Fugitivos

Jaime Jim¨¦nez Arbe, El Solitario, fue detenido a mediados de julio cuando iba a perpetrar un nuevo atraco en una sucursal bancaria de Figueira da Foz (Portugal). Durante m¨¢s de 13 a?os fue uno de los delincuentes m¨¢s buscados por la polic¨ªa y la Guardia Civil. Y era el m¨¢s conocido, al estar considerado como el enemigo p¨²blico n¨²mero 1 desde que hace tres a?os asesin¨® sin piedad a dos guardias civiles de Tr¨¢fico en Castej¨®n (Navarra). La caza y captura de El Solitario era un objetivo prioritario. Pero hay otros muchos m¨¢s perseguidos: unos 400.000 hombres y mujeres a los que Interior intenta localizar y detener en unos casos por asesinato y en otros por una simple citaci¨®n judicial a la que han hecho caso omiso.

Dejando al margen a los terroristas de ETA, las estrellas de esta lista de fugitivos son personajes como Rafael Bueno Latorre, Antonio Angl¨¦s Mart¨ªns, Roberto Marcos S¨¢nchez, Carlos Ruiz Santamar¨ªa, El Negro, y Javier Anastasio de Espona, supuestamente implicado en el asesinato de los marqueses de Urquijo en 1980. Y adem¨¢s hay otro que, al igual que El Solitario, se dedica a atracar bancos en la costa levantina y del que por el momento no se conoce su identidad. Es el nuevo Solitario. Aparte de los espa?oles, hay centenares de extranjeros que se han refugiado bajo el c¨¢lido sol espa?ol tras sentir que la polic¨ªa de sus pa¨ªses les pisaba los talones.

Te¨®ricamente, todos los polic¨ªas, guardias civiles, ertzainas y mossos d'esquadra tienen entre sus funciones descubrir y capturar a cualquier delincuente buscado por la justicia. Pero en la pr¨¢ctica no hab¨ªa nadie que se ocupara de centralizar y canalizar toda la informaci¨®n sobre estos individuos. As¨ª que el Gobierno decidi¨® crear en 2004 el Grupo de Localizaci¨®n de Fugitivos, dependiente de la Comisar¨ªa General de Polic¨ªa Judicial, que dirige Juan Antonio Gonz¨¢lez.

El citado grupo tiene entre sus objetivos "la averiguaci¨®n del paradero, localizaci¨®n y, en su caso, detenci¨®n de delincuentes peligrosos, encartados en actividades de delincuencia organizada o en delitos de especial gravedad y notoriedad". Sobre todo, de aquellos sobre los que recaen ¨®rdenes de busca y captura dictadas por jueces o tribunales espa?oles; de aquellos sobre los que haya ¨®rdenes de detenci¨®n internacional, derivadas de procedimientos de extradici¨®n o de ¨®rdenes europeas de detenci¨®n y entrega, emitidas por autoridades extranjeras; o bien de aquellas personas que figuren implicadas como sospechosas en investigaciones del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa.

Rafael Bueno Latorre, sevillano de origen, de 52 a?os, criado en Catalu?a, es uno de los criminales m¨¢s buscados de Espa?a desde hace casi un cuarto de siglo: desde que lograra escapar de la prisi¨®n de alta seguridad de Alcal¨¢-Meco (Madrid). Durante unos a?os ha sido desplazado del ranking p¨²blico de los fugitivos por El Solitario. Pero la polic¨ªa no se ha olvidado de Bueno Latorre ni un solo d¨ªa desde que el 19 de abril de 1984 consigui¨® evadirse de la c¨¢rcel.

Un atracador de bancos que act¨²a desde hace meses en Levante es el 'nuevo Solitario'

?Qui¨¦n es Rafael Bueno Latorre? Es un fuguista nato. Entre 1970 y 1983 fue detenido en varias ocasiones por atracos a sucursales bancarias, en cuya comisi¨®n siempre utilizaba armas de fuego. El 26 de mayo de 1978 se escap¨® de la prisi¨®n de Carabanchel, y fue detenido meses m¨¢s tarde.

