Gaditano y tinto

Lenta pero inexorablemente, las tierras del C¨¢diz serrano se ti?en de rojo. No es la primera vez que aqu¨ª, donde la luz se ba?a en lluvia (Grazalema es el lugar donde m¨¢s llueve de Espa?a), se elabora tinto. Pero s¨®lo recientemente, tras a?os de estudios y experimentaci¨®n, han comenzado a aparecer vinos con suficiente calidad, dotados de la gracia que el entorno privilegiado de Arcos de la Frontera permite a la buena viticultura.

Resalta la extraordinaria labor realizada por el en¨®logo Jos¨¦ Manuel Pinedo Contreras, responsable del proyecto Vi?a La Moncloa, de Gonz¨¢lez Byass. Si bueno era su 2004, ¨¦ste lo supera en equilibrio y sutileza, dos cualidades dif¨ªciles de obtener con la hiperb¨®rea cabernet sauvignon, que es el varietal que sustenta el vino. En el sur se agranda el peligro de que exprese un car¨¢cter tosco, al que hay que a?adir el riesgo de la pastosidad, tan com¨²n hoy d¨ªa. Nada de esto ocurre. Pese a ser un tinto concentrado, tiene suficiente esbeltez y nervio. Los aromas frutales, bien ligados con la madera, se enriquecen con notas bals¨¢micas y repuntes minerales. Y la boca, sin duda suculenta, se ve ennoblecida por la elegante redondez de su cuerpo.