualquier farmacia que tenga el programa en cualquier lugar de Andaluc¨ªa.

Los boticarios suministran la medicaci¨®n de forma escalonada e incluso pueden alertar a los doctores de cualquier reacci¨®n adversa o contraindicaci¨®n que observen. Por esta v¨ªa se han tramitado 2.800 avisos a m¨¦dicos de familia. En sentido inverso, los facultativos han enviado 8.700 avisos a farmac¨¦uticos para que refuercen la adherencia del paciente al tratamiento. "Con la receta electr¨®nica, la farmacia juega un papel de m¨¢s calidad", se?ala la consejera. De hecho, el sistema andaluz se ha dise?ado a tres bandas: sanitarios, farmac¨¦uticos e inform¨¢ticos.

El modelo andaluz inspira a otros. "La receta electr¨®nica no es sacar un papel impreso desde el ordenador", ironiza Montero. El Servicio Andaluz de Salud ha recibido visitas de delegaciones de Canad¨¢, Francia, Suecia, Italia y Portugal, entre otras, y de numerosas comunidades aut¨®nomas. La propia comisaria europea de la Sociedad de la Informaci¨®n, Viviane Reding, elogi¨® a Andaluc¨ªa como "una de las regiones punteras" de la Uni¨®n Europea en el desarrollo de tecnolog¨ªas de la informaci¨®n en el campo de la salud.

La receta electr¨®nica se enmarca dentro de una estrategia de salud digital m¨¢s amplia, que pivota alrededor del programa Diraya, que tambi¨¦n permite obtener citas para pediatras y m¨¦dicos de familia a trav¨¦s de Internet y posibilitar¨¢ el acceso a ocho millones de historias cl¨ªnicas desde cualquier centro sanitario andaluz cuando est¨¦ plenamente implantado. Ser¨¢ una de las bases de datos digitalizados m¨¢s vastas de Europa.