El inmigrante que muri¨® amordazado cuando era deportado presenta dos golpes

El inmigrante nigeriano Osamuyia Aikpitanhi, de 23 a?os, que muri¨® el s¨¢bado cuando era deportado desde Madrid a su pa¨ªs en un vuelo regular de Iberia, "hab¨ªa sido amordazado" y s¨®lo "presentaba dos contusiones leves". ?stas son las principales conclusiones del avance de la autopsia realizada ayer por los forenses del Instituto de Medicina Legal de Alicante, que tambi¨¦n indica que el fallecimiento se produjo por "parada cardiorrespiratoria". Dos hermanos del fallecido que residen en Espa?a insisten en que a Osamuyia "le pegaron y le mataron dentro del avi¨®n".

El Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana emiti¨® un comunicado en el que se?ala que, no obstante lo recogido en el avance de la autopsia, la causa exacta de la muerte no podr¨¢ ser establecida hasta que se conozca el resultado de las pruebas urgentes sobre ¨®rganos vitales (concretamente coraz¨®n y pulm¨®n) solicitadas por los forenses al Instituto de Toxicolog¨ªa de Barcelona.

El tribunal tambi¨¦n se?al¨® que la juez de instrucci¨®n n¨²mero 1 de Elche (Alicante), encargada de investigar las circunstancias de la muerte, ha abierto diligencias previas y ya dispone del atestado elaborado por la Polic¨ªa Nacional. La magistrada ha anunciado que llamar¨¢ a declarar como testigos a otros dos inmigrantes rechazados que viajaban en el mismo vuelo que el fallecido y que despu¨¦s tomar¨¢ declaraci¨®n a los agentes que lo escoltaban.

El silencio del Ministerio del Interior, que ha rehusado facilitar informaci¨®n sobre el caso hasta que concluya una investigaci¨®n interna reservada ordenada por el ministro P¨¦rez Rubalcaba, aliment¨® versiones contradictorias sobre lo ocurrido.

La discrepancia principal se centra en la mordaza que los agentes colocaron a Osamuyia despu¨¦s de que ¨¦ste mordiera a uno de ellos. Seg¨²n unas fuentes policiales, consist¨ªa en una venda, que los funcionarios le habr¨ªan introducido en la boca, y una cinta adhesiva con la que le habr¨ªan sellado los labios. Otras fuentes aseguraban, en cambio, que Osamuyia fue amordazado con una cinta pl¨¢stica policial, no adhesiva. Si esta ¨²ltima versi¨®n fuese la aut¨¦ntica, quedar¨ªa descartado que el inmigrante falleci¨® asfixiado por una venda, como se pens¨® en un primer momento.

El Sindicato Unificado de Polic¨ªa (SUP) a?adi¨® en un comunicado que Osamuyia "posiblemente pretendi¨® suicidarse para evitar ser expulsado a su pa¨ªs, donde al parecer hab¨ªa sido condenado por asesinato".

El del s¨¢bado era el tercer intento de la polic¨ªa para cumplir la orden de deportaci¨®n que el pasado 2 de mayo dict¨® contra Osamuyia el juzgado de instrucci¨®n n¨²mero 1 de Fuenlabrada (Madrid). Ambos tuvieron que ser abortados debido a la violenta resistencia del inmigrante. En la ¨²ltima ocasi¨®n, el pasado jueves, el esc¨¢ndalo organizado por Osamuyia provoc¨® que el comandante del avi¨®n se negase a despegar hasta que lo sacaran del aparato.

El s¨¢bado, Osamuyia fue introducido por cuatro agentes en un avi¨®n regular de Iberia que se dirig¨ªa a Lagos (Nigeria). Dos de los polic¨ªas pertenec¨ªan a la comisar¨ªa del aeropuerto y los otros dos eran miembros de la Brigada Provincial de Extranjer¨ªa de Madrid. S¨®lo estos ¨²ltimos le acompa?aron durante el vuelo.

Al parecer, los agentes hab¨ªan solicitado un espacio apartado en el avi¨®n, separado del resto del pasaje por unas cortinas opacas. Seg¨²n una versi¨®n recogida por la agencia Europa Press, le colocaron lo que se conoce como "un ocho", una suerte de esposas de cuerda con un dispositivo de pl¨¢stico en el centro que permite ajustarlas a las mu?ecas. Pero Osamuyia continuaba resisti¨¦ndose, por lo que le inmovilizaron las mu?ecas y los tobillos con cinta pl¨¢stica. Osamuyia, seg¨²n esta versi¨®n, se liber¨® de sus ligaduras y mordi¨® a uno de los polic¨ªas. Fue entonces cuando decidieron amordazarle con una cinta pl¨¢stica.

Inmovilizado el inmigrante, el avi¨®n despeg¨®. Una hora m¨¢s tarde, los agentes se percataron de que Osamuyia respiraba con dificultad. Le colocaron una mascarilla de ox¨ªgeno y solicitaron un m¨¦dico entre los pasajeros, pero no hab¨ªa ninguno a bordo. Ante la situaci¨®n, el comandante decidi¨® aterrizar en Alicante. Una UVI m¨®vil esperaba en la pista, pero Osamuyia ya estaba muerto.