"Cuando escribo sobre mundos fant¨¢sticos trato de que parezcan reales y de que sus personajes existan"
Tonke Dragt (Yakarta, 1930) naci¨® en Indonesia en plena era colonial holandesa y pas¨® varios a?os encerrada con su madre y hermanas en un campo de concentraci¨®n japon¨¦s durante la II Guerra Mundial. All¨ª, apenas entrada en la adolescencia, casi sin papel ni l¨¢piz, empez¨® a escribir cuentos con una amiga. Los personajes que inventaban hu¨ªan y se liberaban y eran heroicos en una suerte de terapia literaria instintiva dadas las precarias condiciones vitales de ambas. A la escritora la afici¨®n ya no le abandonar¨ªa, pero antes regres¨® a Holanda donde estudi¨® Bellas Artes y se hizo profesora de Dibujo. Todav¨ªa hoy, cuando firma sus libros, a?ade una ilustraci¨®n a la dedicatoria como si la escritura derivara de forma natural en una imagen. O tal vez sea al rev¨¦s. En un giro del destino que parece hecho a la medida de su novela El enigma del S¨¦ptimo Paso, al principio de su carrera docente les contaba historias a los alumnos para mantener el orden. Lo mismo que Francisco del Guindo, el profesor de la obra, que relata aventuras imaginarias hasta verse involucrado en una de ellas. Conversadora veloz, amante del cine y de las casas de mu?ecas y experta en describir mundos fant¨¢sticos con realismo y sin t¨®picos, admite que la fama es agradable aunque le roba tiempo para escribir
"Gracias a Rowling la fantas¨ªa ya no es una cosa extra?a en la narrativa juvenil"
PREGUNTA. ?Acab¨® alguna de las historias que contaba en la clase de dibujo convertida en libro o aquello fue la manera de darse cuenta de que ten¨ªa cualidades para la escritura?
RESPUESTA. Cuando los ni?os tienen objetos en las manos, como ocurre con los l¨¢pices y pinceles, resulta m¨¢s dif¨ªcil conseguir que est¨¦n quietos. Yo les dec¨ªa que les contar¨ªa historias si se callaban y as¨ª empez¨® Carta al rey; como un relato oral en el aula. Mis alumnos estudiaban en aquellos momentos la Edad Media y fantase¨¦ con los caballeros y su mundo de honor y lealtad. Lo que no sab¨ªa es qu¨¦ dec¨ªa la famosa carta. Eso vino luego. Hab¨ªa escrito antes otro libro y publicado cuentos en una revista llamada Kris Kras. Sin embargo, al ser elegido Carta al rey el mejor libro infantil y juvenil del a?o 1963, me convert¨ª de golpe en autora.
P. ?Es verdad que encontr¨® un castillo real similar al que invent¨® en El enigma del S¨¦ptimo Paso despu¨¦s de haber publicado la novela?
R. Siempre me informo a fondo acerca de los temas que trato. Sobre la Edad Media le¨ª toda clase de escritos. Tambi¨¦n le¨ª mucho sobre telepat¨ªa y sobre Einstein cuando trataba del tiempo en otras novelas. Pero lo del castillo es una de esas casualidades incre¨ªbles. Estaba de vacaciones por la regi¨®n donde ubico el S¨¦ptimo Paso, y all¨ª, en medio del bosque por donde paseaba, hab¨ªa un castillo como el m¨ªo. Aunque en aquel momento no se pod¨ªa visitar, a?os despu¨¦s lo compr¨® el ayuntamiento local y entonces se pudo alquilar para una serie de televisi¨®n filmada en 1982. Lo pas¨¦ estupendamente con aquella experiencia. Prepar¨¦ los di¨¢logos y a?ad¨ª otros nuevos para la adaptaci¨®n. En cambio, con la pel¨ªcula que se quiere filmar sobre Carta al rey no es lo mismo. Ya he le¨ªdo dos guiones y no reconozco mi libro. Los han llenado de cosas sensacionalistas, torturas y dem¨¢s. Y ¨¦sa no es mi historia. No me quedar¨¦ tranquila hasta que me guste. Supongo que autoras tan famosas como J. K. Rowling pueden pedir los guiones que quieran para las pel¨ªculas de Harry Potter. Yo creo que el rigor debe ser el mismo con cualquier autor.
P. ?Ha influido el fen¨®meno del ni?o mago en su trabajo o en el resto de la literatura juvenil?
R. Bueno, su fama tiene dos vertientes. Los guionistas de Carta al rey me dec¨ªan que la f¨®rmula ganadora era un tr¨ªo protagonista como Harry y sus dos amigos. ?se no es mi libro, les contestaba yo, y tampoco hace falta repetirse. Por otro lado, si bien es verdad que Rowling tuvo la suerte de acertar con su historia, gracias a ella la fantas¨ªa ya no es una cosa extra?a en la narrativa infantil o juvenil. Se pueden escribir libros largos para menores porque ella lo hace sin problemas y sus historias son bien agradables de leer. El tercer libro me gust¨® y las pel¨ªculas son excelentes.
P. Las traducciones han sido esenciales para popularizar su obra. Qu¨¦ sensaci¨®n le produce que hayan sido vertidas tambi¨¦n al japon¨¦s, dada su historia personal durante la II Guerra Mundial.
R. Lo de Jap¨®n es toda una experiencia. Como estuve prisionera en un campo de concentraci¨®n nip¨®n, que me publiquen es un signo de liberaci¨®n para m¨ª. En mi fuero interno es como si se cerrara un c¨ªrculo simb¨®lico por lo ocurrido. Desde luego, los ni?os japoneses no tienen nada que ver con el pasado y me encanta que puedan leerme. Adem¨¢s, los que hemos vivido en Asia nunca olvidaremos esa parte del mundo. Los colores, los olores. Los espacios libres y la naturaleza.
P. Despu¨¦s de haberlos mezclado durante toda su obra, ?ha decidido por fin si prefiere el dibujo a la literatura?
R. Pintar forma parte de mi vida. Ahora ya no dibujo tanto porque me dedico a ilustrar con collages. Me gustan y recojo fotos y las mezclo. A veces, estoy componiendo uno y de ah¨ª surge un pasaje de la historia. Un sue?o que ser¨¢ una pesadilla por como he montado las im¨¢genes. Luego hay cosas que es mejor mostrar, en lugar de describirlas. Para m¨ª son lo mismo.
El enigma del S¨¦ptimo Paso. Tonke Dragt. Traducci¨®n de Mar¨ªa Lerma. Ilustraciones de la autora. Siruela. Madrid, 2007. 315 p¨¢ginas. 18,90 euros.
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