J¨®venes
Los j¨®venes que se han examinado este a?o de selectividad nacieron con el Internet, con el m¨®vil, el MP3, el CD, el GPS, el chat y la play-station. A trav¨¦s de la yema de los dedos sobre los distintos teclados su sistema nervioso se prolonga en el universo. En el mundo ya no hab¨ªa muro de Berl¨ªn ni comunismo ni guerra fr¨ªa cuando tomaban la primera papilla, pero al pasar del triciclo a la bicicleta se encontraron con la globalizaci¨®n, con el terrorismo planetario y con los patines de dos ruedas. No saben qu¨¦ es la mili. Muchos aprendieron ingl¨¦s en Inglaterra y realizaron intercambios con chicas y chicos de otros pa¨ªses. Los m¨¢s concienciados aman la naturaleza, son sensibles al ahorro de energ¨ªa, se molestan en buscar una papelera antes de tirar un envase en el suelo, rechazan la comida basura e incluso cierran bien el grifo del fregadero. Los m¨¢s descerebrados se excitan cada s¨¢bado en el alba?al del botell¨®n. Sus padres en la manifestaci¨®n de izquierdas corearon el pareado: el pueblo unido jam¨¢s ser¨¢ vencido. Ellos s¨®lo cantan el oe, oe, oeee al final del partido, cualquiera que sea su ideolog¨ªa. Ese c¨¢ntico es el himno del siglo XXI, acompa?ado con la imagen de las Torres Gemelas ardiendo. Esta nueva promoci¨®n de universitarios conoci¨® el amor ya en tiempos del sida y aunque en el colegio les explicaron c¨®mo se usa el preservativo, a la mayor¨ªa no les da tiempo de pon¨¦rselo. Su horizonte es el genoma humano, que comparten con la marca Nike, y si sus padres se estremecieron con Maradona, Cruyff y Butrague?o, ellos adoran a Nadal, Fernando Alonso y Pau Gasol. No les interesa la pol¨ªtica, les suena vagamente el nombre de un tal Felipe Gonz¨¢lez, no leen peri¨®dicos, tienen una idea muy fragmentaria de la cultura, pero cuando un tema les apasiona, deporte, cine, inform¨¢tica o m¨²sica, lo conocen hasta el fondo, abastecidos por una informaci¨®n exhaustiva. Existen algunos s¨ªntomas que indican que ya tienes muy poco que ver con los nuevos j¨®venes. Si sabes qui¨¦n era Angela Channing, si has llegado a ver la tele en blanco y negro, si est¨¢s todav¨ªa con la marihuana o la coca¨ªna y no con las drogas de dise?o, si conociste a John Travolta sin tripa, si a¨²n piensas en pesetas al hacer las cuentas, si tu sobrino sabe m¨¢s que t¨² de ordenadores, si te cabreas porque tu hija deja el bote de champ¨² abierto, si cuelgas la toalla en su sitio despu¨¦s de ducharte, si te acuerdas de Michael Jackson de cuando era negro, cualquiera de estas se?ales indican que comienzas a hacerte viejo.
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