El list¨®n de las veinticinco sedes

Fue equipada con una noticia, que va a poner en marcha la Radiotelevisi¨®n Cervantes que negoci¨® con su antecesor cuando ella dirig¨ªa RTVE, aguant¨® como una funcionaria la retahila burocr¨¢tica que precede a la promesa del cargo -"Vengo en nombrar" suena raro en el Cervantes, y ante el director de la Academia- y bes¨® a C¨¦sar Antonio Molina. El ex director del Cervantes, ahora ministro de Cultura, le pas¨® el testigo a Carmen Caffarel al frente del Instituto Cervantes, pero quien le situ¨® el list¨®n fue Miguel ?ngel Moratinos, ministro de Exteriores, que es su jefe supremo.

Todo pas¨® en media hora, ayer en la sede madrile?a del Cervantes. Hab¨ªa escritores, ex directores del Cervantes, funcionarios y aspirantes a dirigir centros de esta instituci¨®n. A

lgunos de ellos aguzaron el o¨ªdo cuando el titular de Exteriores cont¨® lo que le ocurre que cada vez que va por ah¨ª, "por N¨ªger o por el Congo": "Siempre hay alguien que nos pide que abramos un Cervantes".

Caffarel tiene que abrir "m¨¢s de veinticinco sedes", que fueron las que inaugur¨® C¨¦sar Antonio Molina en su ¨¦gida. "?Le tienes que ganar a C¨¦sar, Carmen!", le inst¨®, en la atm¨®sfera nutrid¨ªsima de figuras de la burocracia de las letras que acudieron a abrazar a la nueva responsable de los destinos "de la mayor empresa de cultura y comunicaci¨®n del Estado espa?ol", como dijo la propia Caffarel. Molina hab¨ªa subrayado el list¨®n: hizo mucho, pero no lo hizo todo; entre los retos que ella misma se puso, difundir y ense?ar todas las lenguas del Estado. Ella naci¨® hablando catal¨¢n.

La nueva directora del Cervantes llega a ese puesto con el aval de la Filolog¨ªa, y con el m¨¦rito de una gesti¨®n dif¨ªcil -dijo Moratinos- al frente de su destino anterior. Es curioso, s¨®lo ella nombr¨® a RTVE, de la que fue directora hasta hace unos meses. Lo hizo para recordar que negoci¨® con su antecesor lo que ahora ser¨¢ en sus manos la Radiotelevisi¨®n Cervantes, instrumento para difundir y ense?ar el espa?ol.

Hubo muchos gui?os en su discurso. A Am¨¦rica Latina, a las lenguas del Estado, al presidente del Gobierno, a los profesores extranjeros que apoyan en todo el mundo la ense?anza del espa?ol... Adem¨¢s de los dos ministros citados, le salud¨® la ministra de Educaci¨®n, Mercedes Cabrera. Le estaba viendo su otro antecesor, Luis Fern¨¢ndez, el presidente actual del consorcio RTVE. Cuando Caffarel termin¨® de hablar, Fern¨¢ndez nos dijo: "Este es el mejor empleo que hay en Espa?a". El suyo no est¨¢ tampoco mal, le dijimos. "S¨ª, pero en el que ahora asume Carmen todo es bueno, no hay nada malo, y en el m¨ªo hay absolutamente de todo, bueno y malo".

A Caffarel le gusta mucho ser la primera mujer que dirige el Cervantes. "Es un orgullo", dijo y se congratul¨®, adem¨¢s, de llegar a un puesto como este cuando "ya hay tanto hecho para que la lengua de Cervantes crezca en el mundo". Ahora se impone la tarea de "ganarle a C¨¦sar", como le pidi¨® Moratinos, "ali¨¢ndose" con ¨¦l. Le prometieron de todo; el ministro de Exteriores le prometi¨® m¨¢s presupuesto, y desde su sitio el ministro de Cultura le gui?¨® un ojo, como dici¨¦ndole que no se fiara. Luego brindaron, con cerveza y tinto.