Ham¨¢s proclama la "liberaci¨®n" de Gaza
Al Fatah se atrinchera en Cisjordania y responde con la detenci¨®n de decenas de integristas
Con besos en el suelo y gritos de "?Al¨¢ es grande!", los miembros del brazo armado de Ham¨¢s irrump¨ªan en el principal feudo de Al Fatah en Gaza, la sede de la Seguridad Preventiva. "Es un d¨ªa hist¨®rico, comparable a la huida de los israel¨ªes de nuestras tierras en 2005", dec¨ªa uno de los encapuchados, m¨¢s abrumado por las c¨¢maras de televisi¨®n que por la resistencia de los agentes del presidente palestino, Mahmud Abbas, que ayer en Ramala (Cisjordania), orden¨®, por primera vez y en un intento desesperado, "aplastar el golpe de Estado en Gaza y perseguir a los milicianos".
Tras 24 horas de tiroteos, centenares de proyectiles, 25 muertos y 80 heridos, Ham¨¢s se apoder¨® de la sede de la Seguridad Preventiva, cuyo jefe era su enemigo ac¨¦rrimo, el jefe de Al Fatah en Gaza, Mohamed Dahlan. "Es la segunda liberaci¨®n de Gaza. La primera vez fue de los colonos y hoy echamos a los colaboracionistas", gritaba exultante el dirigente de Ham¨¢s Sami Abu Zhuri.
Abbas disuelve el Gobierno de unidad y decreta el estado de emergencia en la franja
Como toda contienda b¨¦lica que se precie, ¨¦sta tambi¨¦n tiene su s¨ªmbolo, la ocupaci¨®n de este cuartel, que desde 1994 es fuente de humillaci¨®n para los milicianos integristas, muchos de los cuales fueron interrogados y torturados por los agentes de Dahlan. "Aqu¨ª me encerraron y me cortaron la barba hace 13 a?os. Hoy ha llegado la venganza", dec¨ªa un veterano miembro de Ham¨¢s, antes de subir al tejado para rezar.
Rezar y anunciar, a trav¨¦s de la radio del grupo fundamentalista, "el inicio de la era isl¨¢mica en Gaza". Rezar y estudiar los miles de documentos secretos que ayer confiscaron de los servicios secretos palestinos. Seg¨²n una fuente de inteligencia occidental, "hay muchos papeles que describen acciones y t¨¢cticas de la CIA y los servicios secretos israel¨ªes".
El ataque contra el cuartel ofreci¨® tambi¨¦n una de las im¨¢genes que refleja con mayor exactitud lo que ocurre estos d¨ªas en Gaza: la humillante salida de decenas de efectivos de Al Fatah, con las manos en alto, muchos en calzoncillos y el torso descubierto, conducidos por encapuchados con fusiles y lanzagranadas al hombro. Yihad Abu Iyad, que estaba cerca de los combates, explic¨®: "He visto c¨®mo han matado a muchos polic¨ªas. A uno le han disparado en la cabeza". Ham¨¢s s¨®lo reconoci¨® ayer haber dado muerte a Samir Mudhan, dirigente del brazo armado de Al Fatah.
Mientras el brazo armado de Ham¨¢s iba arrancando de cuajo los ¨²ltimos resortes de poder de Al Fatah, como la ciudad de Rafah, Abbas se reun¨ªa en Ramala con la plana mayor de su movimiento para ordenar a sus hombres que respondan con dureza. Sus consignas se cumplieron s¨®lo en Cisjordania, donde sus fuerzas leales arrestaron a decenas de militantes de Ham¨¢s. Los detenidos suponen un elemento poderoso para una eventual negociaci¨®n.
"No permitir¨¦ el golpe de Estado de Ham¨¢s", dijo Abbas a sus compa?eros de partido, entre ellos Dahlan, que tras ser operado en Egipto ha vuelto a la escena palestina, quiz¨¢ demasiado tarde para ¨¦l y su grupo en Gaza. A ¨²ltima hora de la tarde, Abbas disolvi¨® el Gobierno de unidad, decret¨® el estado de emergencia en Gaza y pidi¨® el despliegue de una fuerza multinacional. Ham¨¢s calific¨® de "decisi¨®n peligrosa" la disoluci¨®n del Gobierno y advirti¨® que considerar¨¢ como "ocupante" cualquier fuerza de interposici¨®n.
En Ramala son conscientes del fin del Gobierno de unidad y de la desconexi¨®n entre Cisjordania de Gaza. La llamada "visi¨®n para Oriente Pr¨®ximo" del presidente de EE UU, George W. Bush, basada en "dos Estados para dos pueblos" (Israel y Palestina) quiz¨¢ se cumpla pero s¨®lo para los palestinos: un Estado en Cisjordania y el otro en la franja de Gaza.
El control de una Gaza en llamas por parte de Ham¨¢s -en Israel ya se le conoce como Hamast¨¢n- es la primera asignatura con la que deber¨¢ lidiar el nuevo ministro israel¨ª de Defensa, el laborista Ehud Barak. "Hemos de evitar que en este territorio vecino Ham¨¢s construya un poder militar y pol¨ªtico similar al que ten¨ªa el grupo chi¨ª Hezbol¨¢ en el sur de L¨ªbano", es la consigna escuchada en el despacho del primer ministro, Ehud Olmert.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.