La fiscal acusa a Intervida de desviar fondos por casi 200 millones de euros

Una estafa millonaria. Eso es lo que considera la fiscal¨ªa que ha venido cometiendo durante a?os la ONG Intervida y su entramado de empresas y asociaciones, que desde 1999 hasta la actualidad han desviado al cambio actual un total de 193,7 millones de euros procedentes de las aportaciones realizadas para el apadrinamiento internacional de ni?os a bancos y sociedades en Am¨¦rica Latina. El destino lucrativo de esas cantidades se detalla en la querella presentad por la fiscal¨ªa contra los responsables de esas sociedades y a la que ha tenido acceso EL PA?S.

"La ¨²nica actividad real que ha realizado y realiza la Fundaci¨®n Privada Intervida es la de captar dinero de los padrinos y transferir los dineros captados a esas asociaciones creadas en los pa¨ªses del Tercer Mundo", se asegura en la querella de la fiscal Carmen Mart¨ªn Arag¨®n. Seg¨²n su relato, no se conoce el alcance exacto de la estafa, pero s¨ª se tiene la certeza de que se utiliz¨® para invertir en negocios inmobiliarios y en banca.

Nada de eso se dijo a los m¨¢s de 300.000 padrinos que realizaron sus aportaciones pensando que ayudaban a mejorar la vida de los ni?os de aquellos pa¨ªses latinoamericanos. "Actuaron guiados por el deseo de obtener ping¨¹es beneficios, compitiendo en estos sectores con empresas privadas con ¨¢nimo de lucro y m¨¢ximo beneficio con el menor coste y riesgo", afirma la querella de la fiscal.

As¨ª, entre 1999 y 2003, se relata que se enviaron transferencias a "pa¨ªses del Sur" por importe de 84,78 millones de euros. Tambi¨¦n entre 2001 y 2003 se retiraron de una cuenta del BBVA Banco Central de Per¨² otros 11,58 millones de d¨®lares (8,38 millones de euros). La fiscal¨ªa afirma que quien orden¨® la operaci¨®n fue Eduardo Castell¨®n, presidente de Intervida hasta 2002 y uno de los seis querellados a los que investiga el Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 33 de Barcelona por estafa, apropiaci¨®n indebida, asociaci¨®n il¨ªcita y delito societario.

Quienes retiraron esa ¨²ltima cantidad fueron Francesc Violan Gonz¨¢lez y Braulio Alberto G¨®mez Taracena, residentes en Per¨² y Guatemala y tambi¨¦n querellados. Por aquellos a?os, una de las sociedades instrumentales utilizadas en la trama, Edpyme Raiz SA, recibi¨® otros 26,32 millones de d¨®lares de Intervida. Lo mismo ocurri¨® con la Asociaci¨®n Ra¨ªz Guatemala, que recibi¨® otros 22,44 millones de euros y 2,70 millones de d¨®lares. El dinero se destin¨®, explica la fiscal, a conceder cr¨¦ditos hipotecarios con el mismo inter¨¦s que aplicaba la banca.

Entre 2005 y 2006, la entidad Occidente Internacional Corporations en San Juan de Puerto Rico tambi¨¦n tuvo un dep¨®sito 5,13 millones de d¨®lares con la ¨²nica firma autorizada de Eduardo Castell¨®n. Tambi¨¦n entre 2004 y el pasado abril varias de las fundaciones relacionadas con Intervida tuvieron dep¨®sitos a plazo por importe de 13,02 millones de d¨®lares en las Indias occidentales, un conjunto de islas caribe?as pertenecientes a Montserrat, un para¨ªso fiscal seg¨²n la legislaci¨®n espa?ola. La ¨²nica persona con firma autorizada para disponer de esos fondos tambi¨¦n era Castell¨®n.

La querella, que ocupa 113 p¨¢ginas, relata igualmente que en otras entidades bancarias de Guatemala existieron entre 2005 y 2006 tres dep¨®sitos bancarios por un importe total de de 16,94 millones de d¨®lares a nombre de la Asociaci¨®n para la Ayuda al Tercer Mundo Intervida Guatemala. En Per¨² tambi¨¦n se abrieron dos dep¨®sitos en 2004 que tuvieron hasta 15 y 28,64 millones de d¨®lares.

Recuerda la fiscal que en "toda esta superestructura impera un modelo empresarial" en el que el ¨²nico objetivo es lucrarse, sin ninguna contraprestaci¨®n ben¨¦fica. Es un hecho, a?ade, que se ha venido produciendo desde la creaci¨®n de Intervida, en 1994. De las personas que figuran en los cargos de direcci¨®n de las sociedades se asegura que son "simples testaferros que se limitan a cumplir las ¨®rdenes dadas por los querellados".