Los errores de Irak
La cat¨¢strofe de Irak ha servido de argumento para condenar el criterio pol¨ªtico de un presidente. Pero tambi¨¦n el criterio de muchos otros -yo entre ellos- que apoyaron la invasi¨®n. Muchos pensamos -como me dijo un amigo iraqu¨ª exiliado la noche que comenz¨® la guerra- que era la ¨²nica oportunidad que ten¨ªa su generaci¨®n de disfrutar de libertad en su pa¨ªs. Qu¨¦ lejano parece ahora ese sue?o. Desde que dej¨¦ mi cargo en Harvard, en 2005, y volv¨ª a Canad¨¢ para incorporarme a la pol¨ªtica, no dejo de pensar en el desastre de Irak, de intentar comprender de qu¨¦ forma las opiniones que debo emitir hoy en pol¨ªtica tienen que ser mejores que las que ofrec¨ªa desde las gradas. He aprendido que, para tener buen juicio en pol¨ªtica, hay que empezar por reconocer los errores.
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