El salto a la fama de este peligroso atracador se produjo el 12 de octubre de 1983, cuando se fug¨® del hospital Provincial de Burgos, donde se hallaba custodiado por tres polic¨ªas nacionales. Dos de ¨¦stos, Jes¨²s Postigo y Ra¨²l Santamar¨ªa, fueron abatidos a tiros, tras lo que los homicidas les arrebataron sus armas reglamentarias. Para llevar a cabo la fuga, ideada desde la prisi¨®n por Bueno, ¨¦ste se autolesion¨® dos d¨ªas antes clav¨¢ndose un objeto punzante. El plan consist¨ªa en lograr su traslado al hospital y all¨ª, auxiliado por varios compinches, poner tierra de por medio. Tuvo suerte.

Apenas un mes despu¨¦s de la sangrienta evasi¨®n del despiadado atracador, su banda secuestr¨® y asesin¨® a tiros a dos delincuentes -Manuel Andr¨¦s S¨¢nchez Manzano y Eduardo Aldama de la Red- por considerarlos soplones de la polic¨ªa. Sus cad¨¢veres fueron sepultados en las cercan¨ªas de Barcelona.

Hay que buscar las debilidades del perseguido", dice el jefe del Grupo de Localizaci¨®n

El rastro de sangre que iban dejando a su paso Bueno y su banda hizo saltar todas las alarmas. Fue declarado enemigo p¨²blico n¨²mero 1 y toda la maquinaria policial activ¨® sus resortes para capturarle. La Brigada Provincial de Polic¨ªa Judicial de Barcelona tuvo ¨¦xito: el 25 de noviembre de 1983 captur¨® al jefe de la banda y a varios de sus secuaces, a los que les fueron imputados ocho atracos, adem¨¢s de los delitos de sangre mencionados.

El apresamiento de este criminal fue celebrado como uno de los mayores logros policiales de la ¨¦poca. Sin embargo, la alegr¨ªa iba a durar bien poco. Bueno Latorre volvi¨® a demostrar sus dotes de fuguista el 19 de abril de 1984. Ese d¨ªa, en uni¨®n de otros dos reclusos, logr¨® fugarse del penal de Alcal¨¢-Meco despu¨¦s de enca?onar con dos pistolas (hechas con jab¨®n pintado de negro con tinta china) a los funcionarios de prisiones, a quienes desnudaron, para ponerse luego sus ropas y abandonar la prisi¨®n tranquilamente. Desde entonces -y han pasado ya m¨¢s de 23 a?os-, la polic¨ªa no ha vuelto a tener la menor pista de ¨¦l. Como si se lo hubiera tragado la tierra. Dicen que le han visto en Marsella (Francia) y en la costa mediterr¨¢nea espa?ola. Y hay polic¨ªas que aventuran la teor¨ªa de que est¨¢ muerto. "En todo este tiempo es imposible que no hayamos sabido nada de ¨¦l si estuviera vivo", dice un mando policial.

Dar por muertos a los delincuentes m¨¢s molestos y peligrosos es una forma de intentar cerrar aquellos casos que suponen una asignatura pendiente para la polic¨ªa o la Guardia Civil. Su libertad es como un bofet¨®n, una afrenta, una burla para la poderosa maquinaria policial y judicial. La victoria de un hombre solo frente al enorme ej¨¦rcito represivo del Estado es lo que convierte a estos individuos en leyenda y crea en su derredor un halo de misterio.

El misterio, por ejemplo, envuelve a Antonio Angl¨¦s Mart¨ªns, presunto asesino y violador de M¨ªriam Garc¨ªa, D¨¦sir¨¦e Hern¨¢ndez y Antonia G¨®mez, las ni?as de Alc¨¤sser (Valencia) a las que secuestr¨® junto con Miguel Ricart [hoy cumpliendo condena] la noche del 13 de noviembre de 1992. El triple asesinato fue un mazazo para la sociedad espa?ola. La polic¨ªa y la Guardia Civil desplegaron la mayor operaci¨®n conocida hasta entonces para cazar a Angl¨¦s. Sin embargo, ¨¦ste logr¨® eludir el cerco, huir a Portugal y embarcar de poliz¨®n en el mercante City of Plymouth, que en marzo de 1993 lleg¨® a Dubl¨ªn. Cuando el barco atrac¨® en la capital irlandesa, el poliz¨®n hab¨ªa desaparecido. Al encontrarse en aguas del puerto un flotador perteneciente al barco, la polic¨ªa sospech¨® que el asesino hab¨ªa conseguido una vez m¨¢s dar esquinazo a sus perseguidores.

