Las ¨²ltimas minas en los Balcanes
Causaron miles de muertes durante el conflicto en los Balcanes, entre 1991 y 2000, y siguieron amenazando a la poblaci¨®n tras el fin de la guerra. A partir de este verano, sin embargo, Serbia y Montenegro pueden -seg¨²n la OTAN- olvidar la pesadilla de las minas antipersona. El proyecto internacional Partnership for Peace (Unidos por la Paz) ha llevado a cabo, gracias a la financiaci¨®n, entre otros pa¨ªses, de Espa?a, Canad¨¢, Austria, Irlanda, Noruega y Suecia, la destrucci¨®n de las ¨²ltimas reservas de esas armas en la regi¨®n de los Balcanes.
Serbia y Montenegro, los ¨²ltimos pa¨ªses en beneficiarse de estas ayudas, declararon ilegales las minas terrestres despu¨¦s de la ca¨ªda del presidente Slobodan Milosevic, en 2000. Tres a?os m¨¢s tarde, y despu¨¦s de la independencia de Kosovo, firmaron el llamado Tratado de Ottawa, que soporta la prohibici¨®n y eliminaci¨®n de esos artefactos. Entonces, en Serbia quedaban todav¨ªa m¨¢s de un mill¨®n de minas, mientras que en Montenegro, m¨¢s de 40.000, seg¨²n c¨¢lculos de la OTAN.
Las reservas de minas antipersona en los Balcanes se convirtieron tambi¨¦n, a finales de los noventa, en un fuerte atractivo para las mafias de medio mundo. El Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n de Kosovo (ELK), por ejemplo, se vio envuelto en un caso de venta de armas a traficantes brit¨¢nicos. Seg¨²n una investigaci¨®n del diario The Independent, por 40 libras (unos 60 euros) se pod¨ªan comprar en Londres minas terrestres que hab¨ªan pertenecido al ELK, que adem¨¢s pon¨ªa a disposici¨®n de los traficantes 140 toneladas de explosivo sacadas ilegalmente de Pristina a pesar del acuerdo de entrega de armamento alcanzado por la milicia albanokosovar con la OTAN.
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