De nuevo a la c¨¢rcel

I?aki de Juana Chaos vuelve a la c¨¢rcel tras el alta m¨¦dica del hospital de San Sebasti¨¢n donde se encontraba desde el pasado 1 de marzo a ra¨ªz de su huelga de hambre. Ingresa en el mismo centro de reclusi¨®n del que sali¨®, Aranjuez, y es previsible que cumpla los casi 14 meses que a¨²n le quedan de los tres a?os a los que le conden¨® el Tribunal Supremo el pasado febrero por un delito de enaltecimiento de terrorismo a trav¨¦s de dos art¨ªculos escritos en prisi¨®n. Pocos ser¨¢n los que discrepen de la decisi¨®n tomada ayer por Instituciones Penitenciarias. Si acaso, habr¨ªa sido de agradecer que hubiera sido acompa?ada de una explicaci¨®n m¨¢s s¨®lida dentro de la confusi¨®n que ha rodeado el caso del ex etarra, especialmente en las ¨²ltimas semanas, y no que la opini¨®n p¨²blica se enterase a trav¨¦s de unas declaraciones del ministro del Interior horas despu¨¦s de la ruptura de la tregua de ETA. D¨ªas atr¨¢s se insinu¨® que De Juana podr¨ªa concluir la pena en su domicilio sujeto a control telem¨¢tico, sin descartar su vuelta a la prisi¨®n, como finalmente ha resultado.

La atenuaci¨®n del r¨¦gimen penitenciario del ex jefe del comando Madrid no ha llegado nunca a entenderse del todo por la ciudadan¨ªa pese a que se ajustara a la ley. Despert¨® perplejidad y no poca irritaci¨®n social. Incluso dentro del ¨¢mbito judicial hubo discrepancias. El Gobierno fue consciente. Tuvo dificultades para exponer sus argumentos, que m¨¢s de una vez sonaron a poco convincentes. De Juana es, sin duda, merecedor del desprecio general por su responsabilidad en 25 muertes, de las que nunca se arrepinti¨®, por las que pen¨® cerca de 18 de los casi 3.000 a?os a los que fue condenado. Sin embargo, hay que aceptar que se beneficiara de la redenci¨®n de pena contemplada por el anterior C¨®digo Penal.

Resultar¨ªa ingenuo negar que su regreso a prisi¨®n no est¨¦ ligado directamente a la ruptura de la tregua anunciada el martes por ETA. Absurdo es pensar lo contrario y por tanto resultan poco cre¨ªbles algunas afirmaciones o¨ªdas ayer de altos funcionarios del Ministerio de Justicia. Encajan m¨¢s con la realidad las palabras del presidente Zapatero: "Dentro de la ley y con el margen que la ley da, se toman las decisiones que se consideran m¨¢s oportunas en cada momento".

La pol¨ªtica penitenciaria no s¨®lo no es ajena a la pol¨ªtica en general, y a la pol¨ªtica antiterrorista en particular, sino que es parte de ella, siempre que se desarrolle en el marco de la ley. Si la decisi¨®n de trasladar a De Juana al hospital, para persuadirle de poner fin a la huelga de hambre y con ello intentar que remitiera el peligro de atentados, alguna relaci¨®n ten¨ªa con las especiales circunstancias pol¨ªticas del momento, tambi¨¦n ahora resulta l¨®gico que el recluso cumpla la pena entre rejas y no en su casa si han cambiado tales circunstancias, una vez ya oficializada la ruptura del alto el fuego. De igual modo, parece coherente que el juez Garz¨®n haya denegado la salida al extranjero de Otegi en v¨ªsperas de que el Supremo se pronuncie sobre una condena de 15 meses del l¨ªder batasuno por enaltecimiento del terrorismo.