Lorenzo Mart¨ªnez, el inspector que est¨¢ al frente del Grupo de Localizaci¨®n de Fugitivos, recuerda aquellos d¨ªas de b¨²squeda fren¨¦tica y desesperada del asesino de Alc¨¤sser: "Con el caso Angl¨¦s hubo una movilizaci¨®n general. Hicimos cientos de CD con las fotos y las huellas dactilares de Angl¨¦s para envi¨¢rselos directamente a todas las polic¨ªas del mundo, sin esperar a que Interpol distribuyera la ficha. La captura del supuesto asesino de las ni?as de Alc¨¤sser sigue siendo asunto catalogado con la m¨¢xima prioridad".

Desde hace m¨¢s de 13 a?os, Angl¨¦s es un fantasma. Ha habido gente que dice haberlo visto en Brasil -su tierra natal-, en Uruguay o en otros pa¨ªses de Am¨¦rica. Todas las pistas han sido rastreadas e investigadas. Sin el menor ¨¦xito. Quiz¨¢ por eso hay muchos agentes que prefieren darle por muerto. As¨ª, este enojoso caso quedar¨ªa cerrado. ?Pero d¨®nde est¨¢ el cad¨¢ver?

400.000 personas figuran reclamadas en los archivos de la polic¨ªa y la Guardia Civil

No menos enigm¨¢tico es el paradero de otro hombre que hace m¨¢s de un cuarto de siglo acapar¨® las primeras p¨¢ginas de todos los peri¨®dicos: Javier Anastasio de Espona, nacido el 25 de julio de 1954, ¨ªntimo amigo del difunto Rafael Escobedo, e implicado como ¨¦l en el asesinato de Mar¨ªa Lourdes Urquijo Moren¨¦s y Manuel de la Sierra Torres, marqueses de Urquijo, el 1 de agosto de 1980 en su chal¨¦ de Somosaguas (Madrid).

Anastasio, tras cumplir el tiempo m¨¢ximo de estancia en prisi¨®n preventiva, qued¨® en libertad provisional en diciembre de 1987. Aprovech¨® esta circunstancia para fugarse de Espa?a. Ocurri¨® unos siete meses antes de que Escobedo, yerno de los marqueses, fuera hallado ahorcado en su celda del penal de El Dueso (Cantabria), donde cumpl¨ªa condena.

Nada se supo de Anastasio hasta que el 4 de diciembre de 1990 fue entrevistado en la isla brasile?a de Buzios por el periodista Jes¨²s Quintero (El Loco de la Colina). Ahora que acaban de cumplirse 27 a?os del crimen de los Urquijo, el asunto est¨¢ a punto de prescribir para la justicia penal. Sin embargo, la Audiencia Provincial de Madrid tiene decretada contra Anastasio una orden de busca y captura vigente al menos hasta finales del presente a?o. Hoy por hoy es un fugitivo de oro.

Fugitivo de oro es tambi¨¦n -y en este caso con mayor motivo- Jos¨¦ P¨¦rez D¨ªaz, un asturiano de 56 a?os, m¨¢s conocido por el apelativo de Pepe el del Popular, ya que era director de una sucursal de esta entidad en Santander. Desapareci¨® sin dejar rastro en marzo de 1991 tras haber estafado supuestamente 36 millones de euros al banco (6.000 millones de las pesetas de entonces).

