El sue?o de Paco Rabanne
Alumnos de Arquitectura de San Sebasti¨¢n muestran al modisto sus ideas para un centro dedicado a su obra en Pasaia
"Los arquitectos primero ten¨¦is que so?ar, pensar en la locura total, y luego ya ser t¨¦cnicos, l¨®gicos y pragm¨¢ticos. Si s¨®lo sois t¨¦cnicos, os saldr¨¢n proyectos feos, sin poes¨ªa". El modisto Paco Rabanne (Pasaia, 1934), afincado en Par¨ªs desde hace d¨¦cadas, lanz¨® ayer esta recomendaci¨®n a un grupo de alumnos de la Escuela T¨¦cnica Superior de Arquitectura de la UPV, en San Sebasti¨¢n. El reconocido dise?ador, experimental y vanguardista, no hablaba por hablar. Aunque nunca ha ejercido como tal, estudio en su d¨ªa Arquitectura, una disciplina que ha se ha reflejado en muchas de sus creaciones, caracterizadas por "l¨ªneas muy sencillas".
El caso es que so?ar, aunque pegados a la realidad, es lo que han hecho precisamente los alumnos de sexto curso de la asignatura Proyectos V. All¨¢ por el mes de febrero, sus profesores les pusieron sobre la mesa un edificio levantado en los a?os 50 en el distrito pasaitarra de Trintxerpe, ocupado en estos momentos por oficinas. Acto seguido, les plantearon que dise?asen para ese inmueble un espacio expositivo y de formaci¨®n dedicado a la moda y bajo la figura del creador de Pasaia. La reivindicaci¨®n de este centro planea en el municipio desde hace tiempo como parte de la revitalizaci¨®n de la bah¨ªa, pero no termina de arrancar de forma definitiva.
El dise?ador dijo a los estudiantes que si son s¨®lo t¨¦cnicos har¨¢n proyectos "sin poes¨ªa"
Hasta aqu¨ª todo segu¨ªa la din¨¢mica habitual de una asignatura de Arquitectura que tiene como objetivo "hacer proyectos que est¨¦n bastante cercanos a la realidad", record¨® el profesor Eugenio Urdanbide, mientras Rabanne charlaba con sus alumnos. Sin embargo, la rutina cambi¨® cuando uno de los estudiantes envi¨® un correo electr¨®nico a la oficina del dise?ador pidi¨¦ndole informaci¨®n sobre su obra. La respuesta no pudo ser mejor. El modisto, cuyo verdadero nombre es Francisco Rabaneda Cuervo, no s¨®lo se hallaba dispuesto a facilitar a los alumnos cuantos datos requiriesen, sino que adem¨¢s se ofrec¨ªa a viajar hasta San Sebasti¨¢n para conocer personalmente el resultado de sus trabajos.
La cita qued¨® fijada para ayer, 6 de junio, por la ma?ana. Los estudiantes mostraron por encima a Rabanne los 90 proyectos que han ideado. Seis de los alumnos, cuyos dise?os han sido seleccionados por los profesores por ser "los m¨¢s singulares" y por la "capacidad de comunicaci¨®n" de sus autores, tuvieron la oportunidad de explicar con detalle sus creaciones a quien puso de moda la cota de malla en los a?os 60.
"Son trabajos muy interesantes, fant¨¢sticos, po¨¦ticos, muy innovadores", destac¨® el dise?ador en un castellano marcado por sus muchos a?os de residencia en Francia, donde se exili¨® de ni?o junto a su familia durante la guerra civil. Su madre, de la que aprendi¨® el oficio de modisto, era en aquella ¨¦poca costurera jefa en el taller que el dise?ador Crist¨®bal Balenciaga ten¨ªa abierto en la capital guipuzcoana.
Los proyectos de estos estudiantes son s¨®lo eso, ideas que no aspiran a convertirse en realidad. "Nosotros nos hemos escapado de todas las discusiones [pol¨ªticas] y problemas que tiene Pasaia para hacer un ejercicio, para so?ar un poco", apunt¨® Urdanbide. "La escuela es el ¨²ltimo sitio donde se sue?a, porque cuando uno sale de ella dif¨ªcilmente lo puede hacer, ya que la realidad para la mayor¨ªa es muy dura y muy pocos se pueden permitir hacer siempre lo que quieren", a?adi¨®.
El trabajo realizado por Silvia Rodr¨ªguez ha sido uno de los seis seleccionados. Esta estudiante ha tratado de emular la manera de trabajar de Rabanne a lo largo de su trayectoria profesional. "Creaba un lenguaje nuevo, pero no part¨ªa de cero, sino que utilizaba lo que ya conoc¨ªa, sus conocimientos de arquitectura, para crear ese lenguaje", explic¨®. As¨ª que la joven decidi¨® plantear la rehabilitaci¨®n del edificio conservando sus partes m¨¢s caracter¨ªsticas: la fachada blanca y la estructura que soporta esa fachada.
Sin embargo, esta fachada se rompe de forma puntual para dejar salir los espacios interiores, revestidos de policarbonato morado y rosa y "transmitir a los viandantes que dentro se est¨¢ contando una historia que merece la pena compartir". Las estancias huyen de las grandes dimensiones, pues Rodr¨ªguez ha imaginado que permitan "un alto grado de intimidad con la obra" que supuestamente expondr¨ªan. "Con sus obras, Paco Rabanne habla con nosotros, utiliza un nuevo lenguaje con el que intenta esbozarnos posibilidades de futuro", expuso la estudiante.
El modisto conf¨ªa en que ese denominado espacio Rabanne se pueda hacer realidad alg¨²n d¨ªa. "Me gustar¨ªa que un arquitecto vasco tuviera una idea para ese espacio", enfatiz¨®. Es m¨¢s, el dise?ador se mostr¨® convencido de que la bah¨ªa pasaitarra puede convertirse dentro de unos a?os en "un barrio maravilloso" de San Sebasti¨¢n. Y dentro de ella el distrito de Trintxerpe, que no tuvo dudas en calificar de "horrible", puede acoger perfectamente "un gran gesto arquitect¨®nico". "Lo moderno va bien con el pasado si hay armon¨ªa entre los dos", apostill¨®.
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