C¨¦cilia marca su propio estilo
La esposa de Sarkozy rechaza oficializar su papel pol¨ªtico
C¨¦cilia Sarkozy ser¨¢ la primera dama de Francia pero menos. Seg¨²n ha informado el palacio del El¨ªseo, la esposa del flamante presidente de la Rep¨²blica Nicolas Sarkozy no dispondr¨¢ ni de "gabinete propio" ni de "un equipo de consejeros", dos soluciones que hab¨ªan sido contempladas para resolver la situaci¨®n de una mujer que, en su momento, fue jefe de gabinete de su marido cuando ¨¦ste estuvo al frente del Ministerio del Interior o del de Econom¨ªa y Hacienda.
Ahora parece que es la propia C¨¦cilia la que no deseaba institucionalizar su situaci¨®n pol¨ªtica. Y ah¨ª los rumores siguen circulando, atribuy¨¦ndole una amistad ¨ªntima con un novelista franc¨¦s que vive en el extranjero.
En cualquier caso, C¨¦cilia Sarkozy, por m¨²ltiples razones -de seguridad, de popularidad, de relaciones p¨²blicas-, dispondr¨¢ de algunos "colaboradores" para poder atender a todas las demandas y poder hacerlo sin crear problemas.
En la Rep¨²blica francesa, hasta ahora siempre presidida por hombres, la situaci¨®n de las esposas de los presidentes no fue contemplada hasta 1932, cuando fue asesinado el presidente Paul Daumer. Hijo de ferroviarios, obrero y periodista ¨¦l mismo, Daumer hab¨ªa hecho carrera pol¨ªtica siendo el primero en proponer un IRPF y especializ¨¢ndose en cuestiones presupuestarias. Hombre honrado y puritano, se negaba a estar enfermo y a aceptar ning¨²n tipo de protecci¨®n policial. Un exiliado ruso ¨¢vido de popularidad le asesin¨® de cinco balazos mientras el presidente visitaba una exposici¨®n de libros de memorias de antiguos combatientes de la guerra 14-18. La esposa de Daumer se encontr¨® en la miseria pues el presidente apenas hab¨ªa ahorrado nada a lo largo de una vida dedicada a la pol¨ªtica. Y fue cuando se supo que la mujer de Daumer s¨®lo com¨ªa porque acud¨ªa a las colas de la llamada "sopa popular" que se vot¨® una ley que atribu¨ªa una pensi¨®n para las viudas del jefe de Estado.
La esposa del general De Gaulle, Ivonne, iba a misa y se desentend¨ªa de las actividades pol¨ªticas de su esposo. Claude Pompidou manten¨ªa -y mantiene- una gran actividad en el terreno del arte y la creaci¨®n contempor¨¢nea.
Dani¨¨lle Mitterrand se ocup¨® de una fundaci¨®n dedicada a cuestiones relativas a los problemas del Tercer Mundo.
Y Bernardette Chirac, la ¨²ltima inquilina del El¨ªseo, cultiv¨® su imagen de gran se?ora de la derecha cl¨¢sica y presidi¨®, con gran fasto, organizaciones caritativas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.