Pepe hab¨ªa seleccionado a unos 300 clientes de los m¨¢s de 2.000 que ten¨ªa su oficina. Les ofreci¨® remuneraciones superiores al 12%, un par de puntos por encima de la competencia. Ese dinero lo ingres¨®, supuestamente, en cuentas corrientes, libretas o dep¨®sitos, pero nunca lo pas¨® a la contabilidad oficial del Popular. Como la inform¨¢tica no era entonces de uso com¨²n, Pepe anotaba a m¨¢quina los saldos -m¨¢s los supuestos intereses- sin mayor problema. Adem¨¢s, aseguraba que el dinero era opaco para el Ministerio de Hacienda (el sue?o de cualquier inversor sin escr¨²pulos). A cambio, los clientes s¨®lo ten¨ªan que ser discretos.

Cuando el Banco Popular descubri¨® el pastel urdido por el empleado de la sucursal santanderina de Puertochico, ¨¦ste decidi¨® esfumarse con su esposa antes de que le echaran el guante. La polic¨ªa siempre ha sospechado que encontr¨® refugio en Chile, Argentina o M¨¦xico (sobre todo, en este ¨²ltimo pa¨ªs). Contra ¨¦l sigue vigente una orden de b¨²squeda internacional que, 16 a?os despu¨¦s, no ha dado el menor resultado.

Roberto Marcos S¨¢nchez, espa?ol de origen suizo de 35 a?os, un tipo "muy peligroso y violento", es objeto de una intensa b¨²squeda por ser el presunto autor material del apu?alamiento de tres hombres, el 13 de diciembre de 2002, en un pub de la calle de la Trinidad de Gij¨®n (Asturias). Uno de los agredidos muri¨®.

La polic¨ªa ha capturado a m¨¢s de 440 huidos desde la creaci¨®n del grupo de busca y captura

La polic¨ªa busc¨® a Marcos en Asturias, en Madrid y en Alicante, donde su familia posee diversas propiedades. Todo con resultado negativo. Seg¨²n el Grupo de Localizaci¨®n de Fugitivos, este supuesto homicida podr¨ªa haber cambiado completamente su aspecto y usar cabello largo con coleta. "Las gestiones realizadas para su localizaci¨®n ofrecen dos v¨ªas de investigaci¨®n: una centrada en el sur de la Pen¨ªnsula, y la otra, en un pa¨ªs de Latinoam¨¦rica", explica el jefe del grupo policial.

Carlos Ruiz Santamar¨ªa, El Negro, supuestamente nacido el 18 de febrero de 1967 en Guadalajara (M¨¦xico), es otro de los delincuentes a los que con m¨¢s ah¨ªnco busca el Cuerpo Nacional de Polic¨ªa. Sin embargo, ¨¦ste ni siquiera conoce su verdadera identidad ni su nacionalidad (cree que es colombiano).

El Negro, supuesto delegado del cartel de Bogot¨¢ en Espa?a, fue encarcelado tras ser detenido en el curso de la Operaci¨®n Temple, desarrollada en julio de 1999. Esa redada supuso la mayor incautaci¨®n de coca¨ªna realizada en Espa?a y posiblemente en Europa: 7.500 kilos en el buque Tamsaare y otros 5.500 kilos en una vivienda de Puebla de Carami?al (A Coru?a).

Tras el pago de una fianza de cinco millones de pesetas, los jueces le pusieron en libertad provisional por un informe psiqui¨¢trico que le atribu¨ªa un "trastorno bipolar con tendencias suicidas". El narco aprovech¨® la ocasi¨®n para escapar en diciembre de 2001. La polic¨ªa sospecha que est¨¢ en Colombia.

Buscado est¨¢ tambi¨¦n el nazi Aribert Heim, el llamado banderillero de Mauthausen, nacido el 14 junio de 1914. Quienes estuvieron en ese campo de concentraci¨®n saben qui¨¦n es: un m¨¦dico de las SS, un carnicero capaz de las mayores atrocidades, lo que le vali¨® el sobrenombre de Doctor Muerte.

