Sanidad ultima un plan para reforzar el control de los alimentos

Cientos de alimentos introducidos de forma ilegal se venden en algunas tiendas espa?olas sin haber pasado las inspecciones sanitarias. Para controlarlos, Gobierno y comunidades aut¨®nomas preparan un plan nacional basado en las directrices de la UE para los 27 pa¨ªses. El plan tratar¨¢ de coordinar las inspecciones de todo lo que llega a las tiendas y a los restaurantes. Ten¨ªa que haberse aprobado en enero de 2007, pero por ahora s¨®lo Reino Unido ha hecho los deberes. En el caso de Espa?a, la demora se debe a un desacuerdo sobre qui¨¦n inspecciona a los inspectores.

La falta de control sobre muchos de los productos que llegan a las tiendas ha sido destapada con la detecci¨®n de miles de dent¨ªfricos con etiquetados irregulares o incluso con sustancias t¨®xicas. Las pastas de dientes introducidas de forma ilegal en Espa?a y en otros pa¨ªses de Europa han servido para detectar que el problema se extiende adem¨¢s a los productos alimenticios.

Consciente de esos problemas, la Uni¨®n Europea lanz¨® hace dos a?os unas directrices por las que todos los pa¨ªses miembros deb¨ªan crear planes espec¨ªficos para inspeccionar todo aquellos que llega a la mesa del consumidor. En Espa?a, la adaptaci¨®n de esa gu¨ªa se llama Plan Nacional de Control de la Cadena Alimentaria y a¨²n est¨¢ debati¨¦ndose en la Comisi¨®n Institucional de Seguridad Alimentaria y Nutrici¨®n que re¨²ne al Ministerio de Sanidad y a las comunidades aut¨®nomas.

El objetivo del plan es coordinar las inspecciones de todos aquellos productos que llegan a la mesa y controlar la calidad de los productos. Tambi¨¦n se pretende fijar un criterio com¨²n para las inspecciones de aquello que alimenta a las plantas y a los animales, caso de piensos y abonos.

Las directrices europeas deb¨ªan haber sido adaptadas por los 27 pa¨ªses de la UE antes del 1 de enero de 2007. S¨®lo Reino Unido ha fijado ya su plan. En Espa?a hay una pregunta que est¨¢ causando demoras: ?qui¨¦n vigila al que vigila?

Las competencias sanitarias est¨¢n en manos de las comunidades aut¨®nomas y por tanto son sus inspectores los encargados de controlar las granjas, las tiendas y los locales donde se sirve comida. El Estado no se puede meter ah¨ª, pero la legislaci¨®n europea exige que haya inspecciones sobre los inspectores. Llegar a un acuerdo sobre qui¨¦n se encarga de esa tarea es uno de los temas que ahora est¨¢n sobre la mesa.

El Gobierno, a trav¨¦s de la Agencia de Seguridad Alimentaria, y las comunidades se re¨²nen hoy para debatir este asunto. La Agencia busca un sistema de coordinaci¨®n que mantenga a las comunidades en esas segundas inspecciones sin que se pierda la independencia de los controles. La idea es que la vigilancia de los que vigilan est¨¦ a cargo de un representante del Gobierno (Agencia de Seguridad Alimentaria), otro de la propia comunidad y otro de una comunidad diferente.

Ritmo lento

Eduard Mata, director de la Agencia de Seguridad Alimentaria de la Generalitat de Catalu?a, admite que el plan va un poco retrasado en Espa?a. "Tenemos la arquitectura y las perchas preparadas y un principio de acuerdo sobre los conceptos, ahora lo que hay que hacer es rellenar los agujeros", precisa. Pero seg¨²n Mata, el retraso en la aplicaci¨®n del plan de control no es debido a las comunidades aut¨®nomas sino a que las cosas van lentas.

El Ministerio de Sanidad considera que el proyecto podr¨ªa estar terminado el pr¨®ximo septiembre. Servir¨¢ s¨®lo para controlar los alimentos en las tiendas y granjas. Las inspecciones en las fronteras corren a cargo exclusivamente del Gobierno. La clave para detectar los alimentos que han burlado los controles est¨¢ en el etiquetado. Los que no llevan indicaciones en castellano suelen entrar irregularmente en Espa?a. Un simple rastreo de EL PA?S por algunos locales de Madrid sirvi¨® para encontrar decenas de alimentos que no cumpl¨ªan ese requisito. La mayor¨ªa proced¨ªan, seg¨²n su etiqueta, de Tailandia, Sur¨¢frica, Filipinas, L¨ªbano o China.