?ltimo choque parlamentario
El debate sobre el estado de la naci¨®n abre la campa?a electoral
E l tradicional debate sobre el estado de la naci¨®n, que se celebra a primeros de julio, supondr¨¢ en esta ocasi¨®n el primer gran acto de la campa?a de las pr¨®ximas elecciones generales. Desde ese momento, y hasta marzo del a?o pr¨®ximo, no habr¨¢ respiro. Tanto el presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, como el jefe de la oposici¨®n, Mariano Rajoy, saben que el pr¨®ximo d¨ªa 3 pronunciar¨¢n sus ¨²ltimos grandes discursos de la legislatura (salvo acontecimientos imprevistos, que nadie desea).
Los dos se juegan mucho en esta ¨²ltima refriega parlamentaria: Zapatero parte con la ventaja de una valoraci¨®n p¨²blica muy alta, que debe conservar sea como sea. Los debates del estado de la naci¨®n le han permitido hasta ahora reforzar su imagen y arreglar fallos de recorrido, y en este momento no puede permitirse una equivocaci¨®n en lo que constituye una de sus mejores armas cara a 2008.
La intervenci¨®n en el comit¨¦ federal de Carmele Hermos¨ªn en contra de un acuerdo con Nafarroa Bai tuvo que contar con el visto bueno de Manuel Chaves
Rajoy, por su parte, necesita imperiosamente utilizar la tribuna parlamentaria para mejorar sus ¨ªndices de aceptaci¨®n (y sobre todo para disminuir sus ¨ªndices de rechazo). Su fama de buen parlamentario no ha conseguido hasta ahora los r¨¦ditos esperados, quiz¨¢ por la extremada dureza de sus discursos anteriores. El l¨ªder de la oposici¨®n necesita emplear esta tribuna para exhibir su nuevo tono, si es que, finalmente, encuentra la manera de dosificar y combinar la dureza de sus cr¨ªticas al presidente del Gobierno, que ser¨¢ la constante de su campa?a, con una imagen personal menos agresiva. ?sta parece su ¨²ltima oportunidad para ganarle el debate al presidente del Gobierno.
El debate coincidir¨¢ pr¨¢cticamente con la resoluci¨®n del caso navarro, prevista para finales de mes. Este lunes expira el ultim¨¢tum que ha dado Nafarroa Bai a los socialistas para que se decidan a formar gobierno con su apoyo, y el mi¨¦rcoles d¨ªa 25, la presidenta de la C¨¢mara foral tiene que empezar los contactos formales. Una parte de la direcci¨®n del PSOE es claramente contraria a ese acuerdo (a nadie se le puede escapar que la intervenci¨®n cr¨ªtica de la andaluza Carmele Hermos¨ªn en el ¨²ltimo comit¨¦ federal tuvo que contar con el visto bueno del propio Manuel Chaves) y presiona para evitarla, pero otro sector est¨¢ decidido a seguir adelante, convencidos de que, una vez tomada la decisi¨®n, los cr¨ªticos actuar¨¢n disciplinadamente arrimando el hombro.
En el entorno de La Moncloa se espera que Zapatero utilice el debate para hacer un balance de los logros de la legislatura, pero, sobre todo, para endurecer sus cr¨ªticas respecto a la actuaci¨®n del jefe de la oposici¨®n en todo lo relacionado con los contactos frustrados con ETA. El presidente ha expresado en varias ocasiones su indignaci¨®n por la manera en la que considera que ha actuado el PP, y es muy probable que en la tribuna parlamentaria d¨¦ todav¨ªa m¨¢s solemnidad a esas quejas. Una vez m¨¢s, el tono ser¨¢ muy importante porque no puede arriesgarse a aparecer como una v¨ªctima, sino que est¨¢ obligado a mantener, al mismo tiempo, la imagen fuerte de un presidente en ejercicio.
Veranos poco propicios
"Nos conviene que todo salga bien porque luego viene el verano, y ya se sabe que, desde hace a?os y a?os, los veranos no son nunca propicios para los Gobiernos", bromea un analista pr¨®ximo a Rodr¨ªguez Zapatero.
El Gobierno le tiene verdadera prevenci¨®n a una llegada masiva de cayucos, a los incendios (aunque en esta ocasi¨®n ya podr¨¢ disponer, sin depender de las comunidades aut¨®nomas, de la nueva unidad del ej¨¦rcito especializada en protecci¨®n civil) y a la invasi¨®n de medusas en las playas.
Y por supuesto, a una eventual campa?a de ETA repitiendo la t¨¢ctica de colocar artefactos en zonas de veraneo, que en m¨¢s de una ocasi¨®n han terminado por provocar v¨ªctimas mortales. La localizaci¨®n, el pasado jueves, de un coche cargado de materiales explosivos parece justificar plenamente esos temores. El miedo se centra tambi¨¦n en la posibilidad de que las acciones de ETA vayan siendo progresivamente m¨¢s letales.
En cualquier caso, parece que el verano ser¨¢ tambi¨¦n el momento de abrir la puerta a algunos ministros para que vayan retomando un cierto protagonismo pol¨ªtico. El m¨¢s visible deber¨ªa ser el titular de Trabajo, Jes¨²s Caldera, que ha sido encargado de poner a punto el nuevo programa electoral y de dirigir la campa?a de 2008. Caldera, que fue portavoz parlamentario cuando el PSOE estaba en la oposici¨®n, tiene experiencia pol¨ªtica para cargar con una cierta dosis de debate, aunque es sabido que el presidente del Gobierno cree que el sistema pol¨ªtico espa?ol es especialmente presidencialista, en el sentido de que coloca toda la representatividad y toda la responsabilidad en sus exclusivos hombros. Los intentos de empujar a Caldera proceden m¨¢s bien de los sectores del Gobierno que desear¨ªan m¨¢s presencia del gabinete y menos del partido.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.