Javier Anastasio, implicado en el doble crimen de los Urquijo, es un 'fugitivo de oro'

Al final de la guerra, Heim trabaj¨® de ginec¨®logo en Baden Baden (Alemania). Residi¨® en la costa levantina muchos a?os, pero desde 2004 se le ha perdido la pista. Se sospecha que se oculta en Chile. Las ¨²ltimas fotos que hay de ¨¦l datan de 1957. Alemania ofrece por ¨¦l una recompensa de 130.000 euros, y un jud¨ªo an¨®nimo, otros 100.000.

La inmensa mayor¨ªa de los malhechores buscados son hombres. Pero tambi¨¦n hay mujeres. Como Johanna Yvette Jaramillo Levoyer, ecuatoriana, nacida en 1976, contra la que hay una orden de detenci¨®n e ingreso en prisi¨®n decretada por la Secci¨®n II de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional desde 2001 por tr¨¢fico de drogas. Es buscada desde finales de octubre de 2003, y cabe la posibilidad de que haya regresado a su pa¨ªs de origen, ya que no existe referencia alguna que la sit¨²e en Espa?a, seg¨²n fuentes policiales.

"Hay que buscar la debilidad del fugitivo; llegar a conocerle muy bien para saber cu¨¢les son sus puntos d¨¦biles y qu¨¦ error puede cometer en un determinado momento. Casi todos usan documentaci¨®n falsa", explica el inspector Mart¨ªnez cuando se le pregunta por las dificultades de su trabajo.

El Grupo de Localizaci¨®n de Fugitivos lo integran hoy ocho funcionarios (con anterioridad llegaron a ser 11) que practican las detenciones o bien canalizan la informaci¨®n que permite a otros compa?eros poner a los delincuentes fuera de juego. En Espa?a no hay cazarrecompensas, como en Estados Unidos, entre otras razones porque no se pagan recompensas. No obstante, las autoridades alemanas gratificaron recientemente con 5.000 euros a Jon Gurutz T. M., un jubilado donostiarra que el pasado 9 de abril facilit¨® la detenci¨®n en San Sebasti¨¢n de uno de los dos homicidas de la joven estudiante Caroline Bernath, asesinada en un ritual sat¨¢nico en Passau (Baviera).

'El Negro' es uno de los delincuentes a los que la polic¨ªa busca con m¨¢s ah¨ªnco desde 2001

?Y c¨®mo reacciona un delincuente huido cuando siente los grilletes alrededor de sus mu?ecas? "Suelen sorprenderse, pero no se resisten. Desde que se cre¨® este grupo policial, s¨®lo recuerdo dos o tres casos en que tuvimos que emplear la fuerza para reducir a otros tantos individuos. Uno de ellos era un paquistan¨ª que hab¨ªa tiroteado a dos personas en Gran Breta?a, y que crey¨® que ¨¦ramos unos delincuentes que ¨ªbamos a quitarle un alijo de droga que llevaba encima", dice el inspector Mart¨ªnez.

Este grupo, dependiente de la Comisar¨ªa General de Polic¨ªa Judicial, tiene abiertas 1.214 operaciones por solicitudes de b¨²squeda y detenci¨®n de personas reclamadas por juzgados o tribunales nacionales o internacionales. Desde 2004 han culminado 673 de estas investigaciones con el resultado de 440 detenidos, de los que 71 estaban reclamados por la justicia espa?ola, y en cantidad similar lo son espa?oles reclamados por la justicia extranjera.

De las cifras indicadas, hay 132 operaciones que se dan por finalizadas, dado que la persona buscada ha sido detenida en su pa¨ªs o en otro, o bien las autoridades judiciales que solicitaron su localizaci¨®n y detenci¨®n a escala internacional han anulado esa orden de b¨²squeda por diferentes motivos.

"Los buscados tienen 49 nacionalidades diferentes, pero los pa¨ªses europeos son los que m¨¢s requieren nuestros servicios. Encabeza la lista Alemania, seguida de Italia, Francia, Reino Unido y B¨¦lgica, todos ellos con m¨¢s de un centenar de operaciones encomendadas, en algunas de las cuales se busca a dos, tres y hasta a nueve individuos", detalla el inspector.

La caza contin¨²a.