Deseos cruzados en Puerto Real
"Puerto Real ha pedido cambio y yo estoy dispuesta a d¨¢rselo". Las intenciones de la candidata socialista a la alcald¨ªa de Puerto Real, Ana Mosquera, se han encontrado de bruces con las directrices regionales de su propio partido. El PSOE tendr¨¢ que sacrificar la posibilidad de retirar de la alcald¨ªa a un hist¨®rico de IU como es Jos¨¦ Antonio Barroso para garantizarse el apoyo de la formaci¨®n izquierdista en la Diputaci¨®n gaditana. Barroso ya lo ha dejado claro. "Si yo no soy alcalde, el PSOE no gobernar¨¢ en la Diputaci¨®n". Mosquera, que tiene un posible pacto con el PA en las manos, tendr¨¢ que comerse el sapo de la disciplina de partido.
Mosquera lo intent¨® hasta el final, pero no lo consigui¨®. Aunque mejor¨® un 4% en respaldo e increment¨® un concejal no consigui¨® su aspiraci¨®n de ser la lista m¨¢s votada. IU obtuvo ocho ediles (dos menos que en 2003); el PSOE, siete; el PA, cuatro; el PP, uno; y otro Los Verdes. El d¨ªa despu¨¦s de las elecciones la candidata socialista anunciaba la hora del cambio en Puerto Real. Durante los ¨²ltimos cuatro a?os el enfrentamiento con IU ha ido a mayores. Los socialistas han basado su labor de oposici¨®n en denunciar la intransigencia del gobierno de Barroso, su incapacidad para el di¨¢logo, la falta de transparencia, las dificultades para acceder a informaci¨®n p¨²blica, el oscurantismo de algunas concesiones. El PSOE denunci¨® tambi¨¦n en este ¨²ltimo mandato la labor inmobiliaria del hermano del alcalde, Francisco Javier Barroso, cuyas empresas tienen 96 propiedades en el municipio. Adem¨¢s la Junta alert¨® de que la casa del hermano del alcalde se construy¨® en suelo para usos educativos. El caso lleg¨® a los juzgados aunque la causa fue, en principio, archivada. Esta denuncia escoci¨® especialmente a Barroso, quien asegur¨® haber sido "v¨ªctima de una liquidaci¨®n moral y pol¨ªtica" contra ¨¦l.
La campa?a tambi¨¦n ha sido tensa. El PSOE lleg¨® a acusar directamente al "entorno de IU" de los sabotajes y destrozos sufridos en sus carteles electorales y tambi¨¦n en la propia fachada de la sede socialista, que apareci¨® pintada de negro. En otras paredes se escribieron mensajes contra Ana Mosquera. IU devolvi¨® la denuncia con una amenaza de acudir a los juzgados por estas acusaciones que consideraban "infundadas".
Mosquera se ha agarrado a la mejora de sus resultados y a la bajada de IU para asegurar que Puerto Real quiere cambio. Aunque han tenido que ser dirigentes de su propio partido los que le hayan recordado que si esa petici¨®n de cambio fuera real, ella habr¨ªa liderado la lista m¨¢s votada. Algo que el 27 de mayo no le dio.
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